La charlatanería del equilibrio y el bloque real de poder
26/10/2014
- Opinión
El segundo gobierno del presidente Juan Manuel Santos plantea como bandera principal de sus 100 días, restablecer el equilibrio de poderes para conseguir la paz que propuso a los colombianos. Lo primero que consiguió fue reelegirse mediante una coalición contra el candidato de la otra, más poderosa fracción del bloque en el poder, Oscar I. Zuluaga del Centro Democrático, CD.
Pero, su dirección es precaria en materia de representación, porque la diferencia en votos apenas superó los 900.000. La cual alcanzó para hacerlo cabeza del ejecutivo, al tiempo que su coalición, la Unidad Nacional, le ofrece la mayoría para aprobar las leyes ordinarias, si los intereses diversos no la disgregan. Aquella mayoría no habilita a dicha coalición para conseguir, por si sola, la aprobación de leyes estatutarias, a no ser que obtenga el concurso de las minorías opuestas, que se distinguen en dos campos, la de izquierda y la reaccionaria, que tiene la mayor fuerza en el senado.
Esta realidad se demostró ya en la aprobación del presupuesto, donde se requirió la participación del CD. El ministro de Hacienda, el conservador Mauricio Cárdenas, haciendo concesiones al “partido” que lidera el senador Álvaro Uribe Vélez, consiguió que el presupuesto deficitario pase a la sanción presidencial.
Quedó claro que no hay una fisura irreparable en el bloque de poder. Este hecho explica por qué, Timochenko, el secretario político-militar de las Farc-ep, fuerza animadora de la insurgencia subalterna, junto con el Eln, y otros agrupamientos guerrilleros menores, insista en su declaración pública en la fórmula del armisticio, y que Santos separe de una vez por todas al CD, por oponerse a la paz con efectos económicos sociales en el capitalismo colombiano.
Por todo lo visto, en las dos semanas que terminan no habrá ningún equilibrio de poderes, sino la consagración del hiper-presidencialismo. A favor, claro está, del ejecutivo que encarna los intereses de la gran burguesía financiera y los terratenientes, y se prepara para darle finiquito a la negociación de la paz con la guerrilla de las Farc-ep, tan pronto como pueda, y sobre todo, para darle curso a al posconflicto.
Atendiendo a los requerimientos pactados en las mesas de La Habana, la fracción reaccionaria ha mostrado sus cartas, y con el apoyo del senador Alfredo Rangel hizo una lista de mercado que primero tenía 52 ítems, en la canasta del capitalismo reaccionario, y luego le añadió nuevos elementos a aquel listado. La pretensión, claro está, es que no se haga uso de la constituyente para el refrendo de los acuerdos, sino que se implemente el referendo que ya cocinó el gobierno y su bancada en una ley anterior, y quiere imponer a toda costa y costo. Esto ya no se requiere porque la Corte Constitucional le dio el espaldarazo jurídico-político.
No pocos opinan que el tal equilibrio de poderes ya no va más. Así se descubre hasta qué punto seguimos sometidos a los dictados de una constitución encriptada, acerca de lo cual han trabajado en el inmediato pasado dos distinguidos académicos, Ricardo Sanín y Gabriel Méndez. De donde urge, hoy más que nunca pensar en una constituyente animada por los muchos, los grupos y clases subalternas, que le quiebre otra vértebra al poder constituido, para recordar de otro modo al joven Darío Echandía, aquel joven liberal, que nunca quiso o pudo llegar a ser presidente de Colombia.
En primer lugar, esta estrategia de ruptura con las socorridas formas de representación, confrontan los vientos actuales que impulsa el partido del orden, unido en sus dos alas, el partido de la U, y el CD. Ellos siguen siendo los defensores del Neoliberalismo que requiere de ejecutivos super-concentrados, y mucho más en las condiciones de Colombia, donde tiene que lidiar con un conflicto armado de larga data, donde tierra y guerra son una ecuación a la vista.
