Mientras que crece el movimiento estudiantil contra la guerra, se reducen las libertades civiles, veteranos soldados condecorados menosprecian la capacidad "profesional" de las fuerzas armadas, se debilita la economía con gastos millonarios para "protegerse contra el terrorismo," la histeria sube de tono y aumentan los cuestionamientos sobre la verdadera razón para bombardear a Afganistán. Esta vez es Michel Chossudovsky, profesor de economía de la Universidad de Otawa. quien afirma que el General y jefe del ISI (la inteligencia militar paquistaní) Mahmoud Ahmad, arribó a Estados Unidos el 4 de Septiembre pasado (solo unos días antes de la destrucción de las torres gemelas) para reunirse con oficiales del departamento de estado, la CIA y el Pentágono. Una visita más del jefe de espionaje del ISI (importante pieza del ajedrez global de Washington), organismo que por décadas ha servido como trampolín de la CIA para sus operaciones clandestinas en los Caucasos, los Balcanes y Asia Central, no es de extrañarse. Lo intrigante de ello es que mientras el general se reunía con oficiales del gobierno estadounidense también se mantenía en contacto con Mohammed Atta, el supuesto líder de los piratas aéreos que se dice destruyeron el World Trade Center de Nueva York. El envío de un reporte de inteligencia del gobierno de la India a Washington y posteriores investigaciones sobre el cabecilla del ISI revelaron que a petición de este, Ahmed Umar Sheik envió $100,000 dólares a Atta, solo días antes del atentado. El General fue removido de su puesto pero lo más alarmante de todo eso, es que el reporte gubernamental hindú no solo subraya que otros oficiales del ISI tenían nexos con los piratas aéreos sino que sugiere que el ataque fue parte de una bien planificada operación de inteligencia y militar y no la acción de una célula aislada de Al Qaeda. Los vínculos de George W. Bush con el ISI paquistaní, incluyendo su reunión "de consulta" una semana antes de los ataques, levanta la cuestión de "complicidad," dice Chossudovsky. En otras palabras, el reporte del gobierno hindú dice que los piratas aéreos tenían vínculos con el ISI, que a su vez tiene contactos con el gobierno estadounidense. Eso sugiere que individuos dentro de los servicios de inteligencia y militar sabían de los contactos del ISI con Mahommed Atta el líder de los piratas, y no hicieron nada al respecto. Chossudovsky sugiere que cuando menos se de inicio a una investigación sobre el caso. Lo que es tan claro como el agua es que no hay ninguna guerra contra el terrorismo, esto es más bien una conquista con consecuencias devastadoras para el futuro de la humanidad. Los estadounidenses han sido manipulados por su gobierno y al final la verdad debe imponerse. Sobre todo debe revelarse la falsedad detrás de la guerra contra el pueblo de Afganistán, dice. Grietas en Washington y grietas en el frente La Comisión presidencial dirigida por Brent Scowcroft (Asesor de Seguridad Nacional de George Bush padre, de 1989-1993) ha propuesto quitarle al Departamento de Defensa el control de la Agencia de Seguridad Nacional, la Oficina Nacional de Reconocimiento y la Agencia Nacional de Mapas e Imágenes (con un presupuesto anual de 15,000 millones) y ponerlas bajo la tutela y jurisdicción de la Agencia Central de Inteligencia (con 3,500 millones de presupuesto) Eso podría "abrir una caja de pandora" o cuando menos exacerbar tensiones en las altas esferas del poder. Por otra parte el Coronel David H. Hackworth, el soldado más condecorado de los Estados Unidos (quien condenara la guerra de Vietnam y vaticinara la victoria de las fuerzas de Ho-Chi-Min) fue citado por Marcus Scriven del Guardián de Londres, diciendo: Yo lo pensaría dos veces antes de meterme a un campo de batalla con una unidad convencional (del ejército de Estados Unidos), ellos no están listos. Hackworth es muy crítico de la capacidad militar de los soldados (estadounidenses) de hoy. Refiriéndose a la Décima División Montañés dice, "son un montón de chavos que