Infancia militarizada
23/02/2007
- Opinión
Neuquén
Cada sábado por la mañana, cien chicos de entre 8 y 16 años forman las filas que rige el sargento Matlega. En una entrevista realizada en su lugar de trabajo aclaró que "es un grupo scout". Sin embargo, algunos "abandonan la actividad porque no están acostumbrados a recibir órdenes". Según el instructor, uno de los motivos que llevan a los chicos a formar parte de este pelotón se centra en el uso del uniforme: "Un pantaloncito y una camperita verde. A la mayoría les gusta desfilar. Muchos se creen que van a venir a usar una pistola", dice.
Pero los guías no reciben asesoramiento pedagógico ni están preparados para trabajar con niños de temprana edad (ver recuadro). Eludiendo el asunto, el gendarme no tuvo respuesta alguna y sólo alegó que "tienen una maestra de francés, que es la presidenta de la comisión de padres. Ella trabaja individualmente con los chicos". Agregó: "Más experiencia que cualquier otra cosa es haber estado 17 años en un grupo scout". Ya finalizando la entrevista, en tono de broma pero con seria preocupación, declaró a un colega: "Mañana voy condenado… vos sos el abogado, me tenés que salvar".
Juan Pablo Cafiero, quien fuera ministro de Desarrollo Social, denunció el adoctrinamiento militar de niños en un informe del periódico Página 12 (2001). Señaló que se trata de "militarización de la niñez" y que "es bastante difícil pensar que se podrían impartir nociones de respeto a los derechos humanos y contra la violencia, haciendo marchar a los chicos con trajes de combate y con palos que simulan armas". Esta declaración hace referencia a un episodio desatado en la provincia de Jujuy. Un grupo de padres había denunciado a Policía Infantil (PI) de impulsar a sus hijos a "hacer inteligencia, a espiar en sus casas y en las de los vecinos para luego contarlo". El jefe de la policía se defendió de las acusaciones indicando la existencia de escuelitas de GI, las cuales serían similares a las de PI.
En la misma ocasión, Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, denunció este tipo de entrenamiento y pidió la intervención de la UNICEF: "Nadie parece tener control de lo que hacen las fuerzas de seguridad", dijo. Tanto él como Cafiero señalaron que dichas escuelitas son "un dispositivo de control social".
Asentamientos neuquinos
En la provincia de Neuquén hay tres agrupamientos: Escuadras "Águilas" en Las Lajas, "Ceferino Namuncurá" en Aluminé y en capital la agrupación "Confluencia". Esta última es dirigida por el sargento Matlega desde hace cuatro años (quien además se desempeña como auxiliar de policía científica). Entre las actividades que realizan mencionó: "el deporte, entrenamiento físico, marchas para los desfiles, campamentismo. Enseñar cómo se debe desempeñar uno cuando sale a la naturaleza. A fin de año casi siempre se hace un viaje" (ver recuadro). También dijo que se colabora "en algo para lo cual los chicos puedan resultar útiles. Para el día del niño se juntó juguetes para los chiquitos que están internados en el Castro Rendón". El gendarme manifestó que su objetivo es "brindarle a la comunidad y a los chicos, los conocimientos básicos no sólo de la vida del gendarme, sino que se hace todo lo que es deporte. No sólo patear una pelota de fútbol, sino saber lo que es un reglamento. También se les da charlas en general, como las que les está brindado la municipalidad de Neuquén sobre medio ambiente".
Matlega indicó que el encuentro se realiza "los sábados, se entra a las ocho y media, se les da desayuno y la actividad termina con almuerzo en el comedor a las trece cuarenta y cinco". En lo concerniente a los pequeños que concurren, dijo: "Sólo cinco de ellos son hijos de gendarmes, los demás pertenecen a diferentes barrios. Hasta asisten algunos de General Roca y Cipolletti. Pueden inscribirse chicos de ocho a doce años y las preinscripciones se realizan la primera quincena de marzo para saber la cantidad de interesados. Depende la vacante que se tenga al comenzar el año se realiza la nueva incorporación por sorteo. Quienes no pueden ingresar quedan en lista de espera. Los jóvenes que superan los dieciséis años y han concurrido a Gendarmería Infantil, pueden seguir haciéndolo como ayudantes del encargado".
