Israel y Arabia Saudí, dos grandes colonizadores del planeta

24/08/2015
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El hecho es manifiesto y la fuente indiscutible. Está escrito negro sobre blanco en un en un informe estadounidense titulado «Global Land and Water Grabbing» (acaparamiento mundial de tierras y aguas) publicado en la revista Golias Hebdo N° 275 (semana del 14 al 20 de febrero del 2013).

 

Israel es uno de los más grandes colonizadores del planeta y uno de los más importantes contaminadores de los territorios de África, América Latina y Asia.

 

Una colonización del orden de 20 veces la superficie de Palestina cuando Arabia Saudí, bajo la bandera de la firma Bin Laden, la firma familiar del fundador de Al Qaeda, se dirigía a África y a Asia para asegurarse tierras cultivables y poder garantizar su autosuficiencia alimentaria.

 

La experiencia de Israel a partir de la colonización palestina lo condujo a colonizar otras tierras a través del mundo en una dimensión veinte veces superior a su propia superficie y en detrimento de los pueblos y del ambiente de los países pobres.

 

En Guinea, Simandú, una montaña aislada en medio de la selva ecuatorial en los confines de Guinea. Su subsuelo contiene la más importante reserva de mineral de hierro del mundo aún sin explotar. Su valor es de varias decenas, cuando no centenas de miles de millones de dólares. El subsuelo de Guinea regurgita materias primas: bauxita, diamantes, oro, uranio, hierro, etc. Las principales firmas mineras del planeta se disputan las concesiones. Pero sus 11 millones de habitantes no disfrutan de esos tesoros. El escándalo de Simandú tiene por acusado al hombre más rico de Israel, Benny Steinmetz. Una de las más importantes operaciones de robo de las riquezas mineras de África sobre un fondo de corrupción de las élites africanas y de evasión de capitales, con la complicidad de una ex primera dama guineana.

 

En Gabón por el cultivo de jatropha, necesaria para la producción de biocarburantes.

 

En Sierra Leona la colonización israelí ocupa el 6,9% del territorio de ese país del oeste de África con riquezas diamantíferas.

 

En Filipinas la proporción de tierras “confiscadas” llega al 17,2 % de las superficies agrícolas.

 

En la República Democrática del Congo para el cultivo de la caña de azúcar además de la explotación diamantífera. Con prolongaciones en la región de los grandes lagos y proselitismo para convertir a los tutsis al judaísmo, encarando una nueva operación para forjar una nueva identidad mediante una estrategia de conquista y preservación de los intereses israelíes en la zona, en paralelo a la estrategia de esterilización de los fallachas, judíos de Etiopía en Israel. Nada oculta las contradicciones. Abundan los escándalos en el Congo Kinshasa, donde Laurent Desiré Kabila pagó con su vida sus turbios manejos otorgando la explotación diamantífera a un grupo israelí.

 

Israel está a la cabeza de los países que controlan los territorios de los países pobres junto a EE.UU., Gran Bretaña y China. Según el The Journal of the National Academy of Sciences of the United States y publicado por Golias, el 90 % de esas tierras se encuentran en 24 países la mayor parte situados en África, Asia y América Latina.

 

Desde que se produjo la crisis alimentaria del 2007/08, las empresas extranjeras se apropiaron anualmente diez millones de hectáreas de tierras agrícolas. Los nuevos cultivos se han instalado en detrimento de la jungla y de las zonas de importancia ambiental amenazadas en su biodiversidad. Utilizan abonos y pesticidas y liberan importantes cantidades de gases de efecto invernadero. Finalmente este fenómeno mina las bases de la soberanía alimentaria y desvía especialmente las corrientes de agua.

 

En los países del África anglófona…  

 

Apoyándose en los países africanos anglófonos no musulmanes, Etiopía, Uganda y Kenia, Israel ha realizado una gran penetración diplomática en el Africa anglófona obteniendo la reducción de las cuotas de agua del Nilo egipcio, la gran bufonada diplomática de la era Mubarak que le costó el poder.