están más capacitados para jugar en juegos de computadora que para pelear en ese terreno". Ahora que parece que tendrán que demostrar su capacidad militar, un gran número de ellos están pidiendo que les den de baja argumentando que sus principios están contra la guerra, eso es exactamente lo que nos pasó en Vietnam, añade. ¿Cómo bloquear el acceso al petróleo del Mar Caspio a China y a Rusia? El mapa de los santuarios terroristas y los objetivos militares en el Medio Oriente y Asia Central son también en grado extraordinario el mapa de las fuentes de energía del mundo para el siglo XXI. La defensa de esos recursos energéticos, en vez de ser una confrontación entre el Islam y Occidente, será el punto de choque del conflicto global por varias décadas. Es inevitable que la guerra contra el terrorismo será percibida por muchos como una guerra en nombre de Chevron, Exxon y Arco de Estados Unidos, Total Fina Elf de Francia, British Petroleum y Royal Dutch Shell, y otras multinacionales gigantes que han invertido miles de millones en la región, escribió Frank Viviano para el San Francisco Chronicle. Pero el periodista no está solo en sus conjeturas y predicciones del mañana. El Comando Espacial de Estados Unidos en su folleto "Visión 2020" describe su objetivo como el dominio de la dimensión militar del espacio para proteger las inversiones estadounidenses. Su planificación anticipa que "la globalización de la economía mundial seguirá agrandando la brecha entre los ricos y los pobres. Por ello, Washington será "desafiado regionalmente" y necesita dominar los campos de batalla del futuro. Las nacientes grietas entre los aliados de Washington Cuando el Talibán (financiado y equipado por Washington a través del ISI) tomó Kabul en 1996, Estados Unidos mantuvo un gran silencio. Poco después los líderes afganos iban rumbo a Houston, Texas, para ser "entretenidos" por altos ejecutivos de la petrolera UNOCAL. A través del ISI paquistaní Washington ha usado al Talibán para ejecutar operaciones militares en las exrepúblicas soviéticas pero ahora las cosas han cambiado. En el juego de ajedrez actual la Alianza del Norte compuesta de tres facciones, es la reina del tablero pero su futuro es incierto. La India y Rusia están detrás de la facción comandada por el General Mohammed Fahin, Irán da su apoyo al grupo de Ismail Khan y Hez-e- Wahdt, mientras que Washington le apuesta a la milicia Uzbek dirigida por el General Rashid Dostun. Son estos últimos los que han recibido el grueso de la ayuda militar de Estados Unidos a través de pertrechos y bombardeos masivos contra las fuerzas talibanes frente a ellos. Después de varias semanas de bombardeos estadounidenses contra las filas talibanes, estos abandonaron las trincheras, baterías de artillería y tanques y se dieron a la fuga. El retroceso de los adversarios ha provocado un acelerado avance de las fuerzas de la Alianza del Norte hacia Kabul, entre ellas están las facciones de Dostun y Fahin. El sorpresivo cambio en el balance estratégico- político-militar solo presagia un baño de sangre por las calles de la capital. Mientras que Inglaterra se prepara para anunciar "medidas de emergencia nacional" que facilitarán el encarcelamiento indefinido y sin juicio de personas "sospechosas de ser terroristas," Mark Malloch Brown, Administrador de Programas de Desarrollo para la ONU vocifera que el fundamentalismo es un síntoma y no la causa de un problema. Este ha nacido del fracaso de la sociedad secular para proveer educación, estabilidad, empleos y oportunidades políticas, agrega. Malloch subraya que los gobiernos del Medio Oriente y Asia Central han usado la asistencia extranjera para reforzar sistemas políticos y políticas económicas fracasadas en lugar de promover reformas y ayuda a los pobres. El alto funcionario advirtió que si los fondos destinados hoy día a ayudar a los desesperados africanos es desviado para aliviar la catástrofe que se está gestando en el mundo musulmán, solo multiplicará el número de fundamentalistas en África.