Este entramado institucional, muestra que la democracia liberal clásica no va más, aquí y en Cafarnaum. Pero, quizás, estas medidas, de pronto, sí ayuden a ponerle un freno al avance del régimen parapresidencial, que hizo tristemente célebre al doble gobierno del expresidente Álvaro Uribe Vélez. Siendo un indicio la captura de Marquitos Figueroa, una de las llaves del orden reaccionario en el bloque regional costeño, trinchera de régimen para-presidencial.
Las Bacrim que son su brazo armado, siguen intactas, y reemplazan el desmonte de los arreglos estratégicos que representó el engendro de las Auc, como fórmula expedita de ejercicio del “terror blanco”, para reprimir cualquier intento de expandir la reforma agraria , y, en su lugar, imponer la concentración territorial en cabeza de unos pocos. Hoy la pseudo república para-presidencial prospera en los enclaves de influencia directa del “CD” como partido del orden, e impone su voluntad reaccionaria a través del poder legislativo.
Mientras tanto, hagámosle un repaso a lo que ocurrió en las labores del senado de la república después del puente, y ad portas de qué colocan a la ciudadanía colombiana, que no se repone de las sorpresas derivadas de las infidencias radiales hechas por el ex comisionado de paz, Luis Carlos Restrepo, quien “padeciendo” el exilio ha dicho que está presto para ayudar en las faenas de la paz con el Eln, en la que él había avanzado tanto, y las cuales fueron bloqueadas por el nuevo adalid de la paz, el presidente en funciones.
El talón de Aquiles y la tortuga constitucional
“La prohibición de la reelección solo podrá ser reformada o derogada mediante referendo o Asamblea Constituyente.”
En seguida, comenzó el trámite en las cámaras del proyecto correspondiente. Alguien podría decir, que el primer paso de esta reforma se corresponde con una vieja, sentencia del derecho, “las cosas se deshacen como se hacen”. Con trapisondas y compra de dos congresistas cuando menos el Congreso anterior cambió el articulito que prohibía la reelección.
Declarada exequible la reforma, la usaron los dos siguientes presidentes, Álvaro y ahora Juan Manuel Santos, quien a través de su bancada, logró que el senado, en la plenaria del pasado martes 14 de octubre, aprobara en el segundo de ocho debates, la eliminación de la reelección.
De continuar con éxito la marcha de esta reforma de equilibrio de poderes, el único modo de echar para atrás lo que ahora se tramita será mediante referendo y asamblea constituyente. Al ocurrir la votación favorable, la bancada del CD abandonó el recinto, cuando su proposición de mantener la reelección por otro periodo fue derrotada. Los senadores que se quedaron votaron afirmativamente 50, y negativamente 2.
La cascada de la reforma siguió con la eliminación del voto obligatorio, que había sido aprobada en la comisión primera del Senado, defendida entonces por el senador Armando Benedetti. Curiosamente fue una proposición del PDA excluyendo el voto obligatorio la que se adelantó, al PdU y a los Conservadores, y prosperó. La votaron positivamente 48 senadores, y 29 insistieron en mantener el voto obligatorio, y de estos toda la bancada uribista.
Así, la democracia liberal, que reclamaría el interés en que el voto fuera un ejercicio de los ciudadanos, para aumentar la legitimidad de las instituciones representativas que en las condiciones de Colombia, - casi como regla solo votan las minorías -, es casi siempre precaria; en cambio resultó defendida por toda la fracción reaccionaria del bloque dominante, ante la oposición del PdU, los Conservadores, Cambio Radical, en sintonía con la oposición de izquierda, el PDA.
Es decir, que estas fuerzas temen que el voto obligatorio no los favorezca en materia electoral, y en cambio sí permita acortar la distancia de 900.000 votos con que ganaron la pasada elección presidencial; y que otro tanto pudiera ocurrir tanto en las elecciones para senado y cámara. Pero, sobre todo, en relación con los resultados de las próximas elecciones departamentales y municipales que se celebrarán durante el año 2015.