 

Negociando con el egipcio Mubarak, ilusionándole con la posibilidad de una situación dinástica en favor de su hijo, Israel incitó a los estados africanos a reclamar un aumento de su cuota parte en el reparto hidráulico de los cursos de agua, alentando a los africanos con proyectos económicos y a los inversores egipcios con promesas de intervención en los proyectos israelíes. En Etiopía Israel ha financiado la construcción de decenas de proyectos para la explotación de las aguas del Nilo Azul.

 

El acceso de Israel al perímetro de la cuenca del Nilo a través de Sudán del Sur, con la colaboración francesa y estadounidense, se duplicó a partir del lanzamiento del proyecto de un canal que uniría el mar Rojo y el Mediterráneo desde Eliat. Con dos vías navegables, una para ir y otra para volver, el canal israelí competirá con ventaja con el canal de Suez y acarreará una pérdida del 50% de los ingresos egipcios, que de 8.000 millones de dólares anuales pasarán a solo 4.000 millones. Pero Egipto parece haber acelerado más que su rival israelí con el lanzamiento de la construcción de un canal complementario, en sociedad con Arabia Saudí inmediatamente después de la nueva ofensiva israelí sobre Gaza –Margen protector- llevada a cabo entre el 8 de julio y el 7 de agosto de 2014.

 

El hostigamiento israelí a la comunidad libanesa y a las africanas, especialmente Nigeria y Sierra Leona, intenta asimismo eliminar competidores en la explotación diamantífera del subsuelo africano y a agotar el flujo financiero procedente de los emigrados chiíes hacia sus correligionarios del sur del Líbano. Tratando de fragilizar el aporte de la inmigración libanesa en África y América Latina frente a la rampante colonización de tierras emprendida por Israel en ambos continentes.

 

El Mosad habría reclutado hasta periodistas árabes para vigilar a los libaneses en África, según las revelaciones realizadas al diario español El País por un exagente, el periodista argelino Said Sahnoune

 

Said Sahnoune había sido reclutado en Tel Aviv en 1998. Aprovechando su condición de periodista espiaba para el Mosad en Abidjan, en Costa de Marfil. Estaba encargado de la vigilancia de la colonia libanesa chiita en el oeste de África. Sahnoune espiaba igualmente en Túnez, pero especialmente en el Líbano después de la retirada de Israel del sur del país, que ocupaba desde el año 2000. El pago al espía argelino se realizaba en especies en Chipre, a razón de 1.500 dólares por mes más los gastos de sus misiones, lo que le permitía ganar hasta 6.000 dólares cuando se lograban las metas.

 

Israel es el más importante sostén de las dictaduras del Tercer Mundo, el aliado indefectible del régimen de apartheid en Sudáfrica. La guardia pretoriana de todos los dictadores francófonos que han robado a África. Desde José Desiré Mobutu (Zaire, RDC) hasta Omar Bongo (Gabón) a Gnassingbé Eyadema (Togo) y hasta Félix Houphouët-Boigny (Costa de Marfil) y Laurent Gbagbo, hasta Paul Biya, el presidente offshore de Camerún, cuyo territorio sirve de tránsito a los secuestradores de Boko Haram. Más allá, en Latinoamérica, en Honduras, en Colombia y en Paraguay. 

 

...y en Latinoamérica

 

La ofensiva anti-Hezbolá en América Latina tendría por objeto lanzar una cortina de humo sobre la faz odiosa del humanitarismo israelí. A camuflar la rampante colonización de tierras en Colombia y esa singular impostura que constituye la reproducción del régimen del apartheid de Palestina en Honduras. ¡Ay! Qué dolorosas reminiscencias. Israel es uno de los mayores exportadores de armas con destino a América del Sur.

