Sucre Una fiesta de diversidad cultural se vivió en el Estado Olímpico patria de esa capital, con la presencia de las 36 culturas de pueblos originarios que disfrutaron de un concierto musical en presencia del presidente, Evo Morales Ayma, y donde al final de la velada el cantautor argentino Piero estrenó su canción "Bolivia es como un barco que va al mar". Al ritmo de la morenada y acompañado de una elegante chola paceña, Morales Ayma disfrutó y bailó los sones de la danza mayor de los Andes, con los que otrora fueran sus compañeros de trabajo y arte: la Banda Real Imperial de Oruro. Los músicos de la Banda vestían elegantes ponchos de la cultura tarabuqueña, haciendo un despliegue de profesionalismo ante las multitudes que festejaron de esa manera la instalación de la Asamblea Constituyente. El show por demás emotivo, tuvo como protagonistas al connotado grupo cochabambino Tupay, Orlando Pozo y su grupo Pujllay, sumadas las canciones del canta autor chaqueño Juan Enrique Jurado que inundó el escenario de nacionalidad. La canción más aplaudida fue "La patria", que en su versión de marcha militar, fue el fondo musical que acompañó una inédita marcha de representantes de los todos los pueblos originarios de Bolivia, en horas de la tarde frente a la Casa de la Libertad. "Me siento feliz de participar en este proceso especial, tan especial y tan esperanzador" aseguró Piero al inicio de su actuación que cerró la velada de artistas en el estadio Patria, mientras que entre la masiva concurrencia aún presente en el escenario deportivo se encontraban el presidente Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera. Piero interpretó sus viejas como exitosas canciones ante el entusiasmo de los presentes que, a las 22.45, cuando inició su actuación, como preámbulo de la presentación de su canción, y hasta esta noche, inédita, "Bolivia es como un barco que va al mar", dedicada a Bolivia en el inicio del proceso de cambio que enmarca la Asamblea Constituyente. La canción rememora la conquista española del territorio que actualmente ocupa el país. "La gente vivía tranquila en este lugar, pero llegaron los barcos y nos llenaron de espejos y maltrataron a todos, mujeres, niños y viejos", señala en parte de la composición musical. "Bolivia lucha, Bolivia siente, Bolivia sangra entre el oriente y el occidente Bolivia sabe de cómo emigran cientos miles a otros lugares", refleja. "Siempre llegan señores que nos prometen mil cosas, parecen ser de la Pepsi nunca entendieron la Coca. Ni dueños y traficantes, queremos socios y hermanos, confianza desde nosotros, arriba los bolivianos". Y mientras Piero interpretaba, junto a centenares de gargantas del público presente, el Jefe de Estado y el Vicepresidente abandonaron, por separado, el estadio en medio de una multitud que los vitoreaba e intentaba tocar sus manos. Antes de la presentación del cantautor argentino, subió al escenario Luzmila Carpio, artista quechua, deslumbró con su canto de gorrión. Los pájaros del altiplano emanaron de su garganta ante la admiración de propios y extraños quienes aplaudieron su sensibilidad artística y su esencia de mujer del área rural, pese a que vive en Francia, desde hace muchos años. La artista potosina emitió el sonido de las gaviotas, como una señal simbólica de que los bolivianos añoran el Mar cautivo desde 1879, desde la Guerra del Pacífico. "Este es el canto de la Pachamama, es el canto de las gaviotas por que nosotros también queremos Mar", subrayó Carpio ante el aplauso cerrado de miles de asistentes a la fiesta de la interculturalidad boliviana. También estuvieron grupos como Arawi, en una noche especial que congregó también a indígenas venidos del interior del país que mostraron toda su riqueza cultural en el estado Patria de la Capital de la República. Los pueblos originarios dan lección de unidad y reivindicación social. Fuente: Agencia Boliviana de Información http://abi.bo/index.php