14 de noviembre: Día Mundial de la Diabetes

17/11/2016
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donald
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La diabetes es una enfermedad crónico degenerativa no transmisible (ECDNT) que se desarrolla cuando el páncreas no produce suficiente insulina (una hormona que regula el nivel de azúcar, o glucosa, en la sangre), o cuando el organismo no puede utilizar con eficacia la insulina que produce. La diabetes es un importante problema de salud pública y una de las cuatro ECDNT consideradas como prioritarias por diversos gobiernos.

 

En las últimas décadas la prevalencia y la incidencia de la enfermedad han aumentado dramáticamente. La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que mientras que en 1980 se registraban 108 millones de adultos viviendo con diabetes en todo el mundo, en 2014 la cifra se había disparado a 422 millones, lo que significa que, en un cuarto de siglo, la enfermedad aumentó casi en un 300 por ciento. La diabetes crece aceleradamente en los países de ingresos bajos y medios –en los países más desarrollados tiende a estabilizarse- y se relaciona con estilos de vida obesogénicos poco sanos, que incluyen la falta de ejercicio y actividad física, el consumo de alimentos procesados, el tabaquismo, el alcoholismo y factores hereditarios. Cada año mueren en el mundo 1.5 millones de personas a causa de esta enfermedad, en tanto otros 2. 2 millones de decesos están relacionados indirectamente con los altos niveles de glucosa en la sangre, por lo que directa o indirectamente, al menos 3.7 millones de personas perecieron en 2014 a consecuencia de esta ECDNT. En 2015, según la Federación Internacional para la Diabetes (FID), se produjeron 5 millones de decesos directa o indirectamente por la enfermedad. Para poner en contexto la gravedad de esta situación, en el mismo año perecieron 1.5 millones de seres humanos por el VIH/SIDA; 1.5 millones por tuberculosis; y 600 mil por malaria. Por lo tanto es evidente que la letalidad de la diabetes es mucho mayor y demanda acciones concretas de parte de gobiernos, organismos internacionales, organismos no gubernamentales, empresas farmacéuticas, organismos filantrópicos, etcétera.

 

La OMS advierte que todos los tipos de diabetes –i. e. tipo 1, 2, gestacional, lada y otros- pueden provocar complicaciones en muchas partes del organismo e incrementar el riesgo general de muerte prematura. Entre las posibles complicaciones se pueden citar infartos al corazón, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia renal, disfunción eréctil, amputación de piernas, pérdida de visión y daños neurológicos. Durante el embarazo, si la diabetes no se controla de forma adecuada, aumenta el riesgo de muerte fetal y otras complicaciones. La diabetes y sus complicaciones generan importantes pérdidas económicas para las personas que la padecen y sus familias, así como para los sistemas de salud y las economías nacionales por los costos médicos directos y la pérdida de trabajo y sueldos. La diabetes también es una enfermedad que empobrece, toda vez que muchos de los costos de la enfermedad deben ser asumidos por quienes la padecen y/o sus familias, lo que contribuye a disminuir su calidad de vida.

 

¿A qué se refieren los “costos de la diabetes”? Si bien en primer lugar figuran la atención hospitalaria y ambulatoria, hay que sumar a ello el aumento en el costo de los análogos de insulinas, que se prescriben cada vez más, pese a que hay pocas pruebas de que ofrezcan ventajas importantes respecto a insulinas humanas más económicas, según la OMS. El acceso a otros medicamentos esenciales como la metformina, no está garantizado del todo en los sistemas de salud de diversos países, por lo que recae en el paciente y/o sus familias, efectuar erogaciones para su adquisición.

 

La diabetes en el mundo

 

La diabetes es considerada por la OMS como el tercer factor de riesgo asociado a muerte prematura en el mundo, sólo detrás de la hipertensión arterial y el tabaquismo. Asimismo, la diabetes es la octava causa de muerte en el mundo. De los millones de decesos asociados directa o indirectamente a la enfermedad, el 43 por ciento ocurre en personas menores de 70 años. Esto es porque, para una persona que vive con diabetes, la esperanza de vida tiende a acortarse hasta en 10 años respecto al promedio nacional. Asimismo, es en los países de ingresos medios y bajos donde se acentúan las muertes en personas menores de 70 años por ésta ECDNT.