Chiquitos gendarmes en todo el país
Gendarmería Nacional (GN) suele ser caracterizada por su multiplicidad de funciones. Es una fuerza de seguridad militarizada. En tiempos de paz realiza la misma tarea que la policía. También están capacitados para intervenir en conflictos bélicos, como ocurrió en las islas Malvinas. GI se lleva acabo en casi todos los asentamientos de GN del país. Más de 180.000 niños y jóvenes han transitado por ella. Es una organización que constituye un tipo de educación complementaria. Se basa en el supuesto de que la educación familiar y escolar es insuficiente para encauzar la conducta.
En la página web de Gendarmería (www.gendarmeria.gov.ar) se detallan las características. A ella concurren niños de ocho a catorce años, que, al igual que en una carrera militar, pasan por diferentes rangos. Estos son: aspirante, patrullero y baqueano. La página menciona que el propósito es "contribuir a la formación del espíritu cívico y patriótico, y a la salud física y moral". El plan educacional es programado por el jefe de GI y aprobado por el jefe de la Unidad de GN. Para su financiamiento dicen "no recibir apoyo económico oficial ni privado contando sólo con el aporte desinteresado de su personal, padres y maestros y en forma aislada el padrinazgo de algún particular o empresa".
"Ni con armas ni sin armas"
No habría legislación en lo tocante a Gendarmería Infantil (GI). La Ley Nacional 23.849 promulgada en 1990 adhiere a la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño realizada un año antes. En ninguno de sus artículos se hace referencia explícita a algún tipo de educación militar que excluya las armas, como es el caso de GI. El Artículo 39 condena el reclutamiento de niños en las fuerzas armadas. Sólo se podría inferir algo sobre GI, si se lo hace indirectamente.
Desde el Departamento de Derechos Humanos del Centro de Atención a la Víctima del Delito, no se conocía el tema. "Es la primera noticia que tengo, no lo puedo creer", exclamó Gabriela Allende al plantearle el asunto. Ella realiza talleres de reflexión y prevención sobre los derechos del niño. Se llevan a cabo en escuelas y también con adultos. Después de ojear la página web de GN y asombrada de oír las palabras Gendarmería Infantil, una seguida de la otra, habló del tema. El resultado de su entrevista fue una total negativa a las escuelitas: "desde lo personal te diría que todo lo que tiene que ver con un ejercicio militar de los chicos no me parece sano". Paradójicamente su padre y su hermano han sido parte de las fuerzas armadas. Pero a ella le parece importante "no inculcar la ley por la ley misma, sino reflexionar al respecto".
Si bien es una educación sin armas Gabriela Allende afirma que "habría que ver la ideología que trae aparejada. Si forman y saludan como soldados tiene una fuerte presencia del sistema militar". Ella también repudia estas prácticas porque "los derechos del niño nacen a partir de la necesidad de brindarles protección en situaciones de guerra. Ideológicamente no sólo las armas pesan en la formación de un niño".
Al preguntarle sobre qué dice la legislación del menor al respecto declaró: "la ley 2.302 no habla de esto, debe haber algo escrito que no lo avale. Lo que pasa es que nosotros traemos aparejada toda una historia respecto a los militares. Mi generación es una generación ausente prácticamente". El origen de GI se remonta a 1944, pero fue durante la última dictadura que recién se crean de manera sistemática. El agrupamiento más numeroso es el de San Juan, creado en 1976, con 381 integrantes. El hecho de que las escuelitas hayan sido difundidas en aquel entonces puede, según Gabriela Allende, "constituir un elemento de invalidación".
Afirmó también que a pesar de que le "gustaría conocer más el programa, los chicos no deberían tener este tipo de prácticas. Esto tiene que ver con los padres también y con cómo cada uno cría a sus hijos". Ella a los suyos "no los mandaría, ni con armas ni sin armas".
Crear cuerpos dóciles
Sumir a los individuos en la obediencia y el orden es hacerlos útiles a un fin determinado. "Los espacios reales y virtuales se cuadriculan y las instituciones de secuestro hacen encajar en ellas el cuerpo y el tiempo productivo". En su obra "Vigilar y castigar", el filósofo Michel Foucault comprendió el alcance y significación de la disciplina. Explica que entre fines del siglo XVII y XIX, hay un tipo de poder que se articula directamente sobre los cuerpos: el bio-poder. La sociedad burguesa debía crear cuerpos dóciles: productivos y útiles como fuerza de trabajo para el floreciente capitalismo.
