El día de hoy, 17 de marzo, George Bush, Tony Blair y José María Aznar han asestado un duro golpe al orden internacional representado en la ONU. Ante ello, Koffi Annan pareciera limitarse a ordenar la salida de los inspectores de naciones unidas en Irak, hacer caso omiso de la escudos humanos ubicados en la región y calificar de manera "triunfalista" como un éxito el que EE.UU. retirara su propuesta. Queda claro que en estos momentos el orden internacional está maltrecho y herido, quizás de muerte. Queda claro que ha llegado la hora de la gente. Sólo la gente podrá detener y cambiar el rumbo de la historia. Será una lucha ardua pero nos asiste la razón y por supuesto, la convicción de que somos MAYORIA. El ultimátum de 48 horas propuesto por el presidente Bush pretende imponer la voluntad de una minoría soberbia y prepotente. Busca lograr por la fuerza lo que no pudieron conquistar mediante la razón ni el derecho. Es el intento de una minoría ilegítima de aplastar a una mayoría de la humanidad representada en millones de voces que han dicho !ya basta¡ ¡otro mundo es posible! ¡no a la guerra! ¡si a la paz!. Por primera vez en la historia, millones de personas decidieron salir a las calles a manifestar su repudio por la proximidad de la muerte de otros seres humanos. Nunca antes en la historia se habían logrado las grandes movilizaciones globales y simultáneas previas al inicio de un conflicto bélico que nos quieren imponer como hecho consumado. Infinitas han sido y serán las formas en que los pueblos del mundo expresen su descontento contra la guerra y el control unipolar del mundo. Nunca como hoy la potencia imperial ha sido evidenciada y deslegitmada. George Bush va solo a la guerra, y mas sólo se quedará. Nunca como antes se había logrado aislar la posición de la potencia más grande del mundo, que antes que perder una votación prefirió evitarla. ¿Que son 500,000 soldados comparados con los más de 30, 000,000 de personas que salieron a las calles de todo el mundo el día 15 de febrero y el 15 de marzo pasados? ¿Que son los 2 millones de soldados del ejército estadounidense contra los miles de millones de niños, mujeres, ancianos y adultos que nos oponemos a esta aventura de muerte, luchando por la vida, el amor, la paz, la dignidad y ese otro mundo que ya empieza a ser posible en cada uno de nuestros corazones ansiosos de esperanza y cambio? ¿Que son los argumentos falaces y ridículos que el presidente Bush y sus aliados han repetido hasta el cansancio contra la legitimidad y la validez ética de quienes defienden la vida y la paz? NADA, ABSOLUTAMENTE NADA. Ante los ojos del mundo ha quedado claro que esta guerra no es en nombre de la humanidad, no es en nuestro nombre. Ni siquiera, en nombre del pueblo norteamericano que el gobierno de Bush esta lejos de representar. Tampoco en nombre del pueblo inglés que no representa Blair y mucho menos del pueblo español que definitivamente no representa Aznar. El marco del derecho internacional ha sido roto y no nos quedaremos cruzados de brazos a ver que se nos imponga la estupidez de la guerra. Nuestra lucha por evitar el dominio del mundo por el imperialismo yanqui continuará en cada rincón del planeta. Con la fuerza de la razón y la legitimidad que da el ser mayoría, en las calles, en el consumo, en la política, en los juzgados, en la selva, en el campo, en la ciudad, en las costas, en los templos, en los hospitales, en las fábricas, en las universidades y escuelas y en todos los rincones y de todas las formas lucharemos contra esta fuerza destructora y pestilente. Estados Unidos libra una guerra contra el mundo, en 3 frentes: contra Irak, contra la potencias que no se subordinen a sus designios como lo es Francia y contra esta mayoría que no se resigna a vivir bajo el vasallaje de un mundo unipolar y restrictivo. Por lo tanto, la última palabra aún no ha sido escrita ni será esta la última batalla. Convocamos al pueblo de México, al mundo entero, a concentrarse frente a todas las embajadas y consulados de los EE.UU., Inglaterra y España en todo el orbe el próximo 19 de enero a las 19 horas. Convocamos a sumarnos activamente al no consumo de productos estadounidenses. Convocamos a organizarnos para detener la maquinaria de la guerra con una huelga global. La próxima cita es en la Embajada de Estados Unidos a las 19 hrs el miércoles 19 de marzo, fecha y hora del ultimátum que puso Bush nos pretende imponer. Atentamente. Iniciativa Mexicana contra la guerra: No en Nuestro Nombre