El Estado de Honduras firmó y ratificó el Convenio 169 de la OIT en el año de 1995, con el supuesto objetivo de proteger a los pueblos indígenas y tribales, los que históricamente habían sido objeto de marginación y explotación por parte de la elite de poder del país.

 

Han pasado 16 años después que la administración de Carlos Roberto Reina dio el paso trascendental de firmar el Convenio 169, con el objetivo de proteger los derechos humanos de los pueblos indígenas que habitamos en el país.

 

Hasta la fecha el Convenio continúa siendo papel mojado por las artimañas de algunos letrados que sienten ese instrumento jurídico como un inconveniente para poder continuar en el colonialismo interno que se ha venido practicando desde la independencia de Honduras.

 

El anterior Fiscal de las Etnias, Eduardo Villanueva pretendió regular el Convenio y adaptarlo a las leyes nacionales; maniobra que ha persistido hasta el día de hoy entre algunos afines al colonialismo.

 

La violación a la Convención de Viena de 1969 es flagrante, y demuestra la mala fe del sistema de justicia nacional. Dicha Convención en su artículo 26 indica que: "Pacta sunt servanda". Todo tratado en vigor obliga a las partes y debe ser cumplido por ellas de buena fe.Siendo el artículo 27 muy claro en cuanto a: El derecho interno y la observancia de los tratados. Una parte no podrá invocar las disposiciones de su derecho interno como justificación del incumplimiento de un tratado.

 

A pesar de lo anterior, más por lucro que por desconocimiento, el Alcalde de Tela, David Zaccaro y su títere afrodescendiente Braulio Martinez, continúan vendiendo las tierras de la comunidad de Triunfo de la Cruz y demás comunidades Garífunas del entorno de la Bahía de Tela.

 

Las especulaciones sobre el territorio Garífuna se vienen dando desde hace más de dos décadas cuando en Honduras comenzaron algunos empresarios a apropiarse de terrenos, utilizando la ampliación del casco urbano de la Ciudad de Tela, fundamentada en la Ley de Municipalidades del año 1992.

 

Ante un caso que se ventila en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, en contra del Estado de Honduras presentado por la comunidad de Triunfo de la Cruz, por las usurpaciones de tierra que se han dado de forma sistemática; el Alcalde de Tela David Zaccaro, procedió a crear desde 2005 un patronato paralelo, para lo cual se prestó Braulio Martínez y su grupo de sicarios.

 

El día de hoy fue citado a la Fiscalía de las Etnias el Sr. Braulio Martínez, para responder por las ventas de tierra ilegales que ha avalado desde el falso patronato creado por la municipalidad de Zaccaro. El Sr. Martínez compareció acompañado de abogados adscritos a la Secretaria de Cultura del actual régimen, convirtiéndose la presencia de esos funcionarios se convierte en un conflicto de intereses.

 

A partir del golpe de Estado en Honduras, las condiciones de los pueblos indígenas se ha tornado crítica por la ofensiva que existe de parte del gobierno de facto y su heredero. Desde la inconsecuente aprobación inconsulta de las represas en territorios indígenas hasta la creación de un centro financiero dedicado al lavado de activos, tipo Gran Cayman, con la fachada de la "ciudad modelo".

 

Mientras el Convenio 169 de la OIT, se encuentra bajo las garras de la Ley de Municipalidades y los caprichos económicos de los alcaldes; la Corte Constitucional, desconoce su propia Ley de Justicia Constitucional la que fue defenestrada por el Golpe de Estado, al igual que la democracia.

 

Organización Fraternal Negra Hondureña, OFRANEH

 

La Ceiba, 1 de Febrero del 2011