Gendarmería Infantil sería un vestigio de aquella sociedad que utilizaba la norma y el examen para encauzar a las personas. Posee la mayor parte de las características con que Foucault describe el dispositivo disciplinario:
-La principal función es enderezar conductas.
-Se atribuye la necesidad de la educación complementaria a la crisis de las instituciones. Éstas eran el eje principal del dispositivo porque permitían la dominación y el orden.
-Hay un sistema preciso de mando para el cual sólo hay una respuesta obligada: obediencia rápida y ciega. La eficacia reposa en la brevedad.
-Gestos como el saludo, la formación y el desfile son actos que se elaboran temporalmente. Se descomponen en elementos cuyo orden de sucesión está prescrito. La utilidad del tiempo se mide en exactitud y rapidez
-Cada individuo se halla incluido en una serie temporal que define su rango. El rango es la unidad de la disciplina. Si se sigue la norma se asciende, sino se retrocede.
-En el centro de la seriación del tiempo se encuentra el ejercicio. Éste es una "tecnología política del cuerpo y la duración". Se da privilegio a los castigos del orden del ejercicio para hacer útil el tiempo. Castigar es encauzar la conducta, es ejercitar.
-El aparato disciplinario perfecto permitiría a una sola mirada vigilarlo todo. El paradigma de observatorio ideal es el campamento militar.
-Control del cuerpo: el examen hace de cada individuo un caso. Esta individualidad descriptible es a su vez un medio de control y un método de dominación. Los individuos llegan a ser el lugar de un saber que ellos mismos forman, o ser objetos de un saber que permite a su vez, nuevas formas de control.
Cada sábado por la mañana, cien chicos de entre 8 y 16 años forman las filas que rige el sargento Matlega. En una entrevista realizada en su lugar de trabajo aclaró que "es un grupo scout". Sin embargo, algunos "abandonan la actividad porque no están acostumbrados a recibir órdenes". Según el instructor, uno de los motivos que llevan a los chicos a formar parte de este pelotón se centra en el uso del uniforme: "Un pantaloncito y una camperita verde. A la mayoría les gusta desfilar. Muchos se creen que van a venir a usar una pistola", dice.
Pero los guías no reciben asesoramiento pedagógico ni están preparados para trabajar con niños de temprana edad (ver recuadro). Eludiendo el asunto, el gendarme no tuvo respuesta alguna y sólo alegó que "tienen una maestra de francés, que es la presidenta de la comisión de padres. Ella trabaja individualmente con los chicos". Agregó: "Más experiencia que cualquier otra cosa es haber estado 17 años en un grupo scout". Ya finalizando la entrevista, en tono de broma pero con seria preocupación, declaró a un colega: "Mañana voy condenado… vos sos el abogado, me tenés que salvar".
Juan Pablo Cafiero, quien fuera ministro de Desarrollo Social, denunció el adoctrinamiento militar de niños en un informe del periódico Página 12 (2001). Señaló que se trata de "militarización de la niñez" y que "es bastante difícil pensar que se podrían impartir nociones de respeto a los derechos humanos y contra la violencia, haciendo marchar a los chicos con trajes de combate y con palos que simulan armas". Esta declaración hace referencia a un episodio desatado en la provincia de Jujuy. Un grupo de padres había denunciado a Policía Infantil (PI) de impulsar a sus hijos a "hacer inteligencia, a espiar en sus casas y en las de los vecinos para luego contarlo". El jefe de la policía se defendió de las acusaciones indicando la existencia de escuelitas de GI, las cuales serían similares a las de PI.
En la misma ocasión, Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz, denunció este tipo de entrenamiento y pidió la intervención de la UNICEF: "Nadie parece tener control de lo que hacen las fuerzas de seguridad", dijo. Tanto él como Cafiero señalaron que dichas escuelitas son "un dispositivo de control social".
