La aberración de la autocensura

02/08/2007
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La peor aberración que puede ocurrirle, en todas las circunstancias, es que los periodistas y sus medios se autocensuren, es negar en otras palabras el valor mismo de nuestro trabajo, es traicionar a las sociedades a las que tenemos la obligación de servir, por ello mismo valga el mismo calificativo, es aberrante por todos conceptos que nada menos ni nada más que el Procurador General de la República, el abogado de la nación, el asesor jurídico del Presidente de la República de nombre Eduardo Medina Mora, sin pena ni rubor alguno declare o aconseje que la "autocensura es buena estrategia de protección para los comunicadores y su medios".

El Centro Nacional de Comunicación Social, A. C. CENCOS, nos envío oportunamente la información sobre la absurda declaración del personaje que tiene es sus manos la responsabilidad de lo que carecemos desde hace muchos años: hacer realidad cotidiana la tranquilidad del pueblo con la efectiva procuración de justicia en el orden federal.

Ante la falta de garantías del Estado para ejercer el periodismo, el titular de la Procuraduría General de la República PGR, Eduardo Medina Mora, considera como “buena estrategia” que los profesionales de la información que trabajen investigaciones relacionadas con el crimen organizado no firmen sus notas, para protegerse frente a una posible agresión, escribe en la entrada o lead de su boletín la organización no gubernamental.

Rebasado por el crimen organizado en materia de seguridad, el Estado, el comentario de CECOS no tiene desperdicio: "Ante este hecho tan lamentable, el procurador olvida las obligaciones constitucionales que tiene el Poder Judicial con la sociedad para garantizar el respeto a la libre expresión mexicano justifica los mecanismos de autodefensa que medios de comunicación se han visto obligados a implementar en su línea editorial para proteger a sus periodistas.

También agregaríamos, olvida el procurador Medina Mora, que por Ley el periodista debe de firmar sus notas y comentarios y no que toda la información tenga como único camino el de la nubosidad por culpa de la ineptitud policíaca, la procuración y administración de justicia en todos sus niveles.

Los ejemplos son altamente elocuentes: En Sonora, el diario Cambio de la Organización Editorial Mexicana, decidió cerrar sus puertas temporalmente ante los atentados que sufrieron sus instalaciones con granadas de fragmentación.

Otros medios, sobre todo en la frontera norte, han recurrido a la autocensura, al modificar su línea editorial en prejuicio de su audiencia, son los diarios El Norte y Milenio que decidieron que los reporteros que cubren información relacionada con el narcotráfico no firmen sus notas, y acordaron que no se profundice en las investigaciones de hechos violentos concretándose a los hechos y la versión oficial, siguiendo la línea que tomaron El Imparcial de Hermosillo, El Mañana de Nuevo Laredo, así como Televisa Monterrey.

Asimismo, el semanario Proceso emitió un aviso a los lectores en su número 1583 del 4 de marzo en el que sostiene, nos recuerda CENCOS:

“Los cárteles del narcotráfico continúan imponiendo su ley –la ley de la sangre– en prácticamente todo el territorio nacional, por encima de las optimistas proclamas oficiales sobre los éxitos de los operativos conjuntos policíaco-militares que emprendió el actual gobierno. Dadas esas circunstancias, Proceso asume a partir de este número la política de proteger a sus reporteros y corresponsales presentando –de manera excepcional ciertas notas y reportajes relacionados con el narcotráfico sin su firma. Del contenido de esos trabajos, de su veracidad, se hace responsable institucionalmente nuestra casa editorial”.

Las víctimas del periodismo en los últimos seis años y medio, son 24 asesinados y 7 desaparecidos, un muerto más y un secuestro más de los que registran los organismos oficiales. Ni con estas terribles cifras es aconsejable la autocensura, por lo tanto lo que es de exigirse al procurador general de la República es simple, que cumpla con su deber.

- Teodoro Rentería Arróyave es periodista y escritor mexicano, vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP.
www.ciap-felap.org
www.fapermex.com
https://www.alainet.org/en/node/122527
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