Muchísimas gracias señor Secretario General de las Naciones Unidas, hermano Ban Ki-Moon, al Vicepresidente de la Asamblea de las Naciones Unidas, al Director de la FAO; a Embajadores, Cancilleres, Ministros, Ministras; a los Movimientos Sociales que acompañan este acto.

 

A nombre del Estado Plurinacional y  los movimientos sociales en especial productores de la quinua, reconocer el gran esfuerzo que hace las NNUU para iniciar con el Año Internacional de la Quinua 2013.

 

Saludar a todos los invitados especiales presentes, pero también a los oyentes de todo el mundo.

 

La quinua es el regalo ancestral de los pueblos andinos que se produce hace más de 7.00 años y que presenta como una alternativa andina ante la actual crisis alimentaria.

 

El Año Internacional de la Quinua es un reconocimiento al conocimiento y las prácticas tradicionales de los pueblos indígenas de los andes, que en armonía con la naturaleza han mantenido, controlado, preservado la quinua en su estado natural como alimento para las generaciones actuales y venideras.

 

En el mundo donde impera el capitalismo se hace y se ha hecho que las necesidades alimenticias de la población sean un negocio para lucrar y promover la codicia por la ganancia.

 

Las grandes empresas transnacionales de productos alimenticios buscan controlar la producción de alimentos y dominar los mercados mundiales imponiendo costumbres y sus alimentos.

 

Estos productos tienen como único objetivo generar ganancias, por eso estandarizan los alimentos y bebidas convirtiéndolos en alimentos globales producidos masivamente y distribuidos con las mismas fórmulas que contienen ingredientes químicos que los abaratan, pero que causan cánceres y dolencias a sus consumidores. No les interesa la salud de la humanidad sino sus ganancias y beneficios empresariales.

 

Frente a la crisis alimentaria mundial, los pueblos andinos tenemos varias propuestas, una de ellas es la quinua. Nuestros pueblos durante 7.000 años han mejorado este grano regalo de la Madre Tierra agregando y perfeccionando sus usos dietéticos medicinales y rituales.

 

En el siglo décimo sexto la invasión europea trató de eliminar el grano demonizando la quinua, prohibiendo su cultivo, almacenamiento y consumo. Desprestigiaron la quinua como alimento de los indios.

 

Yo me acuerdo perfectamente, cuando era niño la quinua era tan despreciado, igual que el indio; hoy en día la quinua es tan apreciado del gringo o del occidente.

 

Hoy se ha descubierto el verdadero y poderoso valor nutricional de la quinua, y sobre todo de la quinua real, que crece en el altiplano boliviano, a pesar de la persecución que sufrieron durante siglos y el estigma neocolonial sobre nuestro producto en el siglo XX, que le impusieron denominándola despectivamente como comida de los indios, impidiendo que el mundo conozca y la disfrute.

 

Quiero decir embajadores, embajadoras, la quinua es  vista ahora por las empresas transnacionales como una amenaza para su imperio de productos alimenticios chatarra y de poco valor nutricional y plagados de químicos que producen enfermedades.

 

Pretenden que los indígenas ahora no se beneficien de la venta de la quinua y del crecimiento de sus precios para alcanzar precios más justos. Es por esta razón que algunas ONG y las grandes empresas transnacionales le pidieron a sus gobiernos que no autoricen y se opongan a la iniciativa de Bolivia de nombrar al año 2013 como el Año Internacional de la Quinua para que este producto originario en su contenido nutricional y medicinal no sea difundido en el mundo.

 

Los gobiernos de estas empresas transnacionales se opusieron con mucha fuerza al Año Internacional de la Quinua, encabezado por el Gobierno de Estados Unidos.

 

Gracias a la conciencia de muchos países logró la aprobación del Año Internacional de la Quinua y hoy estamos trabajando junto a la FAO para dar a conocer sus virtudes y para comenzar a cambiar este modelo transnacional que ha hecho del derecho de alimentarse de los pueblos del mundo un negocio que sólo busca la ganancia y más ganancias.

 

Queremos denunciar que ahora estas empresas buscan que el Año Internacional de la Quinua fracase bajo el argumento de que la promoción de la quinua va a conducir a que el precio de este producto suba y que no sea accesible para los pueblos que la producen.

 

En Bolivia, quiero decirles hermanos, hermanas presentes acá, la producción de quinua se viene incrementando cada año. En comparación con el año pasado se ha tenido un incremento del 10 por ciento de cultivos.

 

No es verdad que debido al incremento del precio de la quinua cada vez se consumirá menos quinua en los países productores: en cuatro años el consumo de Bolivia de quinua se triplicó de 4.000 a 12 mil toneladas métricas.

 

El consumo per cápita creció de 0.35 a 1.11 kilogramos. Como estaba tan satanizado y penalizado el consumo de la quinua es mínimo, pero empieza a crecer el mercado interno para la quinua.

 

Ante la crisis alimentaria es de fundamental importancia descolonizar la alimentación convencional para nutrirnos con todos los alimentos que hacen bien a la humanidad en su conjunto.

 

Propiedades de este alimento, de este producto tan importante para la humanidad:

 

Tiene los 20 aminoácidos, incluyendo los 10 esenciales para el desarrollo humano.

Es un grano que cubre los requerimientos de lisina como la leche.

 

Este aminoácido entre otras desarrolla las células del cerebro humano, tiene alto contenido de vitaminas A, C, D, B1, B2 y ácido fólico.

 

Tiene un elevado contenido de minerales como el hierro, calcio y fósforo.