 

En Colombia se considera que Israel embarcó a las fuerzas colombianas en el asalto a las FARC, tendiente a liberar a la secuestrada Ingrid Betancourt. El Estado hebreo ha asumido el control de enormes extensiones de tierra para el cultivo de la caña de azúcar. Y Honduras se ha convertido en la tierra predilecta para imponer el apartheid israelí en el territorio latinoamericano.

 

Honduras tiene, en efecto, la mayor tasa de homicidios por habitante del mundo (85,5 cada 100.000 en 2012), es decir, alrededor de 20 asesinatos por día, de los cuales el 95% sin condena, en donde la pobreza alcanza al 70% de la población, según la ONG local Foro de la Deuda Externa y que sufre además las consecuencias del golpe de Estado al Presidente Manuel Zelaya en junio de 2009 por los militares apoyados por las fuerzas de la derecha y del ámbito de los negocios.

 

Otra ganga para Israel: “Honduras es hoy como Palestina, un laboratorio para el genocidio indígena, laboratorio de técnicas de contrainsurrección, laboratorio de “guetización” y contención de los pueblos sometidos a esclavitud.

 

Es también el laboratorio para instalar un neoliberalismo absoluto, gracias a la integra cesión de soberanía de enormes regiones del país a través de la “Ley hipotecaria” y la creación de enclaves neoliberales sustraídos al territorio nacional, las “Zonas de empleo y de Desarrollo Económico” o “Ciudades modelo” o “Ciudades charters”, como también la “cesión de derechos sobre el conjunto de recursos naturales del país”, se ha escrito.

 

Otra plaga de la economía africana: la liquidación de las tierras cultivables

 

 

 

Desde 2006, cerca de 20 millones de hectáreas cultivables han sido objeto comercial en el mundo porque de aquí al 2050, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) la producción agrícola debería aumentar un 70% para responder aumento de la población. Sin embargo esta ofensiva sobre las tierras no se hace sin desvíos. Se impone el encuadramiento de las inversiones porque de otro modo podrían desequilibrar al país en cuestión, como sucedió con el coreano Daewo en Madagascar.

 

Ante la expectativa de una subida de precios de los productos o de una mayor volatilidad de los mercados, el neocolonialismo agrícola se ha convertido en una estrategia para los países que buscan asegurar su soberanía alimentaria.

 

A los fondos soberanos de los estados preocupados estratégicamente por asegurarse su aprovisionamiento, tales como los países del Golfo o China, se han sumado inversores privados locales o extranjeros. Las adquisiciones de tierras se aceleraron desde la crisis alimentaria de 2008. Arabia Saudí ha puesto en funcionamiento una sociedad pública para financiar a las empresas privadas del reino que compren tierras en el extranjero. En Mali los nuevos cultivos benefician especialmente a los inversores libios. El otorgamiento de 100.000 hectáreas a la empresa Malibya, relacionada con el exdirigente libio, el coronel Muammar Gadafi, tuvo enorme repercusión. “Las hectáreas de los libios están ubicadas en el comienzo de los canales de riego, se beneficiarán antes que nosotros”, se lamentan los campesinos “Aunque ellos digan que actúan dentro del marco de la cooperación, no entendemos muy bien cuáles son los intereses que ocultan”, resume Mamadou Goita, de la ONG de Mali África Verde. Los campesinos dudan también de las intenciones de los chinos de desarrollar el cultivo de la caña de azúcar, muy golosa de agua, Ya están cultivando 6.000 hectáreas y controlan la fábrica de azúcar Sukala.

 

Frente al aumento de nivel del agua, las Maldivas están buscando territorios de acogida. 70.000 se hacinan en Malé, un pesado plano urbano ubicado a nivel del océano Índico. Por ahora esta barrera artificial se mantiene estable y ha logrado proteger la capital de este singular estado de las Maldivas, archipiélago de 26 atolones y 1.200 islas en las que las barreras de coral se ofrecen como destino turístico mundial. Pero, ¿por cuánto tiempo más? La subida de la marea de 1987 inundó una parte de Malé y causó un profundo impacto en la población.

