Un país con miles de Fideles

31/07/2011
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“Fidel se recupera de desnutrición”, informaba hace poco una nota de prensa en un diario guatemalteco, y añadía lo siguiente: “Fidel Castro, de 7 años, se recupera de desnutrición crónica en el Hospital Regional de Cuilapa, donde además de haber mejorado su salud, se reencontró con su madre, a quien no veía desde hacia varios meses (1).

En complemento a dicha información la misma noticia señalaba que el niño había ingresado al hospital el 16 de mayo del presente año, y estaba tan débil que ni siquiera podía ponerse en pie. Su madre lo abandonó meses atrás y lo encontró de nuevo por pura casualidad, cuando ella llevó a ese centro de atención medica a una de sus pequeña hijas.

Abandono de la niñez por parte del Estado, el gobierno y la sociedad. Tal es la dramática realidad que desnuda esta historia. Una historia que nos ilustra las consecuencias individuales de las frías estadísticas de los informes oficiales, como las del estudio reciente de la CEPAL y UNICEF, citado por la periodista Ileana Alamilla, donde se revela que el 79.7 % de la población infantil en Guatemala vive en condiciones de pobreza, y que este país ocupa el lugar 17 de un total de 18 naciones evaluadas en esta materia (2).

En Guatemala la tasa de pobreza infantil extrema asciende al 47.2 %, que representa a dos millones 978 mil niños y niñas. En relación a la desnutrición crónica, el país cuenta con la tasa más elevada de América Latina, el 54.3 % y con una prevalencia de anemia de 39.7 %, la sexta más alta en la región latinoamericana (3).

Por otra parte, el 68 % de la niñez guatemalteca carece de una casa digna, el 56.6 % no tiene servicio de letrinas  drenajes, y al 13.6 % le falta agua potable (4).

Marta Orozco, del Programa Mundial de Alimentos (PMA), informó que en Quetzaltenango (departamento occidental de Guatemala), hay un registro de dos mil 108 niños con problemas de desnutrición, y que les están ayudando con dotaciones de alimentos, tales como frijol, maíz, cereal y aceite. La citada funcionaria sostiene que tal flagelo se ha detectado en comunidades de Cabrican, El Palmar, Huitan, Coatepeque y Flores Costa Cuca, pero que sospechan de la existencia del mismo problema en otros municipios de este departamento (5).

Sin embargo, la falta de acceso inmediato a alimentos es sólo una parte del problema. Sergio Sontay Pelico, inspector de saneamiento ambiental del Centro de Salud de El Palmar, señala que en la incidencia del alto índice de desnutrición infantil en esa zona, intervienen también otros factores, como la elevada tasa de embarazos prematuros en las adolescentes y jóvenes del lugar, y la baja producción y productividad del sistema de minifundio agrícola prevalente en el lugar, ya que las pequeñas parcelas de las familias campesinas no les garantizan ni siquiera la auto-subsistencia, mucho menos la seguridad alimentaria y nutricional (6).

El mismo funcionario señala que en esa zona muchas mujeres al llegar a los 28 años de edad ya tienen hasta 10 hijo (7).

En la misma información periodística aparecen las declaraciones de Flavia María Juan, de 26 años, y quien tiene un hijo de 2 años con desnutrición crónica. Ella se queja de que su familia sólo como dos veces al día, ya que las fincas del lugar únicamente contratan por dos meses al año, con salarios de Q. 35 quetzales diarios (unos 5 dólares aproximadamente), lo que no les alcanza para sobrevivir de manera decente, ni siquiera para el breve lapso que dura la contratación del empleo temporal (8).

La infuncionalidad del minifundio en Guatemala es histórica y estructural. Genera un esquema altamente polarizante con el latifundio (su extremo opuesto),  pues constituye el eje central sobre el cual se asienta la economía rural guatemalteca desde 1954, cuando se revirtió la única reforma agraria capitalista y modernizante que ha tenido este país en los últimos doscientos años.

Estas graves deficiencias estructurales de la economía agraria guatemalteca se agudizan ahora debido a los efectos negativos del cambio climático, lo cual es admitido abiertamente por diversos funcionarios del gobierno de Colom. Por ejemplo, Fabio Zúñiga, Coordinador de la Secretaria de Seguridad Alimentaria y Nutricional (SESAN), acepta que la infuncionalidad productiva y económica del minifundio se agrava con los efectos adversos de las intensas lluvias y tormentas de los últimos años, lo cual ha incidido de manera directa sobre el descenso de la ya reducida capacidad de auto abastecimiento alimentario de la pequeña producción campesina, lo cual, según sus propias palabras, ha provocado “un desabastecimiento progresivo de los alimentos” (9).

