El ALBA un cauce para la integración de nuestra América

20/08/2006
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La Palabra Integración Nombra un proceso.

Hay un hecho cierto. Las prácticas sociales han ido mutando, variando el sentido del proceso, siempre manteniendo la palabra integración. Para finales de los XX el rompecabezas de la Integración presenta un diseño fundado en las políticas de ajuste que reestructuraron las sociedades latinoamericanas.

 

Entre Hiroshima y el Spuntnik, el plan Marshall hizo lo suyo. La inversión de capital norteamericano sembró por el mundo [la posibilidad y el deseo] el know-how del american-way-of-life. Reconstruyo, con la tecnología de posguerra parques industriales, articulando regiones y recursos sin distingo de fronteras. En Europa y Japón la oposición al capitalismo se diluyo en la tarea de reconstruir condiciones de vida y de trabajo. La destrucción bélica había dejado sin motivos cotidianos a la lucha de clases y los gobiernos occidentales de posguerra rendían pleitesía al gran triunfador. Estados Unidos se presenta como líder indiscutible. Desde 1947 a 1967 les fue suficiente consolidar relaciones de poder buscando y consiguiendo, practicando el Plan Marshall e impulsando la acción y desarrollo del instrumental de los organismos internacionales.

 

En América Latina, la CEPAL levantaba diagnósticos para fundamentar Planes de Desarrollo e Industrialización, cumpliendo con dedicación el mandato de Naciones Unidas. En los diagnósticos de CEPAL aparecen fuerzas sociales económicamente activas con posturas nacionalistas, junto a fuerzas políticas imbuidas en creencias democráticas e industrialistas que ofrecen expectativas de bienestar a los pueblos. Las principales fuerzas económicas y políticas en la región postulan la diversificación industrial como base del desarrollo económico y social, apoyando la intervención de los gobiernos en la conducción económica. Al “esquema clásico” del industrialismo ingles, le suman elementos de la política gubernamental del New Deal, utilizando la legitimidad otorgada al sufragio universal, mientras celebran el triunfo aliado. Posición común –con variaciones- entre socialdemócratas, socialcristianos, socialistas y comunistas actuando desde el gobierno, en la oposición o en la clandestinidad. En eso estaban cuando el Sputnik surco el espacio.

 

El Sputnik hizo que los Estados Unidos prestara especial atención hacia Latinoamérica. Eisenhower envía a Stevenson quien informa y asesora a Kennedy. La situación interna en los Estados Unidos es conflictiva. Además, la ofensiva estratégica norteamericana esta en acción, cuando entra en escena la política independiente y soberana del Movimiento 26 de Julio Cubano. En ese contexto de ofensiva y rebelión, suscriben los gobiernos latinoamericanos, asumir como políticas de gobierno de Estado las iniciativas de Integración Regionales. La intencionalidad e inviabilidad de la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC), solo es comprensible teniendo presente el momento de la ofensiva Yanqui y de rebelión latina. A la postura industrialista-desarrollista de las principales fuerzas económicas y políticas de la región, se le suman las fuerzas que hacen peso por lograr una economía nacional independiente; posturas que chocan con la lógica expansionista mundial en la que el monopolio multinacional dicta las pautas de los inversionistas. Los capitales fluyen a través y según los intereses de las empresas multinacionales y por esa vía infiltran a Latinoamérica. La coyuntura política interna opta por asumir la lógica de sustituir importaciones de bienes finales, pretendiendo la diversificación industrial con eslabones de productos intermedios como base del desarrollo económico y social. Decidiendo cada economía nacional producir un-poco-de-todo. Decisión que le planteo un doble dilema al expansionismo del capital industrialista de la época: respetar la dimensión nacional, les impide cumplir con las exigencias rentables de la tecnología de escala, así como, el pretender alcanzar la diversificación industrial les es opuesto a la especialización pautada por la relación de coste/beneficio, de la unidad productiva de capital multinacional. Dilemas que se tardaron en resolver. Dilemas que para los años 60, no solo impidieron la puesta en práctica de la ALALC, sino que como fuerzas políticas actuaron unificando intereses, entre los planes de la ofensiva yanqui y los gobernantes latinoamericanos y así trazan una estrategia persiguiendo diluir a los sujetos sociales contrarios. Estrategia abarcante, abriendo campo por donde reformular las propuestas contemporáneas de Integración económica desarrollista. La Alianza para el Progreso, (re) despertando expectativas y (re) sembrando confianzas hacia las políticas de gobierno de Estado y el Golpe Militar de 1964 en Brasil, permitiendo (con) probar en la economía brasileña políticas inéditas de intervención internacional. Del 60 al 68 la convulsión se siente por toda América.

