La Superintendencia de Competencia presentó la semana pasada un estudio sobre el mercado televisivo que confirma la posición dominante de Telecorporación Salvadoreña (TCS), emporio mediático que posee el mayor número de canales y acapara la mayoría de audiencia, pauta publicitaria y acceso a “contenidos premium”.

La referida investigación revela –por ejemplo– que TCS controla el 37% de la banda VHF donde están los canales de mayor potencia, el 85% de la publicidad televisiva y el 77% de los ingresos publicitarios totales. El grupo mediático de la familia Eserski no tiene competencia.

Así la Superintendencia confirma lo denunciado por las organizaciones de la Red por el Derecho a la Comunicación (ReDCo). De hecho, las conclusiones y recomendaciones del estudio son sobre los mismos aspectos de la Ley de Telecomunicaciones impugnados por la ReDCo en dos demandas pendientes de resolver en la Sala Constitucional.

La investigación recomienda “mejorar” el mecanismo de asignación por subasta para los medios comerciales transparentando el proceso, evitando que participen operadores que ya están en el mercado y permitiendo que la Superintendencia de Competencia verifique el otorgamiento de concesiones.

El estudio también sugiere eliminar la renovación automática de las concesiones porque su eternización impide la competencia. Además, propone reservar frecuencias radioeléctricas para el funcionamiento de televisoras públicas y comunitarias, tal como plantea la ReDCo en sus demandas de inconstitucionalidad y en el Proyecto de Ley de Radiodifusión Comunitaria.

Según la investigación, el país debe modificar el modelo de “mercado extremo” imperante en el ámbito mediático, aprobar medidas antimonopólicas que contrarresten la concentración y avanzar rápidamente en el proceso de digitalización del espectro radioeléctrico.

La publicación del estudio sucede pocos días antes de que la Sala Constitucional emita sentencia definitiva sobre las demandas contra la Ley de Telecomunicaciones (si es que los magistrados cumplen su nueva promesa de resolver “antes de agosto”). Por tanto, sus conclusiones y recomendaciones deberían ser tomadas en cuenta como insumos para la resolución.

Las recomendaciones de la investigación de la Superintendencia también coinciden con los Estándares de Libertad de Expresión para una Radiodifusión Incluyente de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y los Indicadores del Desarrollo Mediático de la UNESCO.

Asociación de Radios y Programas Participativos de El Salvador (ARPAS)

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