A todo el fracaso público y notorio en el que metió a la Fiscalía Especial para los Movimientos Sociales y Políticos del Pasado de la Procuraduría General de la República su titular, Ignacio Carrillo Prieto, suma a la anterior denuncia en su contra el dilapidar el presupuesto en viajes nacionales y al extranjero así como en francachelas otras dos que pudieran resultar penales: la fabricación de culpables y el despido injustificado de un agente del Ministerio Público, por no prestarse a esos actos moralmente deleznables. César Augusto Osorio y Nieto, ex director general de Investigaciones Ministeriales "B" de la mencionada Fiscalía así lo reveló en una entrevista al Diario Crónica quien precisó que Carrillo Prieto le impuso una "cuota" mínima de 25 consignaciones de personas presuntamente vinculadas con los hechos del 2 de octubre de 1968 y que, al oponerse a esos métodos de la investigación, que obviamente antijurídicos e insostenibles, de ahí su fracaso, fue despedido. La reveladora entrevista fue realizada por el compañero colega, Israel Yáñez G. e ilustrada, para que no haya dudas, por el también compañero reportero gráfico, Nicolás Tavira. La pregunta fue directa: "¿Usted no tenía elementos para consignar a esas personas? Y la respuesta contundente: no, definitivamente no". Desde un principio opinamos del Fiscal Carrillo Prieto que se trataba de un sujeto inestable, con actitudes vengativas y de ahí sus cóleras contra los periodistas; prueba de ellas son sus desplegados pagados en diferentes diarios, como el más reciente en contra de otro colega amigo, Salvador del Río. Sólo porque en un Comentario a Tiempo supusimos que a la Fiscalía del Pasado y ahora del presente tenebroso se le iban a ser bolas el engrudo, nos llamó para encontrarnos en una cita que nunca se dio. El abogado Osorio Nieto corrobora nuestro aserto. En la entrevista precisó que poco tiempo después de ser designado en el cargo, la relación con el fiscal se deterioró debido a los repentinos cambios de ánimo que éste sufría, pero sobre todo al número de consignaciones y a la "fabricación de culpables" que le exigió. Y es que Carrillo Prieto, explicó, se había comprometido públicamente ante la prensa a castigar a un número determinado de personas. "En alguna ocasión me exigió que consignase un determinado número de personas, 24 ó 25, por los hechos del 2 de octubre. Cuando yo le hice notar que eso era técnicamente imposible y que moralmente era deleznable y criticable, entonces me impidió definitivamente el ingreso a las oficinas y me quitó el trabajo". César Osorio presentó su queja ante la Contraloría Interna y como consecuencia se ha iniciado una averiguación previa en la Fiscalía Especializada en Delitos de Servidores Públicos Federales, aunque como en la anterior denuncia de despilfarro todo indica que por el momento duermen el sueño de los justos en algún anaquel de la Procuraduría General de la República. A mayor abundamiento, en la entrevista con Crónica, el ex director general de Investigaciones Ministeriales "B" reveló y explicó que parte del fracaso de la Femospp responde a la injerencia de personas ajenas a la misma, pues muchos de los allegados a Carrillo Prieto no cuentan con los conocimientos legales para formular acusaciones, aunado a que pretenden iniciar juicios en contra de personas inocentes. Es más: el propio fiscal Carrillo Prieto carece de los conocimientos técnicos para llevar a buen término las investigaciones y "está guiado sólo por su soberbia y prepotencia, fundamentado en los presuntos apoyos de 'muy alto nivel' que dice tener". Otra magnífica pregunta de Yánez: "¿la actuación de Carrillo Prieto responde a algún tipo de revanchismo personal, por ejemplo en el caso de Luis de la Barreda Moreno? Sí, bastante. El fiscal es una persona enfermiza. Tiene cambios de ánimo repentinos y contradictorios, a lo que se agrega una absoluta carencia de experiencia en el área ministerial, pues nunca ha sido ministerio público de averiguaciones previas o de control de procesos. Por otra parte, como ha habido una defensa exitosa con lo que respecta al capital de la Barreda, eso lo irrita mucho. Se le ha exhibido como una persona temperamental e ignorante". ¿En manos de quien esta la justicia en nuestro país? En este caso en manos de una actuación "enferma y represora", como adecuadamente la califica el entrevistado. - Teodoro Rentería Arróyave es periodista y escritor, vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP. Correo-e: teodoro@libertas.com.mx