Entre el Contralor y el Supertribunal
“…estos funcionarios se quieren salir del fuero y ser parte.” Jorge Perdomo, fiscal general (e)
En esta sesión del martes pasado fueron votados 9 de los 42 artículos de la reforma. El tercero fue el más disputado, el modo de elegir Contralor, en lo cual invirtieron 3 horas. Cargo que fuera ocupado por Sandra Morelli, hoy objeto de diligencias judiciales por la Fiscalía; y quien alegando falta de garantías viajó a Italia, su segunda patria, desde donde pide ser escuchada vía Skype.
De nuevo fue derrotada la oposición congresional más fuerte, el CD, que por boca del senador Iván Duque pretendía que el Contralor resultara elegido dizque por la Junta Directiva del Banco de la República. La propuesta fue rechazada, y quedó la constancia para la posteridad. En resumidas cuentas, la elección de contralor será por concurso de méritos.
Hubo otro rifirrafe entre Fiscalía y Procuraduría, a propósito de quiénes serán investigados por el nuevo Tribunal de Aforados. El Procurador general insistió en que los funcionarios que ocupen esta alta dignidad, al igual que el Contralor deba investigarlos el “supertribunal”. Ello es debido, dijo Alejandro Ordóñez, a la importancia de sus roles y la trascendencia de sus decisiones. El derrotado, el vocero de la Fiscalía, por el contrario, señaló que “estos funcionarios se quieren salir del fuero”.
Una anécdota intermedia
Las dos presidencias tienen “fatigado” al actual presidente. Así, él reclamó vacaciones para sí, de las que no gozaron de Álvaro Uribe, su predecesor, para abajo. Esta vez, el paladín de esta “justa causa” fue el senador conservador Efraín Cepeda; y radicará de nuevo un proyecto de ley que había dormido años atrás el sueño de los justos. El proyecto establece 15 días de vacaciones anuales para los presidentes en funciones de aquí en adelante, y habrá un aumento en la remuneración por estos cargos, cómo no.
El senador conservador insistió en que “Hay un vacío legislativo…Si (el presidente) quiere descansar tiene que pedir una licencia y eso implica que asuma el Vicepresidente.” Cuando esto ocurre, de manera automática, quien es el vice, para ese momento, consigue una jubilación permanente como ocurría en el pasado. No pasó así, que sepamos, con el primer vice del presidente Santos, pero pueda que ahora sí ocurra con su coequipero, Germán Vargas Lleras. Habrá que verlo en el curso de los siguientes años.
El futuro ponente recordó que, por ejemplo, en los Estados Unidos, que es la “mata” del presidencialismo latinoamericano, el primer mandatario tiene vacaciones anuales, y las utiliza. Como lo hemos visto con la familia de Barack, Michelle y sus hijas, que no rebajan ese recreo, más cuando hay situaciones “estresantes”, que acompañan los tiempos de la globalización capitalistas y las resistencias de todo tipo que aúpa alrededor del mundo.
El miércoles legislativo después del “puente”
“Si quiere le doy la silla mía…” José David Name, presidente del Congreso, en discusión con el ministro del interior.
La iniciativa del senado regional se tragó algo más de dos horas, y naufragó. La idea era no repetir lo que pasó con la elección de senadores por circunscripción nacional, que dejó a 13 departamentos huérfanos de tal representación. El gobierno para congraciarse con las regiones propuso una especie de circunscripción especial, indicando que 11 senadores los eligieran los departamentos de menos de 500.000 habitantes. Pero, esto no paso del primer debate. Con todo, Jimmy Chamorro fue secundado en la fórmula de darle un respiro más adelante a la propuesta.
El plato fuerte del miércoles fue la supresión del Consejo Superior de la Judicatura, reemplazado ahora por cuatro instancias en lugar de las tres que tenía el que ahora se le decreta la defunción. De avanzar la iniciativa habrá una sala de gobierno, una junta ejecutiva, un director ejecutivo y un consejo de disciplina judicial.
