China reta a Washington a investigar el laboratorio de Fort Detrick

Luego de concluidas las pesquisas de la Comisión de la OMS sobre el origen del COVID19, el gobierno de China le pidió el pasado 31 de marzo que investigue si el virus surgió por primera vez del laboratorio militar de Fort Detrick, Maryland (EEUU).

07/04/2021
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Foto: https://aumagic.blogspot.com
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El presidente Biden inicia su mandato con varios traspiés nada virtuales frente a China y Rusia, y no nos referimos a las escalinatas del Air Force 1.

 

Al presidente Putin, uno de los estadistas contemporáneos más coherentes, Biden lo llamó “asesino”, una poderosa razón otrora para declarar la guerra. Al gobierno de China, el equipo de Biden lo recibió en Anchorage, Alaska, violando el protocolo más elemental con tres piedras en cada mano y pronosticando a su delegación hasta de qué se iba a morir el presidente Xi Jinping.

 

Llamar “asesino” a Putin es suficiente motivo para que los estadounidenses vayan sopesando la posibilidad de hacerle un impeachment para sacarlo del poder por razones no de edad, sino de creciente incapacidad, porque es el equipo de Biden y no el mandatario el que estará en control de la Casa Blanca (y de buena parte del mundo).  Pero es en China con la que más tropieza y se equivoca EU.

 

Luego de concluidas las pesquisas de la Comisión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el origen del COVID19, el gobierno de China le pidió el pasado 31 de marzo  que investigue si el virus surgió por primera vez del laboratorio militar de Fort Detrick, FrederickMaryland (EU).   Fort Detrick ha sido el centro del programa de armas biológicas de EU desde 1943 hasta 2019, cuando fue cerrado intempestivamente sin ofrecer explicaciones  (Julio Yao, “El COVID19 no se originó en China”, ALAI-AMLATINA, 28 de marzo de 2020). 

 

La OMS había concluido el día anterior que es “extremadamente improbable” que el coronavirus se hubiera filtrado del laboratorio chino en Wuhan  (como acusó EU), y recomendó no realizar más estudios sobre esa posibilidad”.

 

La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Hua Chunying, preguntó: “Como saben, ya se han realizado estudios relevantes en los laboratorios de Wuhan.  ¿Cuándo estará Fort Detrick abierto a esos expertos? Esperamos que EU pueda ser tan abierto y sincero como China”. 

 

China exige reciprocidad e instó a la OMS a investigar las evidencias de brotes tempranos en otros países mucho antes de Wuhan (diciembre de 2019), tal como lo aseguraron científicos independientes de Taiwán, Corea del Sur y Japón.

 

El reto de China está plenamente justificado, pues fue el gobierno de Trump el que acusó  a China de haber deliberadamente esparcido el COVID19 desde el Instituto de Virología de Wuhan, llamándolo el “virus chino o el “virus de Wuhan”, despertando racismo y odio antichino e intentando, además, de demandar a China por su acción “genocida y criminal” y “por no alertar al mundo a tiempo”, haciéndola chivo expiatorio e inculpándola por los errores garrafales del propio  Washington en el manejo de la pandemia.  (EFE, 30 abril 2020).

 

En su paranoia antichina, Trump presionó -- no sin dificultad -- a los Servicios de Inteligencia para fabricar evidencias de que China había originado y esparcido a propósito el COVID19.

 

Robert Daly, director del Instituto Kissinger para China y Estados Unidos del Wilson Center , convirtió el COVID19 en un rabioso ataque contra el Partido Comunista de China:  “El régimen chino mintió y encubrió las noticias del coronavirus. ¿Por qué actuó así el régimen chino? Porque es un régimen autoritario con un instinto paranoico de eliminar las malas noticias. Es imposible determinar el precio que China y el mundo están pagando por este encubrimiento” (diario español La Razón).

 

China había informado puntual y detalladamente desde el principio a EU la evolución del COVID19 a través de la Comisión Conjunta EU-China.  La Inteligencia de Washington no pudo cumplir con su cometido de fabricar acusaciones contra China,  y ahora Beijing reta a EU a que invite a la OMS y a expertos internacionales independientes a que visiten este país y descubrir la verdad en Fort Detrick.  Sin embargo,  ya este laboratorio biológico fue cerrado sospechosamente en 2019.

 

China le ha lanzado una pelota a EU.  Esperamos que Biden la devuelva.

 

Julio Yao

Analista Internacional, Presidente Honorario y Presidente Encargado del Centro de Estudios Estratégicos Asiáticos de Panamá (CEEAP); Agente de Panamá ante la Corte Internacional de Justicia.

 

 

 

 

 

https://www.alainet.org/fr/node/211708
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