Nosotras, representantes de organizaciones afiliadas a la Federación Democrática Internacional de Mujeres, amigas y colaboradoras de 18 países de la región, reunidas en Quito, Ecuador, los días del 29 al 31 de mayo de 2009, en ocasión de celebrar su V Conferencia Regional para América y el Caribe, dedicada  a la memoria de aquellas que a lo largo de los años han entregado su vida a las luchas por la independencia, por la integración de nuestra América y por el avance de las mujeres. Reafirmamos los principios fundacionales de esta organización, en su lucha por la paz y la defensa de todos los derechos humanos.

Las intensas jornadas de trabajo se centraron en el análisis y el debate de temas tan importantes para la región y el mundo, como la economía y la participación de las mujeres en la misma, el papel del Estado desde la visión femenina, la integración y la solidaridad internacional, la construcción del socialismo en el Siglo XXI, la resistencia y lucha de las mujeres en diferentes situaciones que impiden la paz y la mujer y los medios de comunicación.

Se condenó la crisis económica financiera, energética que afecta de manera particular a los países del tercer mundo y dentro de ellos a las mujeres, el aumento de conflictos armados e intervenciones militares, los desplazamientos forzosos, las profundas desigualdades sociales, el aumento de la feminización de la pobreza y la polarización de las riquezas, el saqueo de los recursos naturales, las relaciones de injusticia e inequidad, la degradación del medio ambiente, la política de rapiña y guerras imperialistas que agudizan el subdesarrollo.

Las participantes en los diferentes paneles condenamos todas las formas de discriminación contra la mujer, las distintas manifestaciones de violencia que aun existen, incluida la prostitución, el tráfico y la trata de mujeres, niñas y niños las políticas impuestas por el neoliberalismo que afectan de manera especial la salud, los derechos sexuales y reproductivos, la educación, el empleo y la seguridad social y por ende su participación política.

Reconocemos las luchas de las mujeres caribeñas en pro de la igualdad de derechos y oportunidades, contra la pobreza y violencia que sufren, sus luchas por obtener mejores condiciones de salud y su aporte a la integración regional

Condenamos la manipulación de los medios de difusión, convertidos en la herramienta fundamental del imperio en la llamada guerra de cuarta generación, que al servicio de los grandes monopolios interfieren los procesos de cambio progresistas, tergiversan la realidad, a la vez que presentan una imagen estereotipada de la mujer.

Apoyamos las luchas del movimiento social, con la certeza de que “un mundo mejor es posible y necesario”.

Nos pronunciamos por el respeto a la soberanía, autodeterminación e independencia nacional, contra toda manifestación de injerencia imperialista, así como condenamos a los reaccionarios que internamente intentan interferir en los procesos progresistas de la región.

De manera especial manifestamos el apoyo a  la defensa de la Revolución cubana, condenamos enérgicamente el bloqueo imperialista y nos solidarizamos  con la Revolución bolivariana de Venezuela, así como con los  procesos de Bolivia, Ecuador, Brasil, Paraguay.

Las delegadas a esta Conferencia resolvemos:

Ø       Luchar por la integración latinoamericana y apoyar los proyectos del ALBA,

Ø       Incentivar redes de solidaridad que permitan disminuir los efectos de la crisis económica,

Ø       Impulsar acciones por la solidaridad internacional con las causas justas en particular las de las mujeres, de apoyo a las que sufren guerras imperialistas y conflictos armados, especialmente con nuestras hermanas de Palestina y Colombia; contra el bloqueo y por el regreso de los 5 hermanos cubanos injustamente presos en cárceles de EEUU, y promover campañas por el otorgamiento de visas a Adriana y Olguita.

Ø       Unir fuerzas en la lucha contra el imperialismo y por una paz justa y duradera para todos los pueblos del mundo.

Ø       Incentivar, apoyar y exigir políticas y programas encaminados a la construcción de la igualdad y equidad entre hombres y mujeres y por la eliminación de todas las formas de violencia y discriminación, que garanticen el pleno disfrute de todos sus derechos humanos.

Ø       Impulsar de manera sistemática programas de capacitación que promuevan una mejor preparación de las mujeres para integrarse a  los procesos de cambio de la región, haciendo especial énfasis en su empoderamiento político

Ø       Profundizar en la historia del movimiento femenino del continente, en particular de las organizaciones afiliadas  a la FDIM, en su larga lucha por la igualdad, el desarrollo y la paz,

Ø       Exigir una ética en el tratamiento de la imagen y presencia de la mujer en los medios de difusión,

Ø       Aprovechar espacios comunicacionales alternativos y otros de alcance regional, como TELESUR y CUBA VISION INTERNACIONAL, que promuevan una mayor divulgación de la realidad del movimiento femenino de la región, y que contribuyan desde sus mensajes a los cambios en las relaciones de género de nuestras sociedades.

Quito, Ecuador.

Mayo, 2009