Después de oír esto, más de un colombiano ha quedado con hambre, y la vocería del Consejo Superior de la Judicatura se ha pronunciado en contra, señalando que no hay un cambio de fondo, sino por el contrario, un aumento de la burocracia. Y en todo caso, los nuevos integrantes serán elegidos por los congresistas. Así que la politiquería no quedará a raya.
Sí quedó en el articulado un proviso que señala que si las vacantes en el Consejo de Estado y en la CSJ no se llenan en un plazo de 2 meses se producirá “falta gravísima”. Y la elección quedará en manos de la sala de gobierno judicial en el plazo de un mes. Luego quedarán así las cosas una vacancia hasta de 3 meses, si el proyecto sigue su curso.
También quedó prohibido la fórmula, “yo te elijo, tú me eliges, y tengas en cuenta a mi hijo, familiares y relacionados”. El colmo de la desvergüenza, la desfachatez, y la denegación de cualquier administración imparcial de justicia por los altos tribunales, y de ahí para abajo.
Aquel jueves 16
“… no se dejen someter al chantaje de algunos altos servidores del Estado.” Palabras de la senadora Claudia López, Alianza Verde.
En la primera sesión del martes la iniciativa del el Supertribunal tenía un contenido diferente, incluía a unos altos funcionarios, y excluía a otros como el Fiscal. Lo cual “olía a mal” para no pocos congresistas y la menguada opinión pública que se manifiesta de vez en cuando, o es auscultada con prevenciones. Este reparto descarado de privilegios exigía un tratamiento diferente, y lo tuvo, a la manera “leguleya”.
Ahora, después de tres largas jornadas, en la segunda plenaria del Senado, se establece que el tribunal de aforados investigará al procurador, el fiscal, el contralor, el defensor, el registrador y los magistrados de las cortes. El tribunal lo compondrán 5 miembros escogido de ternas enviadas por las mejores facultades de derecho del país, sin que se especifique cuántas participarán. Pero, eso sí, será, la Cámara de representantes la que los escoja de ese listado. Mientras tanto, el paro judicial alcanza hoy más de dos semanas, porque a los funcionarios intermedios, y los de abajo, no los alcanza la derrama de mejoras en material salarial.
Aquí, frente a los cambios, la voz discordante, con vehemencia, volvió a ser la de Claudia López. Ella proponía para el tribunal de aforados tres salas constituidas cada una por tres magistrados: investigación, juzgamiento y segunda instancia. Pero, las mayorías de la coalición de gobierno hundieron este intento “justiciero”. Fue en parte una medida de rechazo que secundada por una nueva salida del recinto del CD, y el quórum decisorio se redujo al mínimo, pero se aprobó con un voto.
Después, el CD se hizo sentir, y le dobló el brazo al Presidente la U, cuando el asunto no era la justicia colombiana, que es un hazmerreir en el mundo del derecho, y una desgracia para el común de los colombianos. Me refiero de nuevo a la aprobación del presupuesto, que significó aumentarle, seguramente, el cupo de las regalías a la representación congresional del CD, que lo fortalece para los ciclos electorales por venir, porque llena la faltriquera de los uribismo y su aliados para hacer lo que dicta el clientelismo aposentado.
Sonido de cremalleras
Aquí el juego principal lo jugaron Laureano Acuña, un conservador, y Claudia López. Se pretendía que las planchas para las listas en las votaciones, cuando menos para congreso, estén intercaladas en iguales números por hombres y mujeres; y que sean cerradas, y no abiertas como se estila desde la operación avispa cuando escogieron delegados a la Asamblea Constituyente. El cerebro fue el extinto Alfonso López Michelsen; y el engendro “democrático liberal” sirvió al partido de López/Serpa para ganar el mayor número de delegados frente al segundo en la Constituyente, la Alianza democrática-M19.
Hoy se insiste en que la lista abierta es una peste para la democracia colombiana. Porque con ella el dinero, los maleantes y las malas conciencias hacen de las suyas. El senador Acuña quería las listas cerradas, pero nada de “cremalleras”, fiel a los atavismos del partido Conservador. Hubo nuevo intento de parte de la senadora López, y volvió a incluirse la lista intercalada.
