Se trata de 15.000 millones de dólares. El Gobierno se justifica en el crecimiento que experimenta la economía. Esto mismo es lo que buscaba la Argentina. El Fondo Monetario Internacional (FMI) está de parabienes. Hace cinco años estaba al borde de la insolvencia por los abultados préstamos otorgados a un grupo pequeño de naciones que amenazaban con ingresar en moratoria de pagos. Hoy, Argentina cancela vencimientos en dinero en efectivo, pero lo que es más importante, Brasilia anunció que va a saldar la deuda con el organismo de un pago. El gobierno del presidente Luiz Inacio Lula da Silva decidió anticipar para antes de fin de año el pago de toda su deuda con el Fondo. El monto a saldar alcanza los 15.500 millones de dólares que vencerían a fines de 2007. La propuesta de pago anticipado fue realizada por el Ministerio de Hacienda y por el Banco Central, y aprobada por el Primer mandatario, según se informa la edición digital del diario Folha de San Pablo. “El prepago al FMI representa un momento histórico para el país y refleja una mejora significativa de los fundamentos macroeconómicos de los períodos recientes como consecuencia de las decisiones de política económica tomadas por el Gobierno”, comentó el presidente del Banco Central, Enrique Meirelles, a través de un comunicado de prensa. Brasil viene reduciendo su endeudamiento con el Fondo desde noviembre de 2003, cuando los compromisos con ese organismo alcanzaron su punto más alto: 33.700 millones de dólares. El Ministerio de Hacienda de Brasilia expresó que el dinero para los desembolsos saldrá de las reservas internacionales del Banco Central, y que superan los 67.000 millones de la moneda norteamericana. El mencionado ministerio agregó que el pago anticipado al organismo multilateral de crédito no altera “la buena relación entre Brasil y la institución”. Con un superávit comercial de 44.000 millones de dólares este año, se dieron las condiciones para que el emisor brasileño pudiese comprar volúmenes mayores de divisas en el mercado e incrementar las reservas. Son esos los dólares que ahora van a ser transferidos al Fondo. En Washington, este tipo de anuncios son los más esperados. “Nos complace la decisión de Brasil”, afirmó el director gerente del FMI, el español Rodrigo de Rato, a través de un comunicado del organismo. Y agregó que “esta decisión refleja la creciente fortaleza de la posición externa del país”. Más teniendo en cuenta que, a raíz de la política del Fondo en la década de los 90, muchos de los líderes políticos de los países que más influencia tiene sobre el organismo con sede en Washington exigieron una “profunda reforma” de la institución. De Rato elogió “la excelente administración” de la política económica llevada a cabo por las autoridades brasileñas que, según sus propias palabras, permitieron “la consolidación de la confianza en el mercado, el mejoramiento sostenido del rendimiento macroeconómico y un mejorado panorama de la deuda interna y externa”. La posibilidad de cortar lazos con el Fondo circula en diferentes gobiernos de la región. Argentina, desde la asunción del presidente Néstor Kirchner (2003) baraja distintas alternativas para hacerse de un préstamo con la finalidad de cancelar todos los vencimientos con el organismo y así salirse de la tutela del FMI. Brasil mantiene una “disciplina fiscal” dura, que supone un superávit fiscal de alrededor del 4,5 por ciento de su Producto Bruto Interno. Ahora hay que esperar a observar si este anuncio busca como finalidad lograr una mayor autonomía en la toma de decisiones, o si se enmarca en la clásica política de austeridad fiscal para “atraer” a las inversiones extranjeras. - Agencia Periodística del MERCOSUR http://www.prensamercosur.com.ar/