Asentamientos neuquinos
En la provincia de Neuquén hay tres agrupamientos: Escuadras "Águilas" en Las Lajas, "Ceferino Namuncurá" en Aluminé y en capital la agrupación "Confluencia". Esta última es dirigida por el sargento Matlega desde hace cuatro años (quien además se desempeña como auxiliar de policía científica). Entre las actividades que realizan mencionó: "el deporte, entrenamiento físico, marchas para los desfiles, campamentismo. Enseñar cómo se debe desempeñar uno cuando sale a la naturaleza. A fin de año casi siempre se hace un viaje" (ver recuadro). También dijo que se colabora "en algo para lo cual los chicos puedan resultar útiles. Para el día del niño se juntó juguetes para los chiquitos que están internados en el Castro Rendón". El gendarme manifestó que su objetivo es "brindarle a la comunidad y a los chicos, los conocimientos básicos no sólo de la vida del gendarme, sino que se hace todo lo que es deporte. No sólo patear una pelota de fútbol, sino saber lo que es un reglamento. También se les da charlas en general, como las que les está brindado la municipalidad de Neuquén sobre medio ambiente".
Matlega indicó que el encuentro se realiza "los sábados, se entra a las ocho y media, se les da desayuno y la actividad termina con almuerzo en el comedor a las trece cuarenta y cinco". En lo concerniente a los pequeños que concurren, dijo: "Sólo cinco de ellos son hijos de gendarmes, los demás pertenecen a diferentes barrios. Hasta asisten algunos de General Roca y Cipolletti. Pueden inscribirse chicos de ocho a doce años y las preinscripciones se realizan la primera quincena de marzo para saber la cantidad de interesados. Depende la vacante que se tenga al comenzar el año se realiza la nueva incorporación por sorteo. Quienes no pueden ingresar quedan en lista de espera. Los jóvenes que superan los dieciséis años y han concurrido a Gendarmería Infantil, pueden seguir haciéndolo como ayudantes del encargado".
Chiquitos gendarmes en todo el país
Gendarmería Nacional (GN) suele ser caracterizada por su multiplicidad de funciones. Es una fuerza de seguridad militarizada. En tiempos de paz realiza la misma tarea que la policía. También están capacitados para intervenir en conflictos bélicos, como ocurrió en las islas Malvinas. GI se lleva acabo en casi todos los asentamientos de GN del país. Más de 180.000 niños y jóvenes han transitado por ella. Es una organización que constituye un tipo de educación complementaria. Se basa en el supuesto de que la educación familiar y escolar es insuficiente para encauzar la conducta.
En la página web de Gendarmería (www.gendarmeria.gov.ar) se detallan las características. A ella concurren niños de ocho a catorce años, que, al igual que en una carrera militar, pasan por diferentes rangos. Estos son: aspirante, patrullero y baqueano. La página menciona que el propósito es "contribuir a la formación del espíritu cívico y patriótico, y a la salud física y moral". El plan educacional es programado por el jefe de GI y aprobado por el jefe de la Unidad de GN. Para su financiamiento dicen "no recibir apoyo económico oficial ni privado contando sólo con el aporte desinteresado de su personal, padres y maestros y en forma aislada el padrinazgo de algún particular o empresa".
"Ni con armas ni sin armas"
No habría legislación en lo tocante a Gendarmería Infantil (GI). La Ley Nacional 23.849 promulgada en 1990 adhiere a la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño realizada un año antes. En ninguno de sus artículos se hace referencia explícita a algún tipo de educación militar que excluya las armas, como es el caso de GI. El Artículo 39 condena el reclutamiento de niños en las fuerzas armadas. Sólo se podría inferir algo sobre GI, si se lo hace indirectamente.
Desde el Departamento de Derechos Humanos del Centro de Atención a la Víctima del Delito, no se conocía el tema. "Es la primera noticia que tengo, no lo puedo creer", exclamó Gabriela Allende al plantearle el asunto. Ella realiza talleres de reflexión y prevención sobre los derechos del niño. Se llevan a cabo en escuelas y también con adultos. Después de ojear la página web de GN y asombrada de oír las palabras Gendarmería Infantil, una seguida de la otra, habló del tema. El resultado de su entrevista fue una total negativa a las escuelitas: "desde lo personal te diría que todo lo que tiene que ver con un ejercicio militar de los chicos no me parece sano". Paradójicamente su padre y su hermano han sido parte de las fuerzas armadas. Pero a ella le parece importante "no inculcar la ley por la ley misma, sino reflexionar al respecto".