 

Si quisiéramos hacer una tabla comparativa con otros productos como trigo, soya, inclusive leche, la quinua pues tiene más gramos de cada 100 gramos y sólo leisina 5.2 gramos.

 

Argenina 7.9; Felilalina 3.8; Pistidina 2.7; Leosina 6.7; Lisina 6.2; Metionina 1.4; Creonina 4.1; Triptofano 1.2; Valina 4.6; Acido aspartico 8.1; Acido glutánico 14; Alanina 4.4; Sistina 1.4; Glicina 5.7; Prolina 4; Cerina 4.6; Tirocina 3.1

 

Investigación de científicos por los organismos internacionales demuestran este valor nutritivo de la quinua.

 

Quinua para mitigar el hambre ante el calentamiento global. Uno de los principales efectos del cambio climático provocado por el capitalismo inclemente e industrial es cada vez la escasez de agua se hace más evidente en el mundo.

 

En estudio titulado Informe especial acerca del agua en mayo del 2012 del seminario británico The Economist, advierte: “el agua es el nuevo petróleo, un recurso que cada vez se hace más caro es objeto de una demanda creciente. Los acueductos se secan, los glaciares se desvanecen, las reservas se evaporan y los ríos ya no llegan hasta el mar.

 

Yo puedo incluir con experiencia vivida en Bolivia, los pozos se secan y cuando se perfora en busca de agua el agua se encuentra cada vez más profundo y muy poco.

 

El cambio climático amenaza con empeorar esta situación. Según el estudio, cada uno de nosotros tendrá que usar menos agua si queremos que la hambruna, la pestilencia y las migraciones en masa no destruyan el planeta.

 

Como van las cosas, las guerras estallarán entre países que se disputen derechos sobre reservas de agua y ríos, el agua ya es escasa en muchos lugares y será cada vez un recurso más escaso.

 

Número de personas en el planeta expresado en billones:

2000: 6 millones

2010: 7 millones

Al 2050: 9 billones de personas

Proporción de personas que viven en países con insuficiencia crónica del agua.

 

A principios del siglo XXI 8 por ciento, 500 millones de personas. Se estima al 2050 45 por ciento, 4 billones de personas. Un billón de personas se van con hambre a la cama por falta de agua para producir alimentos.

 

La demanda creciente de agua en la agroindustria es provocada no sólo por el número creciente de bocas para ser alimentadas, pero también por el deseo de la gente de disfrutar comida más apetecible y más interesante.

 

Se necesita casi el doble de agua para producir un kilo de maní, que un kilo de hojuelas de soya; casi cuatro veces para producir un kilo de carne de res lo que se necesita para producir un kilo de pollo, y casi cinco veces más para producir un vaso de jugo de naranja que un vaso de té.

 

Uso de agua. Más 22 por ciento en industria, ocho por ciento actividad doméstica. La demanda se ha cuatro duplicado en la segunda mitad del siglo XX.

 

Ante esta situación, queridos hermanos, hermanas presentes y oyentes en todo el mundo, la producción de quinua representa una oportunidad inmejorable para satisfacer el hambre del mundo usando poco agua.

 

Habituada milenariamente a crecer en las tierras áridas de Bolivia y en los andes, la quinua requiere poco agua y es resistente a las plagas y otros fenómenos climáticos. Sólo puedo reafirmar como en mi vivencia, en mi comunidad originaria de Orinoca, la quinua resiste a la sequía y a la helada.

 

En Bolivia el 25 por ciento de los municipios son productores de  quinua, según informaciones e investigaciones hay 1.300 variedades de quinua. Primer productor del mundo, 47 por ciento de oferta mundial, Bolivia.

 

La Organización de las Naciones Unidas para Alimentación y la Agricultura, FAO, afirma que la quinua es capaz de crecer en las más duras condiciones, soportando temperaturas desde los 8 grados centígrados bajo cero hasta los 38 grados centígrados; que se puede sembrar desde el nivel del mar hasta los cuatro mil metros de altura y es resistente a la sequía y a los suelos pobres como también a la helada.

 

Finalmente, señor Secretario General de las Naciones Unidas, a los miembros de la Asamblea de las Naciones Unidas, los saberes ancestrales y sus conocimientos científicos de los pueblos indígenas son políticas para enfrentar el calentamiento global y sus consecuencias.

 

Estados y privados debemos garantizar mayor inversión no para la obtención de la plata, sino por la vida del ser humano.

 

Ante la crisis, ante las crisis, los políticos y autoridades debemos dejar de que la política sea negocio y beneficio, sino la política debe convertirse en un servicio, sacrificio y más compromiso con los pueblos del mundo.

 

Debemos implementar políticas de complementariedad y no de competitividad. Quiero decirles nuevamente, cuando hay competitividad, cuando habrá competitividad siempre habrá injusticia y pobreza.

 

Las políticas de alimentación consumista del sistema capitalista no son ninguna garantía para la salud integral ni la dignidad de la humanidad.

 

Por eso, reafirmar que la quinua tiene tantas proteínas como la leche y al no tener gluten ayuda a la dieta de algunas personas alérgicas.

 

Finalmente quiero decirles, en este Año Internacional de la Quinua 2013, debemos preguntarnos:

 

¿Estamos con la quinua real orgánica del movimiento indígena de los andes o con la comida chatarra del occidente? Y ustedes saben, lamentablemente frente a las políticas del consumismo las comidas chatarras del occidente hacen mucho daño a la humanidad.

 

Por eso hermanas y hermanos es importante incentivar la producción, su comercio justo de este producto tan importante para la vida y para la humanidad.

 

Muchas gracias.