El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el venezolano Alí Rodríguez, manifestó ayer lunes que el bloque regional que representa "va a encarar una definición de mayor precisión de estrategias, objetivos y planes", en la nueva etapa que se inicia tras el término de su gestión de dos años.

El próximo viernes 22 en Montevideo, Uruguay, Rodríguez entregará la secretaria general de la Unasur al ex presidente colombiano Ernesto Samper (1994-1998), luego de lograr importantes avances progresivos para la concreción del proyecto de integración regional.

Durante una entrevista concedida al programa Dossier, transmitido por Venezolana de Televisión (VTV), el ex Canciller venezolano indicó que las propuestas a debatir en esta nueva etapa "tiene que fundamentarse en la mayor fortaleza de la región, que es el enorme reservorio de recursos naturales".

"Ahora es cuando esta América cobra aliento y nuevos impulsos para avanzar a nuevas y más profundas transformaciones", señaló.

Unasur representa una sola razón histórica "y en ese sentido se va recobrando la unidad. Vamos paso firme a esa dirección", gracias al crecimiento y afirmación de la voluntad política de los líderes regionales, quienes "entienden que los problemas de los pueblos no se pueden resolver de forma aislada".

"Cada vez crece y se afirma más la voluntad política (...) Por supuesto que los problemas internos de cada nación absorben mucho la atención de los liderazgos, pero en comparación a 20 años, los cambios son notables", consideró.

América Latina "tiene las condiciones para tener un peso mucho mayor del que tiene actualmente en el mundo", y para lograrlo, "se requiere de acuerdos en torno a los grandes objetivos de la región".

El ex Secretario General de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), explicó que este organismo es "el ejemplo más representativo de lo que podemos hacer en la región, que es el acuerdo de países para manejar el ejercicio de la propiedad sobre un recurso natural, que en este caso es el petroleo".

La unidad de los países que no forman parte de los poderes centrales del mundo, como es el caso de Unasur, "siempre tendrá enemigos bien conocidos como los Estados Unidos y la Unión Europea", e incluso "sectores a lo interno de la región retrógrados que miran más hacia atrás que al futuro".

En el planeta "lo que predomina son los procesos de unidad que van avanzando como la Unasur y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac). No hay duda de que seguiremos avanzando, por supuesto, y (lo haremos) cada vez más con una aspiración consciente del pueblo".