El muro de Obama

14/11/2016
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muro eeuu
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Cuando algunos oyeron hablar a Donald Trump de construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México, lo consideraron algo horrible, e inclusive fue uno de sus pronunciamientos más repetidos para crear fobia entre los votantes latinos, principalmente aquellos cuyas familias quedarían, una parte de un lado del muro y otra parte de la otra.

 

Es importante destacar, que la frontera entre Estados Unidos y México no está señalada por una línea de color amarillo, pintada en el piso, que cada cinco metros tiene un letrero que anuncia, “POR FAVOR, SI USTED ES UN INMIGRANTE ILEGAL, NO PASE”.

 

En realidad, el muro a que hizo referencia Donald Trump durante su campaña electoral está edificado en más 1,400 kilómetros y el resto de la frontera, cerca de 800 kilómetros, cuenta con una cerca, de aproximadamente tres metros de altura, coronada de alambre de púas a la que se le ha agregado un alambre electrificado.

 

Además de todo eso, existe la patrulla fronteriza, integrada por decena de miles de efectivos armados, con vehículos que le permiten recorrer la frontera, auxiliados por cámaras de televisión, equipos para detectar intrusos, perros entrenados en cazar inmigrantes, aviones, helicópteros y drones.

 

Las intenciones evidentes de Trump no son similares a las de Obama. Trump no quiere que entren, Obama, aparentemente, tampoco lo quiere, eso justifica los millones de dólares gastados en la frontera, pero hasta el momento, una parte de los que han entrado, durante la administración Obama, en un número de 3 millones, han sido deportados, de ahí que al Premio Nobel de la Paz, además le llamen El Deportador en Jefe.

 

Los inmigrantes ilegales que son detenidos, van a unas cárceles privadas que se crearon en época de Clinton, donde pasan varios meses a costa de los impuestos que paga el contribuyente estadounidense. Este es un buen negocio y por eso es necesario que los inmigrantes ilegales entren, pues si no entran, se acaba el negocio. Se dice que la familia Clinton, especialmente los hermanos de Hillary, reciben una parte importante de las utilidades que produce el negocio de estas cárceles.

 

Cómo puede comprenderse, el muro tiene varias versiones, hay muchos intereses detrás de este y las consecuencias de que los inmigrantes ilegales puedan continuar entrando en Estados Unidos, entre otras, que constituyen una mano de obra barata utilizada por muchas empresas y agricultores estadounidenses, que para bajar sus costos de producción, contratan este personal y dejan sin empleo a inmigrantes que ya se encuentran viviendo legalmente en Estados Unidos.

 

Una de las más recientes decisiones de la administración Obama, ha sido enviar 150 efectivos adicionales para cuidar la frontera. Obama le está agregando altura a su muro. Si estos 150 efectivos aumentan las detenciones de ilegales, habrá más personas en las cárceles y el negocio recibirá más ingresos. Al parecer, están tratando de aprovechar los meses que le quedan.

 

En este año, hasta el mes de septiembre, se han detenido 408,870 inmigrantes ilegales, muchos de ellos niños y familias enteras que tratan de violar los controles fronterizos. De acuerdo con la información publicada por la Agencia de Aduana y Protección de Frontera (CBP) se refleja un aumento de un 23.4 por ciento en este tipo de violación. En dichas estadísticas se plantea que los niños que viajan sin acompañante son principalmente de Honduras, Guatemala y El Salvador.

 

El muro existe, y donde no está edificado, existe la cerca perimetral. En la campaña electoral, se trató de explotar la ignorancia de muchos para que fuera un argumento, que la mayoría repitiera y le restara votos a Trump.

 

Es cierto que Trump fue el primero en hablar del muro, quizás fue un recurso electoral, hablar de un símbolo, para caracterizar una posición política y llamar la atención sobre un serio problema que existe en Estados Unidos, la inmigración ilegal.

 

No puede sorprendernos que esta y otras mentiras se utilicen en las campañas electorales, ese es el sistema. Lo importante es no creer todo lo que dicen y verificar si es cierto o no.

 

13 de noviembre del 2016.

 

- Dr. Néstor García Iturbe es editor del boletín electrónico El Heraldo (Cuba) sarahnes@cubarte.cult.cu

 

https://www.alainet.org/fr/node/181676
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