Esa cosa llamada dólar mantiene atribulado a mi pueblo; ese monstruo de pesadillas asedia los sueños libertarios de mi país.

Pregunto: ¿El control de cambio se descontroló? o ¿El monopolio de las divisas se fusionó con el de las torpezas?

Hay mucha materia de estudio para mentes inquietas, que seguro inquietarán a quienes no quieren su estudio.

Hipótesis que trabalenguas.

¿Cuántos dólares cuestan las giras internacionales de esa especie de "cancillera elfo" que la noche del lunes 6 de diciembre se encadenó en Globovisión desde Roma? ¿Cuántos toda la "cruzada" de lobistas parlamentarios que reparten cuchillos por el mundo para el cogote de su propio país?

¿Cuántos dólares costó Globovisión? ¿De dónde sacan tantos dólares gentes que no exportan nada?

Yo sé desde niño que los únicos que producen dólares en Venezuela son los obreros petroleros. Pero quienes los reparten son señores expertos en nudos de corbatas.

El socialismo será posible cuando la clase trabajadora administre y asigne las divisas que produce. Ningún funcionario, con corbata o uniforme, sustituye esta máxima.

¿Alguien recuerda aquello del "Estado burgués"?

Hace años no se escucha la palabra plusvalía en predios burocráticos. Algunos se conforman con el gazapo de la "renta petrolera", y creyeron que el enemigo era la descentralización, confundiendo el modo de producción con la división político-territorial. ¡Tamaño pelón! Vicios de la superficialidad, la falta de formación ideológica y la flojera intelectual.

Según la Constitución donde este hijo y hermano de la clase trabajadora petrolera tuvo el honor de plasmar su huella, la moneda nacional es el bolívar (aunque en lo personal siempre he creído que debería tener otro nombre genérico que no enlode a nuestros héroes y menos a Él).

Entonces, uno se pregunta así no más sin malicia, con las pobres Reservas Internacionales golpeaditas, y esta tremenda escases del bicho verde, ¿cómo Globovisión tiene semejante bojote de pautas publicitarias que invitan a invertir dólares precisamente allá donde los imprimen?

Como economista me declaro asombrado de esta extraña ecuación que omite la "crisis" para llegarle al corazón a un selecto grupo de venezolanos que si tienen dólares hasta para adquirir inmuebles de alquiler, o visas permanentes en el "paraíso"...todo en ilegales monedas extranjeras.

También vienen a los hoteles caraqueños compañías foráneas a captar dólares de venezolanos deseosos de hacer patria en un lujoso desarrollo habitacional en Bogotá o Miami.

No sé si el SENIAT y CONATEL tienen la máquina de medir estas transacciones.

Algo huele raro en el espectro radioeléctrico.

Pero sabemos por Sismondi que la economía es una ciencia moral.

No conozco a las personas que compraron Globovisión a aquellos pillos conocidos que la fundaron, pero el Presidente de la República los calificó públicamente bastante mal; pese a ello, muchos de nuestro bando se llevan chévere con el canal de la G y lo declaran como un modelo de medio audiovisual.

Cruel evaluación para una experimental televisión gubernamental que medio arrima y poco golpea.
Concluyamos por ahora con más preguntas que llegan por twitter a nuestra sala de redacción: ¿por dónde le entra el agua al coco? y ¿cuándo bebe agua el pez?

Pero la responde después de la pausa publicitaria..."ya no tiene que ir al Junquito para comer cochino frito".