 

La FID, en su Atlas sobre la diabetes –ahora en su séptima edición-, afirma que, en la actualidad hay 415 millones de personas en todo el planeta –nótese que hay una discrepancia entre ésta cifra y la que presenta la OMS, aunque sólo difieren por 7 millones de personas-, que viven con diabetes y estima que, de seguir así la situación, para el año 2040, la cifra ascenderá a 642 millones de personas. Así, mientras que en 2015 uno de cada 11 adultos en el orbe vivía con diabetes, para el año 2040 será uno de cada 10. La misma fuente explica que uno de cada 15 adultos tiene tolerancia a la glucosa alterada, a la vez que uno de cada siete nacimientos tiene presencia de diabetes gestacional.

 

 

Tomando en cuenta el género, la FID encuentra que, a nivel planetario, es mayor el número de hombres que viven con diabetes. Así, en 2015, 215. 2 millones de varones padecían la enfermedad, frente a 199. 5 millones de féminas. En 2040, los hombres seguirán superando a las mujeres, al incrementarse las cifras a 328. 4 millones para ellos, y 313. 3 millones para ellas.

 

Ciertamente la diabetes es un padecimiento estrechamente relacionado con la urbanización. Así, en 2015, 269. 7 millones de personas que vivían con diabetes, se asentaban en ciudades. Para el 2040, las cifras habrán crecido a 477. 9 millones de seres humanos. Con todo, la diabetes también está presente en zonas rurales y también está creciendo, si bien más lentamente, considerando que mientras que en 2015 ahí vivían 145. 1 millones de personas que la padecían, en 2040 crecerá a 163. 9 millones. Como se ve, la urbanización explosiva adicionará 208. 2 millones de pacientes en los siguientes 24 años, en tanto que en las zonas rurales habrá 18. 8 millones de personas más viviendo con diabetes.

 

Los 10 países que encabezan el nada honroso listado de ser quienes albergan a la mayor cantidad de personas con diabetes a nivel global son, en orden decreciente, la República Popular China (RP China), India, Estados Unidos, Brasil, Rusia, México, Indonesia, Egipto, Japón y Bangladesh. La cantidad de personas viviendo con diabetes en la RP China es, de aproximadamente, 109. 6 millones, cifra equivalente al 90 por ciento de la población mexicana.


 

 

Un rasgo a destacar es que en el “top ten” de la diabetes a nivel mundial, figuran tanto países altamente desarrollados (Estados Unidos y Japón), como economías emergentes (RP China, India, Brasil, México, Indonesia y Egipto), un país en transición (Rusia) y otro más considerado como de ingresos bajos (Bangladesh). Dicho gráfico corrobora que la problemática es global, si bien las capacidades para prevenir por un lado, y dar tratamientos por el otro, dependen de la existencia de políticas de salud, además de los recursos materiales y humanos para hacer frente al flagelo de la enfermedad. Por ejemplo, dos terceras partes de los países de bajos ingresos, carecen de sistemas para monitorear la glucosa, o bien no están en condiciones de suministrar insulinas o metformina a los pacientes. Por lo tanto, la diabetes es también un problema de equidad y de distribución de la riqueza material y humana en el mundo.

 

Así, cuando se observa la lista de las naciones que encabezan en el planeta el gasto sanitario en diabetes, sólo figuran dos países considerados como emergentes, frente al predominio abrumador de las naciones más desarrolladas. El gasto para atender a pacientes que viven con diabetes lo encabeza Estados Unidos, seguido de la RP China, Alemania, Japón, Brasil, Francia, Canadá, Rusia, Reino Unido e Italia. Con todo, es importante señalar que los costos de la diabetes ascienden al 12 por ciento del gasto en salud en el mundo, o bien, 673 mil millones de dólares, cifra equivalente al producto interno bruto (PIB) de Suiza en 2013.

 

La diabetes en México

 

A partir del año 2000, la diabetes mellitus en México se convirtió en la primera causa de muerte entre las mujeres y la segunda entre los hombres. En 2010, esta enfermedad causó cerca de 83 000 muertes en el país. A lo largo del gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) la diabetes fue responsable de decesos en proporción de siete a uno, respecto a los que generó la delincuencia organizada y la violencia.

