“Llegó la hora que una mujer gobierne Honduras”

Xiomara Castro, Ex/primera dama de la Nación.

Tal como se esperaba, la precandidata a la presidencia de la República por el partido Libertad y Refundación (LIBRE), Xiomara Castro de Zelaya, según los sondeos a boca de urna, gana las elecciones internas y se convierte en la candidata para las elecciones generales a celebrarse en noviembre próximo. De acuerdo a los pronósticos, Xiomara obtendría un 70% de votos válidos, seguido de Nelson Ávila y Wilfredo Méndez.

En declaraciones brindadas a medios televisivos manifestó que esta vez no hará ninguna alianza con otros dirigentes de partidos políticos en oposición, mucho menos ceder la candidatura tal como lo hizo en elecciones pasadas, donde se construyó una alianza opositora liderada por Salvador Nasralla, que hoy es coordinador del partido “Salvador” de Honduras. La única alianza es con el movimiento popular ha dicho doña Xiomara, buscando integrar y movilizar a todas las organizaciones sociales y estudiantiles, incluyendo al Movimiento Estudiantil Universitario (MEU), grupos ambientalistas y mujeres defensoras de derechos humanos.

A lo interno de LIBRE, debe empezar por llamar a los contendientes que obtuvieron menos votos, caso particular de Nelson Ávila y Wilfredo Méndez.  El Dr. Ávila, un destacado economista y cientista social representa la base académica, libertaria y socialista democrática de este Instituto Político. Se estima que el Dr. Ávila obtendrá más de 100,000 votos, necesarios para ganar una elección presidencial frente al Partido Nacional en el poder y partido “Salvador” de Honduras. Igual, cuenta con una propuesta de gobierno creíble donde salud y educación pública universal son dos (2) de los pilares fundamentales, sumado a la protección del medio ambiente, combate de la inseguridad alimentaria y pobreza, más un enfoque de estabilización económica heterodoxo con fortalecimiento del Banco Central de Honduras, Banca de Desarrollo y dinamización de la inversión pública.

La convocatoria por Xiomara Castro debe hacerse en este mes de marzo, ya que ambos dirigentes también son tentados por Salvador Nasralla para conformar la llamada alianza de los “buenos” frente a los corruptos y narcotraficantes, la cual recibirá, a no dudarlo, el apoyo del gobierno de EEUU.

En el partido Liberal, el Abogado Yani Rosenthal se declaró ganador con resultados de encuestas a boca de urna levantadas o pagadas por medios televisivos, lo que estaba prohibido. Todo parece indicar que se contará acta por acta, por cada munipio y departamento, ya que el otro candidato, Luis Zelaya, no acepta estos resultados y exige el conteo oficial al Consejo Nacional Electoral (CNE). En el Partido Nacional, tal como eran los pronósticos, el candidato de Juan Orlando Hernández (JOH), el alcalde de la Ciudad Capital, Nasry Asfura, ganó (según encuestas de boca de urna) la elección, donde un gran número de diputados y alcaldes cuestionados por actos de corrupción y vínculos con el narcotráfico, aspiran a ser reelectos. La cuantía de recursos disponibles y la maquinaria del gobierno y empleados públicos es un factor que influyó en ello, sumado a la capacidad de organización para la movilización de votantes rurales y de colonias marginales beneficiados con dádivas y políticas de compensación social; también hay denuncias de llenado de urnas fuera de las mesas, pero que no se ha comprobado.

Un hilo conductor para integrar la participación de organizaciones de sociedad civil, es la actualización del programa de gobierno que Xiomara Castro presentó en las elecciones de 2013, que no pudo materializar por el fraude electoral que llevó al poder a JOH, actual presidente de la República. Esta propuesta camino al Socialismo Democrático, buscaba devolver al pueblo lo robado, que con políticas neoliberales ejecutadas entre 2010-2021, profundizó el saqueo del país, caso de la tierra, bosque, agua, biodiversidad, carreteras, instituciones de gobierno, salud, educación, alimentos, empleo, libertades y derechos adquiridos. A ello se suman las propuestas de Xiomara Castro para profundizar la equidad de género y reivindicación de derechos económicos, sociales y culturales a favor de la mujer.

Igualmente, debe existir una posición sobre el rol del Estado en la economía y sociedad. Se ha destruido la institucionalidad pública, bajo el argumento de la ineficiencia, sin ver que, en este periodo de gobiernos del Partido Nacional, la ineficacia y falta de trasparencia ha sido una de las estrategias utilizadas para profundizar el clientelismo político y la corrupción, abarcando instituciones y organizaciones de sociedad civil que tienen relación con las Secretarias de Estado. Un gobierno centralista, autoritario y corrupto ha creado su propia institucionalidad, por sobre las competencias y funciones públicas que asigna la Constitución de la República y demás leyes del país a los ministerios cabezas de sector, con lo cual la inoperancia se ha generalizado y los resultados no son los que dictan los planes, programas y proyectos elaborados.

Un gran reto es la conformación y vigencia de un nuevo modelo de estabilización económica, que enfrente de entrada el creciente endeudamiento externo, aumento del gasto tributario y mal uso de los recursos de la cooperación internacional y remesas. La prioridad sigue siendo la generación de empleos masivos y de buena calidad en sectores como agroalimentario, forestal, construcción, infraestructura y turismo, para no depender de la oferta maquiladora y los trabajos espurios. Asimismo, la dinamización del sector agropecuario mediante el apoyo directo a las economías campesinas, cuyas unidades económicas son lideradas mayormente por mujeres. Lo mismo debe hacerse en el sector urbano y periurbano de las grandes ciudades, donde resalta el trabajo de las microempresas y unidades comerciales informales, también mayormente lideradas por mujeres.

Hay una deuda con el pueblo que debe empezar a ser saldada. Los muertos (as) del golpe de Estado, por la disputa de tierras y la violencia contra la mujer. Rápidamente debe trabajarse en un informe que documente en forma sistemática caso por caso, para poder retribuir a las familias por el daño causado y castigar a los autores materiales e intelectuales.  

Finalmente, los flagelos de la corrupción y el narcotráfico ameritan un tratamiento especial, lo que conlleva un fortalecimiento de las instituciones involucradas como Fiscalía, Corte Suprema de Justicia, Tribunal de Cuentas  y Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), sumado al posible regreso de la Misión de Apoyo contra la Corrupción e Impunidad (MACCIH), que ejerza presión para aprobar legislación pendiente y enjuiciamiento de los implicados, muchos de los cuales ya están identificados, pero que se escudan en cargos de elección popular.

Es un nuevo tiempo para Honduras, que demanda un nuevo liderazgo sin componendas ni acuerdos políticos con los corruptos y narcotraficantes.

Choluteca, Honduras, DC, 16 de marzo de 2021