Sin embargo, la lista cerrada no prosperó desde el día anterior, miércoles 15. Lo sería hasta dentro de 8 años. Luego, queda claro, cómo están los cálculos entre los partidos de gobierno y sus oponentes. Ninguno quiere renunciar a lo ya conseguido. El médico Roy Barreras propuso la fórmula “transitoria” que se aprobó al final. Para el 2015, las listas serán abiertas, semicerradas en el 2018, y en el 2022, por fin cerradas. ¿Habrase visto? El adefesio se aprobó en la plenaria con 46 votos contra 7 por el no.
Aunque en el caso del Uribismo, con su cabeza de lista, la lista cerrada al senado eligió 20, siendo apenas superada en uno, por el Partido de la U. En la cámara el cuento fue otro, y lo es todavía. La disputa más feroz será en el tercer debate, en la Comisión Primera de la Cámara. Los senadores “precavidos” hicieron constar que 10 artículos del proyecto de Reforma un total de 42, se podrán revivir en los debates que restan.
Ya tendremos de vuelta también a los 4 senadores que viajaron a Ginebra, pagados por los contribuyentes, Juan Manuel Corzo, Juan Manuel Galán, Teresita García entre ellos, quienes contaron con la bendición de José Name, del PdU.
El mismo jueves se tenía que votar el presupuesto nacional. Así las cosas se afanaron los congresistas para hacerlo, y se cerró la noche del “equilibrio de poderes” con visos de tragicomedia.
Votando el presupuesto y repartiendo regalías
“La propuesta responde a las necesidades del país.” Mauricio Cárdenas, minhacienda.
“deberían darle al senado la oportunidad de poder modificar los proyectos.” Senador J.E. Robledo, PDA.
Con la presencia del ministro de Hacienda, se aprobó el presupuesto que está aforado en 216.158 billones para la vigencia de 2015. Le dieron el último de dos debates en el senado, y ahora pasa a la firma presidencial. Existía una “camisa de fuerza”, el día 20 de octubre para que fuera aprobado. En caso de que hubiera el más mínimo cambio era necesaria una conciliación entre las dos cámaras, y no había tiempo para ello. Por eso, el reclamo del senador Robledo.
Durante el día hubo un accidentado debate, donde la oposición del CD hablaba con insistencia de un gobierno “derrochón”. Antes había la votación de la reforma de equilibrio de poderes, y para después quedaron apenas 55 senadores en el recinto. Con ese quórum precario vino la maniobra de Uribe y su bancada quienes se retiraron del hemiciclo, y se derrumbó el quórum.
Entonces el cancerbero del presidente, el ministro conservador Mauricio Cárdenas buscó a los senadores díscolos. Entre bambalinas hubo la conversación con el “jefe natural” de la bancada, el gran elector Uribe Vélez. Sin que hasta hoy se sepa que pidieron a cambio, con precisión. Lo cierto es que regresaron con el parte de victoria.
Ellos eran “los salvadores del presupuesto”. Hubo la queja solitaria de un senador del Presidente de La U, quien se quejó señalando que el Min hacienda desairó a la bancada del gobierno. ¿De qué modo? No lo sabemos, pero se infiere dándole al CD parte del “botín” que hace posible elegir en Colombia, donde sólo la minoría vota, mediando sobre todo, incentivos económicos.
La piedra en el zapato
La piedra en el zapato son los gastos de funcionamiento de un gobierno que “camina como Chencha” por estos días. La paz cuesta y las divisas se han estrechado, por la baja en los precios del petróleo, y los capitales golondrinos buscan otras tierras, a raíz de la subida del dólar.
Primero se disminuyeron los gastos de funcionamiento en 2 billones, pasando a 119. Sin embargo, los gastos de personal crecieron en 12.000 millones, entre otras, para atender los gastos que refuerzan el ejecutivo hiper-presidencial, que se prepara para el fin de la negociación de la paz con las Farc-ep, y el comienzo de las conversaciones con el Eln. A manera de consolación, Cárdenas dijo que en la ley de presupuesto se incluyó la austeridad en el gasto para todas las entidades del Estado en 10 por ciento, y en la misma proporción para la contratación de servicios generales.