 

En 2015, México se ubicaba en el sexto lugar mundial por número de personas afectadas por la diabetes y hacia 2040 habrá escalado un peldaño, para ubicarse en el quinto lugar. Se estima en 11. 5 millones la cantidad de mexicanos que padecen esta ECDNT, que equivale a la población total de Cuba.

 

Según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, en 2013 la diabetes no sólo se mantenía como la primera causa de muerte en México, sino que además seguía creciendo. Las cifras son muy preocupantes: por cada 100 decesos que acontecieron en el país en ese año, casi la cuarta parte fueron provocados por la diabetes.

 

 

 

La diabetes es, para los mexicanos, un grave problema que repercute directamente en su calidad de vida, no sólo por la enfermedad en sí, sino por los tratamientos que demanda, al igual que por las discapacidades que genera. Es la primera causa de ceguera y de amputaciones no traumáticas en la población mexicana. Asimismo, una de cada tres personas que desarrollan insuficiencia renal crónica viven con diabetes. La Fundación Mexicana para la Salud señalaba en un informe publicado en julio de 2015, que los costos económicos de la diabetes se estimaron en 362 859. 82 millones de pesos, es decir, el 2. 25 por ciento del PIB –cifras de 2013. Este monto fue mayor que el crecimiento real anual de la economía mexicana registrado por el INEGI al cierre del 2014 (2.1 por ciento). Asimismo, durante el gobierno de Felipe Calderón, el gasto para dar atención médica y por discapacidades derivados de la diabetes correspondió al doble del gasto que se destinó al programa Oportunidades, el cual había sido el principal programa social del gobierno federal, lo que implicó de manera implícita que la diabetes le restó posibilidades y viabilidad financiera a la atención de otras enfermedades y padecimientos, o bien a otros rubros encaminados a contribuir al desarrollo y el bienestar de la población. Evidentemente hay mucho por hacer tanto por parte de las autoridades como de la sociedad y en una entrega posterior se analizarán diversas propuestas para lidiar con esta emergencia sanitaria.

 

 

El día mundial de la diabetes

 

 

Por ahora baste señalar que hoy es el día mundial de la diabetes. Fue instaurado por la Federación Internacional para la Diabetes y la Organización Mundial de la Salud en 1991, como respuesta al alarmante aumento de los casos de esta enfermedad en el mundo. En 2007, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) celebró por primera vez este día tras la aprobación de una resolución –en diciembre de 2006- lo que elevó al ya existente día mundial de la diabetes a una conmemoración oficial de la salud de la ONU.

 

En el día mundial de la diabetes se busca concientizar en torno a la enfermedad, sus características, riesgos y también en la importancia de su prevención y tratamiento. Por ser un padecimiento que crece de manera exponencial, ya no sólo entre adultos sino cada vez más entre niños, es importante alertar a la población mundial en torno a los factores que coadyuvan a su desarrollo, a efecto de atajarlos.

 

El día mundial de la diabetes se celebra cada año el 14 de noviembre. Fue un día como hoy, pero de 1921, que Frederick Banting y Charles Best, concibieron la idea que los conduciría al descubrimiento de la insulina. Ciertamente la concientización sobre la diabetes y sus consecuencias se debe realizar diariamente, si bien cada 14 de noviembre se conjuntan los esfuerzos de la comunidad internacional en la realización de eventos y actividades específicas a un mismo tiempo.

 

Al igual que ocurre con el listón rosado, símbolo de la campaña para detectar y combatir el cáncer de mama, la diabetes tiene también un logotipo. Éste consiste en un círculo azul creado como parte de la campaña de concienciación "Unidos por la Diabetes." El logotipo fue adoptado en 2007 y desde entonces se le emplea como un elemento distintivo para llamar la atención sobre la enfermedad. Cabe destacar que hay una serie de elementos positivos en este emblema, dado que, en muchas culturas, el círculo simboliza la vida y la salud. El color azul representa el cielo que une a todas las naciones, y que además es el color de la bandera de la ONU. Asimismo, el círculo azul remite al trabajo conjunto de la comunidad internacional en respuesta al flagelo que representa la diabetes.

 

14 de noviembre 2016

 

María Cristina Rosas es profesora e investigadora en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México

 

http://www.etcetera.com.mx/articulo/14+de+noviembre%3A+D%C3%ADa+Mundial+de+la+Diabetes/50925

 

https://www.alainet.org/de/node/181740?language=es
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