En este complicado escenario donde realizamos nuestra labor, a nuestro gremio no puedo presentarle simplemente mis congratulaciones; en lugar de la felicitación, le envío mi apoyo, respeto y reconocimiento a su trabajo en este día del y la Periodista. Quiero hacer patente también mi respaldo a todas las compañeras reporteras, redactoras, comunicadoras, radialistas, editoras y periodistas que han sido víctimas de violencia por ejercer su derecho a la palabra.

En el marco de la conmemoración del Día Internacional por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, el 25 de noviembre, 40 miembros de La Red de Intercambio Internacional por la Libertad de Expresión (IFEX) signamos un comunicado de solidaridad con las mujeres que se enfrentan a amenazas, secuestros, ataques físicos, incluyendo flagelación y asesinatos, así como acoso judicial, sexual y verbal y que están sometidas a ataques debido a su género.

IFEX circuló la lista de las mujeres asesinadas en el mundo, entre ellas Uma Singh, una periodista de 24 años, quien trabajaba en medios impresos y electrónicos, y que fue atacada violentamente y asesinada por 15 hombres en su casa, en Dhanusa, Nepal. Investigaba apropiaciones ilegales de tierras y se oponía a las amenazas a los derechos de la mujer, incluyendo la tradición local de dotes costosas.

En nuestra región, aquí a la vecindad, en mayo de 2009, las amenazas de muerte y acoso a la escritora, periodista y activista laureada Lydia Cacho aumentaron, lo que suscitó temores por su seguridad. Cacho fue vigilada y seguida por individuos armados desconocidos y había estado recibiendo intimidaciones de muerte a través de su blog, desde febrero de 2009. Tras la publicación de su primer libro en 2005, sobre la pornografía infantil en México, Cacho fue arrestada, detenida y maltratada ilegalmente antes de ser sometida a una demanda penal por difamación que duró un año. Fue liberada de todos los cargos en 2007, pero sus intentos para obtener compensación legal para su tratamiento médico han sido infructuosos.

Las entidades signatarias, entre ellas Cerigua, condenamos todas las formas de represión en contra de las ciudadanas y mujeres profesionales que ejercen sus derechos a la libre expresión, y repudiamos los casos de la violencia de género perpetrados en contra de las periodistas asesinadas. Exigimos investigación, juicio y castigo a los culpables y que se garantice la seguridad de las amenazadas e intimidadas. Nos solidarizamos con las mujeres de todo el mundo que enfrentan la injusticia y la violencia de género por cumplir con sus deberes profesionales y cívicos.

El documento también incluye una petición a las autoridades para que se garanticen las condiciones idóneas para que las mujeres puedan informar sobre cualquier tema, incluyendo los derechos de la mujer. Los gobiernos, las instituciones internacionales y los empresarios de los medios están obligados a tomar medidas concretas para poner fin a las atrocidades que nuestras colegas enfrentan en el desempeño de sus labores profesionales.

Desde este espacio llamamos a nuestras colegas a denunciar cualquier violación a la libertad de expresión y a hacer uso de los mecanismos y herramientas con que contamos para garantizar este derecho humano de carácter social y universal, que para nosotras es el ejercicio de nuestra profesión.

Guatemala, 30 de noviembre de 2009

- Ileana Alamilla, periodista guatemalteca, es directora de la Agencia CERIGUA. http://cerigua.info/portal/