 

Luego el fenómeno climático del Niño provocó, en 1998, un masivo blanqueamiento de los corales: el 90% de los situados a menos de 15 metros de profundidad murieron. Más tarde el sunami de diciembre de 2004 impactó severamente en el archipiélago destruyendo dos islas e imponiendo la evacuación de otras seis y el desplazamiento de 4.000 personas sobre un total de 280.000 habitantes.

 

En las islas Kiribati sucedió otro tanto con similar reacción: frente a la subida de las aguas que las amenazan, las islas Kiribati, un archipiélago del Pacífico, se plantean comprar nuevas tierras “La alternativa es morir, desaparecer”. Las Kiribati enfrentan una subida anual de 5mm desde 1991, lo que además les produce la salinización del agua dulce. En un primer momento el Gobierno había optado por formular una política de formación y de emigración ordenada. Pero la crisis económica obliga a adoptar una posición más radical.

 

Arabia Saudí encara la financiación de empresas privadas que compren tierras en el extranjero prefiriendo Africa por su proximidad con el reino. La empresa saudí “Hail Hadco” ha alquilado ya miles de hectáreas en Sudán, 40.000 para la producción agrícola. Mientras el grupo Bin Laden especializado en obras públicas, a la cabeza de un consorcio se ha comprometido a gestionar en cierto plazo 500.000 hectáreas de arrozales en Indonesia en el marco de un proyecto agrícola de 1.600.000 hectáreas que incluye la producción de agrocarburantes.

 

Fondos buitres, evaporación de ingresos, corrupción, despilfarro de las transferencias de los fondos de inmigrantes, depredación de tierras agrícolas. África está condenada a ser un tonel de las danaides (N. de T. El "tonel de las Danaides" es una imagen que ha sido utilizada incluso en psiquiatría; por ejemplo Lacan habla de él en el Envés del Psicoanálisis. Para otros es imagen gráfica de la insatisfacción producida por el sistema de consumo desmedido. Para otros es la imagen perfecta de la decepción humana, el descontento o la frustración tras los esfuerzos inútiles por alcanzar la felicidad).

 

Paris, 21 de junio, 2015

(Traducido del francés para Rebelión por Susana Merino)

 

René Naba es periodista-escritor, fue responsable por el mundo árabe musulmán del servicio diplomático de la AFP.  Es miembro del grupo asesor del Instituto Escandinavo de Derechos Humanos y de la Asociación de Amistad Euro-Árabe.  Publica en Madaniya www.madaniya.info.

 

 

Notas:

 

(1) La economía sin brújula http://ccfd-terresolidaire.org/e_upload/pdf/ed_110110_bd.pdf?PHPSESSID=2…

 

(2) A propósito de los fondos buitres: Informe de la Plataforma Francesa Deuda y Desarrollo y del CNCD (Centro Nacional de Cooperación al Desarrollo) titulada “Un buitre puede ocultar a otro o cómo las leyes fomentan a los predadores de los países pobres endeudados, junio de 2009. L’Afrique: Un continent touché plus que d’autres par la crise financière» http://www.dia-afrique.org/suite.php ?newsid=12031 . Así como http://www.cadtm.org/spip.php ?article4654.

 

(3) A propósito de las transferencia de fondos de los inmigrantes africanos a su país natal CF. Artículo de Grgoir Allix en Le Monde, 22 de octubre de 2009.

 

(4) Bertrand Armagnac: la carrera por las tierras cultivables, Le Monde, 23 de abril de 2010. http://www.lemonde. fr/planete/ article/2010/ 04/22/la- course-aux- terres-arables- devient-preoccup ante_1341086_ 3244.html.

 

 

Fuente del original: http://www.madaniya.info/2015/06/21/israel-et-larabie-saoudite-deux-grands-colonisateurs-de-la-planete/

 

https://www.alainet.org/pt/node/171914
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