Desde que tropas colombianas incursionaron en territorio ecuatoriano el 1 de marzo pasado se ha producido una serie de hechos sorprendentes tanto en la política interna de ese país como respecto de la llamada “computadora de Reyes”, que se habría encontrado en el campamento que tenían las FARC en Ecuador. Luego se dijo que eran tres y que todas pertenecían a Raúl Reyes, alto dirigente de las FARC muerto en el bombardeo colombiano al lugar. El caso es que las computadoras han suscitado una controversia internacional

Apenas producidos los hechos las autoridades de Colombia ofrecieron conferencias de prensa sobre su contenido, dando a conocer textos supuestamente sacados de las computadoras. Ante la reacción crítica de las naciones latinoamericanas a la violación de la soberanía de Ecuador, los desmentidos de los países a los que se quería involucrar con las FARC y las dudas surgidas en torno a las informaciones proporcionadas, el gobierno del presidente Uribe anunció que solicitaría a la policía internacional, INTERPOL, que examinara las computadoras. Se las entregaron, el 10 de marzo, diez días después de los hechos.

Mientras la INTERPOL realizaba su “análisis informático forense”, el gobierno colombiano continuó haciendo cargos a otros países y pocos días antes de que el organismo policial entregara su informe el diario español El País recibió en “exclusiva” los materiales que ya se habían dado a la publicidad después del bombardeo y algunos nuevos.

Coincidencias

En el período en que la INTERPOL hizo la autopsia de las computadoras se produjeron también otras filtraciones al diario El País y sus filiales en América Latina reproducían informaciones de la corresponsal del Grupo Prisa en Bogotá. La Razón, de Bolivia, decía que según un informe de Raúl Reyes el dirigente indígena boliviano Felipe Quispe, había solicitado a las FARC en el 2003 cursos militares para unas 10 a 20 personas y que otro tanto habían hecho el secretario general del partido Comunista y el jefe del Movimiento Sin Miedo de ese país, todos lo desmintieron. El periódico también citó entre los peticionarios a organizaciones ecuatorianas opuestas al ex presidente Lucio Gutiérrez, depuesto en abril de 2005.

A estas supuestas conexiones, todas anteriores a los gobiernos de los actuales presidentes Evo Morales y Rafael Correa, se agregaron dos versiones que involucraban al Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional, FMLN, de El Salvador, colectividad que después de combatir a las dictaduras se ha convertido en uno de los partidos políticos más importantes de esa nación. A ellos les atribuyeron haber ofrecido a las FARC “cuadros formados en Vietnam como combatientes internacionales” y, por otra parte, haberles pedido financiamiento para sus campañas políticas. De Venezuela se dijo que habían solicitado a las FARC que les transmitieran la experiencia en guerra de guerrillas.

Y para completar el cuadro, las autoridades colombianas encontraron otra computadora en vísperas de que la INTERPOL entregara su informe, esta sería de un jefe guerrillero detenido y en ella se habría encontrado un correo en el que éste informaba que habían recibido 15 mil tiros de AK47 y 300 de punto 50 y que para el otro mes llegaba el TNT y “Todo viene de Nicaragua. Ofrecen punto 50 en 80 millones”.No es de ninguna manera casual que todas estas filtraciones busquen comprometer a Ecuador, Bolivia, Venezuela y Nicaragua, porque son los países contra cuyos actuales gobiernos apunta la política exterior estadounidense.

En cuanto al FMLN, se lo incluye porque es la segunda fuerza política del país y se estima que puede ganar las elecciones presidenciales del próximo año. Curiosamente, varios miembros del FMLN en la época de la lucha armada, hoy marginados o expulsados de ese partido, se han convertido en “asesores de contrarrevoluciones” y han participado en reuniones organizadas por el actual gobierno colombiano. Y todo coincide con los objetivos geopolíticos estadounidenses en América Latina, de ahí la cabeza de este reportaje.

Informe a la medida

El informe entregado por Ronald Noble, Secretario General de la INTERPOL, ha sido cuestionado con fundamento porque mientras por un lado sostiene que Colombia no alteró el contenido de los documentos de la computadora atribuida a Raúl Reyes, por el otro señala que durante los primeros días las autoridades colombianas entraron a las computadoras y como consecuencia en una de las pruebas se detectó la “creación de 273 archivos de sistema” la “apertura de 373 archivos de sistema y de usuario” y la “modificación de 786 archivos de sistema”, lo que implica que del 1 al 3 de marzo la policía colombiana creó, abrió, modificó o suprimió en total 48 mil 55 archivos según los expertos que analizaron lo entregado por INTERPOL.

A pesar de eso, en el punto 99 del informe se sostiene que nada se creó suprimió ni modificó y al escribir estas líneas Noble, como buen representante del gobierno estadounidense, del fue responsable del Servicio Secreto, quería ir a Venezuela y Ecuador a dar conferencias de prensa para validar su documento. Y es que de esa validación dependen las sanciones que la administración Bush le quiere aplicar al presidente Hugo Chávez.

Así lo establecen las recomendaciones de la Comisión de Relaciones Internacionales del Senado estadounidense, de acuerdo al texto publicado por el diario El Tiempo de Bogotá el 6 de mayo. Se dice ahí que si del computador de Reyes “surge evidencia” de cooperación “más cercana” entre Venezuela y las FARC, crecerá la presión en el Congreso para considerar a ese país “como una nación que patrocina el terrorismo” y que en ese caso debe dictarse una ley “que garantice que las sanciones afecten a Chávez y no fortalezcan sus posibilidades de movilizar la opinión pública a su favor, tanto en Venezuela como en el resto de AL”.También se recomienda no aprobar sanciones “que dejen aislado a EU y reduzcan su margen de maniobra para empujar reformas constructivas en la región”.

Se advierte que “Cualquier nueva sanción no debe afectar las posibilidades comerciales de EU” y que “las acciones serán más fuertes si se basan en apoyo regional”, por lo que se recomienda “ser vistos” como respetuosos de la mediación de la OEA, “ser persuasivo y dejar que el garrote se use multilateralmente y no unilateralmente”.Por eso “hay que asegurarse que la información del computador se distribuya ampliamente y exista transparencia sobre como fue analizado”. Hay también un Plan Ecuador si la computadora no demuestra vínculos entre su gobierno y las FARC, plan que contempla la actuación del Departamento de Estado con la OEA para que ese país “recupere” el control de los corredores de la droga en su frontera norte, con lo que “Esta Iniciativa sería el primer reconocimiento regional de los peligros que plantea las FARC a la soberanía del Ecuador” y se proponen acciones y equipamiento militar en puertos y fronteras. En otras palabras, un Plan Colombia para América del Sur, con algunos cambios, que junto a otro para América Central y del Norte le dé a Washington el control de la región.

- Frida Modak, periodista, fue Secretaria de Prensa del Presidente Salvador Allende.