En cifras, queda claro que el 55,3 por ciento pagará funcionamiento, el servicio de la deuda se comerá 47,337 billones, las transferencias serán de 85,572 billones, y la inversión, el 22,7 por ciento, 49,424 billones. De ese modo se repartirá la riqueza social obtenida de impuestos y otras fuentes. Y está claro, de todos modos, que hay una desfinanciación de 12,5 billones.
Los congresistas estuvieron también activos en pedir pedazos de la torta para cumplirle a sus regiones; y las peticiones superaron con creces las 300. Revolotearon en torno a Cárdenas y sus asesores más inmediatos, pero todos se quedaron con los crespos hechos.
Todos se quedaron “mirando un chispero”; pero las expectativas de lo que pasará con el trámite de la próxima reforma tributaria aumentan, la de un presidente que prometía que no habría más impuestos. Santos, por segunda vez, tendrá que faltar a su palabra, sin más. Y la paz sigue su marcha a trochas y a mochas, cumplidos dos años; y con la halaraca de las 52 capitulaciones que dice el Centro Democrático le hizo el gobierno a la guerrilla de Timochenko.
Una advertencia premonitoria
Estamos en presencia de los jugadores mayores del bloque en el poder, la fracción reaccionaria y la reformista que tiene presidente y mayorías insuficientes. Las fuerzas de centro, que tiene en Alianza Verde un referente inteligente, y la izquierda con una representación mínima, aunque clara de con quién se enfrenta un efectivo proceso de reforma que haga posible la paz con un posconflicto eficaz.
Claudia López, por eso, alerta al Presidente de La U que se haga pasito con el CD, porque según las realidades del voto, de producirse un referendo no habrá voto suficiente para aprobar la paz que se acuerde. Más aún cuando se descartó la fórmula del voto obligatorio como reforma política, dizque porque entonces podía ganar el “coco” del CD. Ya vimos como las dos alas del bloque en el poder llegan a acuerdos en materia del presupuesto de la nación.
En verdad, el riesgo que tiene Colombia es que la democracia de los muchos, recorra una trayectoria diferente, y desnude, deje en interiores a la “Constitución encriptada”; es decir, que descubra los códigos de la participación y utilice todas las herramientas posibles para enderezar el torcido rumbo que afecta en forma grave, la existencia de los muchos.
Miguel Ángel Herrera Zgaib
Profesor asociado, ex director Ciencia Política y Unijus, Unal. Bogotá.Director Grupo Presidencialismo y Participación. Catedrático maestría estudios políticos. U. Javeriana. Bogotá. Director Seminario Internacional A. Gramsci. Email: maherreraz@unal.edu.co, presid.y.partic@gmail.com
Fuente: Semanario Virtual Caja de Herramientas Nº 422
Semana del 24 al 30 de octubre de 2014
Corporación Viva la Ciudadanía
https://www.alainet.org/en/node/165048?language=en
Del mismo autor
- ¿A qué viaja Don Enrique a La Habana? 25/11/2015
- Rebeldía y éxodo en El Mango… ¡parar la guerra en Colombia! 29/06/2015
- Tragedia nacional: la lógica del plomo 25/05/2015
- Una perspectiva subalterna de cara al posconflicto colombiano 30/03/2015
- El penúltimo juego de Varoufakis y Syriza 21/02/2015
- La condena al gobierno de Colombia y la otra marcha 15/12/2014
- Aprendiendo: la crisis mexicana, Ayotzinapa e impunidad 30/11/2014
- Del acuerdo humanitario al cese bilateral del fuego, un compromiso nacional 24/11/2014
- La charlatanería del equilibrio y el bloque real de poder 26/10/2014
- El giro de “Andrómeda”: hackerismo y política envenenada 31/08/2014