Solamente en el sur occidental departamento de San Marcos (fronterizo con México y uno de los distritos geográficos con mayor población en el país), el citado funcionario acepta que lo que va del año 2011, se han detectado al menos 545 niños que sufren algún grado de deficiencia nutricional (10).

Frente a ello, se informa que la oficina gubernamental encargado de este problema (SESAN), a puesto en marcha un programa de distribución de dotaciones de alimentos para un mil 157 familias de esa región, y que en cuanto a las familias que cuentan con niños con desnutrición aguda, recibirán bimensualmente una dotación consistente en 50 libras de maíz, 30 de frijol y harina fortificada (11).

Tal y como el señor Zúñiga reconoce, estas ayudas alimentarias apenas son un paliativo, ya que con estas dotaciones alimentarias las familias que las reciben no alcanzan a sobrevivir más que unos treinta días (12).

El problema de fondo, según se concluye el análisis publicado recientemente por un centro de investigaciones agrarias, en ocasión de cumplirse los cinco años de haberse firmado el Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica, República Dominicana y EEUU (DR-CAFTA por sus siglas en inglés), es la creciente perdida de soberanía alimentaria para Guatemala y las otras naciones firmantes, en beneficio de las grandes corporaciones transnacionales que se abren paso en la región a través del llamado agro negocio (13).

El referido estudio señala que se ha producido un incremento del hambre y el desempleo en las aéreas rurales del país, como resultado directo de la puesta en vigencia de estos tratados de libre comercio con EEUU, impactando, según el análisis, con mayor fuerza sobre la seguridad alimentaria de alrededor de tres millones de guatemaltecos, la gran mayoría de las zonas agrarias (14).

La publicación referida enfatiza el hecho de que este país ha pasado de ser productor neto de granos básicos hasta convertirse en importador de los mismos, gastando anualmente un promedio de US $ 300 millones de dólares en importación de cereales. La oferta nacional de maíz depende en un 28 % de importaciones; el arroz de un 70 %; y el trigo depende casi en un 100 % de importaciones (15).

Junto al desestimulo de la producción nacional de granos básicos por la vía de la creciente dependencia hacia las importaciones, también influye en la escasez de alimentos y baja producción el continuo incremento en el precio de los fertilizantes que son importados, así como también el continuo desplazamiento de los cultivos de granos básicos hacia tierras marginales con la expansión de las plantaciones de palma africana, expansión que se viene produciendo en zonas donde hace poco prevalecían extensiones agrícolas de desarrollo campesino, particularmente en las tierras bajas del norte del país (16).

Finalmente, hay que decir que todo este panorama adverso de la inseguridad alimentaria y nutricional en Guatemala, se acentúa con el anuncio realizado en estos días por parte del gobierno encabezado por Álvaro Colom, en cuanto a los recortes presupuestarios por alrededor de Q. 2 mil millones de quetzales, recortes que afectarán a muchos programas ministeriales, incluyendo seguramente, a los del Ministerio de Agricultura y Ganadería, pieza clave en la solución integral y sostenible de la problemática del hambre y la desnutrición.

 Notas:

1-http://www.prensalibre.com/noticias/Fidel-recupera desnutricion_0_495550483.html

2-“El crimen del hambre”; Ileana Alamilla; http://www.prensalibre.com/opinion/crimen-hambre_0_508149277.html

3- Ibíd.

4-Ibíd.

5-“Se reportan dos mil 108 casos de desnutrición: http://www.prensalibre.com/quetzaltenango/reportan-mil-casos-desnutricion_0_508149225.html

6-Ibíd.

7-Ibíd.

8-Ibíd.

9-“Preocupa desabastecimiento progresivo de los alimentos”: Diario La Hora; http://www.lahora.com.gt/index.php/nacional/guatemala/departamental/3511-preocupa-desabastecimiento-progresivo-de-los-alimentos

10-Ibíd.

11-Ibíd.

12-Ibíd.

13-“TLC-CAUSA y agricultura: modelo de apertura comercial agudiza inseguridad alimentaria”: publicación de la Coordinadora de ONG y Cooperativas (COONGCOOP) y el Instituto IDEAR, Guatemala, julio 2011.

14-Ibíd.

15-Ibíd.

16-Ibíd.

 

- Sergio Barrios Escalante es Científico social e investigador. Ensayista y Escritor. Miembro de la Asociación para el Desarrollo Integral de la Niñez y Adolescencia (ADINA). Responsable de la revista virtual Convivencia Alterna y Raf-Tulum.

https://www.alainet.org/en/node/151561
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