Los EEUU volvieron a dar muestras de microcefalia política al votar a favor de su bloque contra Cuba, acompañado de Israel. ¿Cuál de los dos Obama –si es que hay dos-, hizo el ridículo frente a los 191 votos en contra?

Horas antes de la reunión en sesión plenaria de la Asamblea general de la ONU, el presidente de los EEUU Barack Obama había expuesto a los medios su inconformidad contra la decisión del gobierno revolucionario cubano de llevar por enésima vez a la asamblea su demanda de que fuese desmantelado el bloqueo tan genocida como inútil que el gobierno estadounidense mantiene contra la isla.

Interpretamos que lo que le picó a Obama fue que a tenor con lo que pretenden los intereses angloestadounidenses, el asunto del bloqueo elemento principal de discordia y reclamo por parte de Cuba, debía ser interpretado como una especie de “Lee Harvey Oswald” durante el proceso de normalización de las relaciones bilaterales entre los dos países: debía ser sino enterrado, disimulado con un paraban que ocultase la realidad del acto criminal, como en esas producciones hollywoodenses, donde el matón mafiosos que controla la ciudad (global) te invita a entrar en una habitación aparte, y en privado “cocinar” un acuerdo correspondiente a sus intereses. A cambio de aflojar un poco el bloqueo Cuba tendría que bajarse los pantalones… en silencio; que eso es un asunto de dos a tenor con esos intereses del guapo mafioso.  Que a nadie se le ocurriese hablar del problema; ya el presidente estadounidense había dado su “palabra”, incluso a Francisco I, el papa que ya no nos parece tan inteligente.  Y que el pueblo cubano se siga jodiendo; total, si ya habíamos aguantado más de medio siglo, unos añitos más hasta que comencemos a ceder soberanía no le harían daño a alguien. Y así, hasta que los países reunidos en la Asamblea General, se percatasen de que los EEUU siempre se saldrían con la suya. ¿Quién le dijo al activo fijo de los órganos de inteligencia estadounidenses, hoy presidente de los EEUU por segundo mandato que la resistencia del pueblo cubano contra el bloqueo genocida e inútil era producto de la misma dislexia que padece la cultura política de los gobiernos angloestadounidenses durante once presidentes?

Su “excepcionalismo” siempre les lleva a meter la pata; pero esta vez el ridículo los llevó a límites inéditos que merecen ser cantados por un ambliope Homero en los siglos que vengan; si es que la crisis climática por ecocidio averiguable lo permite. 

No fue solamente votar a favor de lo que el mismo gobierno angloestadounidense dilucidó el 17 de diciembre del 2014 como herramienta política inútil contra Cuba; a su vez adornarlo con boñigas de res durante el breve discurso en que justificaban su votación. ¿Quién le dijo al gobierno de turno de los EEUU que Cuba padece miedo alguno ante su guapería de rebaño mafioso neoyorquino?

Si como acto de buena voluntad por parte del gobierno revolucionario puede interpretarse la reinicio de las relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas en ambas capitales política; aún cuando la embajada estadounidense “funciona” sin embajador designado. Todo lo anterior sin normalidad elemental en las relaciones bilaterales, adolece de un simbolismo precario.

El que intenten cruzar del lado del adentro de la zona bloqueada en contra del pueblo y el gobierno cubano, buscando la posibilidad de empoderar a una llamada “disidencia” de mamelucos caza pesetas y antipatriotas, devenida en delincuencia sin noción del sentido, le garantizará absolutamente nada.

El representante de los EEUU que pronunció ese guapetón discurso, encarna en si mismo a la falta de ética personal y política que caracteriza a los gobiernos de turno estadounidenses. Un anciano al borde de la senilidad etaria, enfrentándose al canciller cubano, que es un joven nacido dentro del bloqueo.