Si bien es una educación sin armas Gabriela Allende afirma que "habría que ver la ideología que trae aparejada. Si forman y saludan como soldados tiene una fuerte presencia del sistema militar". Ella también repudia estas prácticas porque "los derechos del niño nacen a partir de la necesidad de brindarles protección en situaciones de guerra. Ideológicamente no sólo las armas pesan en la formación de un niño".
Al preguntarle sobre qué dice la legislación del menor al respecto declaró: "la ley 2.302 no habla de esto, debe haber algo escrito que no lo avale. Lo que pasa es que nosotros traemos aparejada toda una historia respecto a los militares. Mi generación es una generación ausente prácticamente". El origen de GI se remonta a 1944, pero fue durante la última dictadura que recién se crean de manera sistemática. El agrupamiento más numeroso es el de San Juan, creado en 1976, con 381 integrantes. El hecho de que las escuelitas hayan sido difundidas en aquel entonces puede, según Gabriela Allende, "constituir un elemento de invalidación".
Afirmó también que a pesar de que le "gustaría conocer más el programa, los chicos no deberían tener este tipo de prácticas. Esto tiene que ver con los padres también y con cómo cada uno cría a sus hijos". Ella a los suyos "no los mandaría, ni con armas ni sin armas".
Crear cuerpos dóciles
Sumir a los individuos en la obediencia y el orden es hacerlos útiles a un fin determinado. "Los espacios reales y virtuales se cuadriculan y las instituciones de secuestro hacen encajar en ellas el cuerpo y el tiempo productivo". En su obra "Vigilar y castigar", el filósofo Michel Foucault comprendió el alcance y significación de la disciplina. Explica que entre fines del siglo XVII y XIX, hay un tipo de poder que se articula directamente sobre los cuerpos: el bio-poder. La sociedad burguesa debía crear cuerpos dóciles: productivos y útiles como fuerza de trabajo para el floreciente capitalismo.
Gendarmería Infantil sería un vestigio de aquella sociedad que utilizaba la norma y el examen para encauzar a las personas. Posee la mayor parte de las características con que Foucault describe el dispositivo disciplinario:
-La principal función es enderezar conductas.
-Se atribuye la necesidad de la educación complementaria a la crisis de las instituciones. Éstas eran el eje principal del dispositivo porque permitían la dominación y el orden.
-Hay un sistema preciso de mando para el cual sólo hay una respuesta obligada: obediencia rápida y ciega. La eficacia reposa en la brevedad.
-Gestos como el saludo, la formación y el desfile son actos que se elaboran temporalmente. Se descomponen en elementos cuyo orden de sucesión está prescrito. La utilidad del tiempo se mide en exactitud y rapidez
-Cada individuo se halla incluido en una serie temporal que define su rango. El rango es la unidad de la disciplina. Si se sigue la norma se asciende, sino se retrocede.
-En el centro de la seriación del tiempo se encuentra el ejercicio. Éste es una "tecnología política del cuerpo y la duración". Se da privilegio a los castigos del orden del ejercicio para hacer útil el tiempo. Castigar es encauzar la conducta, es ejercitar.
-El aparato disciplinario perfecto permitiría a una sola mirada vigilarlo todo. El paradigma de observatorio ideal es el campamento militar.
-Control del cuerpo: el examen hace de cada individuo un caso. Esta individualidad descriptible es a su vez un medio de control y un método de dominación. Los individuos llegan a ser el lugar de un saber que ellos mismos forman, o ser objetos de un saber que permite a su vez, nuevas formas de control.
https://www.alainet.org/en/node/119680
Del mismo autor
- Tecnologia, guerra híbrida y neo contrarrevolución 29/07/2021
- Küme Mogen: el banco mapuche 06/07/2021
- Global Investment Platform: Se avecina un nuevo mundo 13/01/2020
- Luksic, el faraón de Chile 04/12/2019
- Chile vive hoy una dictadura 29/10/2019
- Luksic y el desalojo de Mauro (II) 03/10/2019
- Luksic y el desalojo de mauro (I) 19/09/2019
- “Mauro lucha por lo que nos arrebató Luksic” 26/08/2019
- Cuestionados gobernantes dando “lecciones” de democracia a Venezuela 18/05/2018
- Venezuela: EEUU y medios afines generan alarma por situación carcelaria en la previa de elecciones 18/05/2018