No existen dos Obama, solo uno que debe jugar el rol que el Estado Profundo angloestadounidense le asignó, a cambio de llevarse como mísera propina el haber sido quien reinició las relaciones con Cuba invulnerable a las presiones de algún tipo. Rebasar la línea roja de la tarea asignada, podría acercar cada vez más la distancia que separa a su cabeza de una bala “perdida”.  Si dos miembros con pedigrí de la aristocracia angloestadounidense como John F. Kennedy y su hermano ex secretario de justicia, antecedieron a Martin Luther King y a Malcolm X en el proceso de limpieza que el mismo Estado Profundo materializó durante los complicados 60’s del siglo veinte, no  vemos inconveniente alguno de que este simpático y muy “smart” mulato termine sus días violentamente al implementar o intentar hacer una acción más allá de esa línea roja. Porque el asunto nunca ha sido desmantelar el bloqueo, ni devolver la Base ilegal de Guantánamo, ni abandonar los programas de subversión.

Mientras, el gobierno de Obama embaucó a la mayoría de los países  y gente de buena voluntad cuando hace ya diez meses proponía el acercamiento hacia una normalidad expedita entre los EEUU y Cuba. Tan despampanante fue la noticia que mucha gente se lo creyó; solo por tratar de procesar mentalmente la sorpresa de lo inverosímil. Reiteramos que el meollo del asunto es tratar de entrar del lado de adentro de la zona bloqueada  y ensayar nuevos métodos de subversión  a ver si se puede tumbar al gobierno revolucionario desde adentro mismo de su cuerpo social.

Comienza a desenfardelarse el misterio del “Glup” obamesco. Muchas cosas prometió dentro del programa presidencial de su propio país, al mismo pueblo estadounidense, y todo parece indicar que ha cumplido poco. Pero ha mandado a matar a mucha gente. Ahora mismo lo menos que podemos esperar es que se atreva a <aumentar la tensión con un Congreso ultraderechista levantando la uña del dedo gordo de un pie para cumplir algo, no ya con respecto al proceso de desmantelamiento del bloqueo contra Cuba; ni siquiera para salvar a los millones de inmigrantes dentro de su país. ¿Qué hay de la estación extendida de la caza al negro vigente hoy en todos los estados de la unión?

No nos engañemos con respecto a las visitas que gente del jet set yanqui y de la industria del entretenimiento global realizan a la Habana. Cualquiera puede bajar de Internet una foto de Rihana en descansado en una cama camera cubierta por cero paños menores, o colgar en la sala de su casa una foto de Kerry simpatizando en intercambio inédito con nosotros los negritos de la Habana Vieja, escoltado por el Historiador de la Ciudad. Como se ha cansado de cacarear Julio Iglesias (el viejo) “la vida sigue (casi) igual”. 

Quien piense que Raúl le extendió la mano de Obama no debe engañarse; eso es también una advertencia política bien clara. Cuba fue la que ganó en la pugna desde el lado de adentro del bloqueo genocida.

Durante la sesión del 27 de octubre de 2015 muchos representantes de países, pero esencialmente Bolivia, Venezuela, Nicaragua advirtieron a los EEUU que tenían plena conciencia del travestismo del gobierno estadounidense. México ratificó que jamás había sacrificado su relación de hermandad con Cuba, gobierno como Islas Salomón y Nauru expresaron una posición digna. Ecuador a nombre de la CELAC, reafirmó la coherencia de su posición. Resulta curioso que Luxemburgo al tomar la palabra representando a la Unión Europea –para explicar su voto-, experimentase un evidente momento de trastorno cuando el presidente de la sala tuvo que llamar a la disciplina a los concurrentes, que “por casualidad”, aprovecharon precisamente dicha intervención para salir a tomar agua o ir al toiollet.  El momento que atraviesa Europa es harto complicado; algunos medios advierten que la “vieja” atraviesa el nivel más bajo de su grado civiliza torio.

La gente den Cuba, en general, está recocinada con la hipocresía del gobierno angloestadounidense; quizás hubiesen podido ganarse la voluntad de algún que otro crédulo, si se hubiesen abstenido; lo que sería peor para su ya incómoda posición en un cunero en el que hace mucho que no caben.  

¿Israel? Es el mismo entuerto sionista contra la nación Palestina. Por cierto, dicen que están a punto de hacer grandes negocios con Cuba.  Pero metieron la pata en el fango, nuevamente, votando a favor del bloqueo.

Nada más que agregar; al guapetón del barrio global se le están cayendo los pantalones. Cuando los otros empiezan a denunciar lo que él imperativamente exige que se mantenga tras bastidores, es que todos saben las patas de que cojea.

Existe un solo Obama, sin entuertos. Tremendo papelazo.