 

En 1966 los gobiernos de países andinos proponen una iniciativa de Integración Subregional y suscriben en 1969 el Acuerdo de Cartagena, como avance de integración inscrito en ALALC. Su contenido conduce a pensar, que todavía las fuerzas internacionales no habían logrado limpiar suficientemente el terreno político y las fuerzas económicas y políticas nacionales que actuaban, “contra corriente” incluyen en el Acuerdo la Decisión 24, que reglamenta el Régimen de Inversión Extranjera. La postergación permanente de su puesta en vigencia: del 71, al 73, al 76, al 80… hasta derogarla con el Protocolo Modificatorio del Acuerdo de Cartagena de 1988, convierte este caso en un hermoso ejemplo de la presencia de una confrontación entre sujetos sociales. Confrontación que poco a poco irán disolviendo hasta lograrlo con el dispositivo del endeudamiento, reciente eslabón de la cadena de transnacionalización, que al tiempo parece constituir una pieza clave en el rompecabezas de la Integración hemisférica ALCA. Endeudamiento que convence y conduce a que diversas fuerzas sociales permitan gestionar la articulación de los recursos naturales y de las actividades productivas con ventajas competitivas, al gran concierto internacional. El endeudamiento de Brasil reagrupo fuerzas a favor de la apertura legal al capital internacional, quedando establecido un Acuerdo de Garantía de Inversiones. En Venezuela les tomo más tiempo, reagrupar las fuerzas de apoyo, pero el seguimiento de los procedimientos de endeudamiento a partir de 1974, de decretos presidenciales, discursos oficiales y de “hechos cumplidos” conducen a apreciar que es cierto que la Deuda es de las últimas invenciones integradora.

 

Hasta 1960 los acuerdos políticos y tratados económicos Panamericanos, junto a los mecanismos ilegales de intervención legitimados a la fuerza; se muestran “casi” suficientes para mantener el sistema de relaciones de poder en orden. La eclosión de las complejidades sociales latinoamericana se manifiestan en los últimos 33 años. Son muchas las expresiones de represión, recomposición y rebeldía anotadas en la historia de los años recientes. Ante la eclosión manifiesta, la controversia entre propuestas regionales de integración, y la integración lograda por hechos cumplidos oficializados, nos coloca ante un panorama de economías integradas entre grandes – y – hacia – afuera, con un cuerpo social desintegrado.

 

Ajuste que acoplan la integración económica regional a la hemisférica

 

Las políticas de ajuste reestructuraron las economías latinoamericanas (1973-2000) desmantelando los aparatos productivos nacionales/regionales, adecuando la producción a las exigencias coste/beneficio del diseño mundial transnacional, especializando cada nación/región según la pauta productiva de las ventajas competitivas. El capital transnacional dispersa las partes del aparato productivo mundial y lo articula a través de la tecnología informática. Sabemos que las estrategias pueden trazarlas desde el espacio, sin tocar tierra. Los avances tecnológicos satelitales permiten una lectura cierta de los recursos naturales previa a la invasión territorial.

 

Ese Ajuste Económico Continental/Mundial se fue abriendo camino desmontando alianzas económicas y políticas, apuntalando la reestructuración con normativas legales e instituciones convenidas entre gobernantes y capitalistas.

 

Mientras avanzaban el ajuste productivo continental/mundial negociaban en la Ronda Uruguay las normas de creación de la Organización Mundial de Comercio (OMC/1995). Adelantan experimentos ensamblables: la ALALC se convierte en ALADI, el Acuerdo de Cartagena en Comunidad Andina, establecen el TLCNA, el G-3, con la Iniciativa para las Américas (Bush-1990), toma cuerpo la integración hemisférica, que formalmente propondrán y acordarán como plan de reestructuración del sistema interamericano, en la Cumbre de las Américas/Miami diciembre 1994, pretendiendo firmar el nudo final con el ALCA para el 2005.

 

Todo a la misma vez, pero cada caso nacional a su propio ritmo. Las exigencias multilaterales de equilibrio macroeconómico para asegurar el pago del servicio de la Deuda, el cambio de funciones de los organismos financieros multilaterales (FMI, BM, OCDE, GATT/OMC) y la transformación de instituciones políticas regionales (OEA, TIAR, BID, CAN/CAF).

En Venezuela (desde Venezuela), el ritmo nacional (continental/hemisférico) del acoplamiento fue entorpecido por el 27 de febrero de 1989, el 4 de febrero y el 27 de noviembre de 1992.

 

 

 

Hasta aquí. Todo el continente americano parecía estar listo para que quede atrapado, a la misma vez, por múltiples vías. Por medio del suspendido Acuerdo Multilateral de Inversiones/AMI o por extensión del TLCAN-plus y/o por Acuerdos Bilaterales con USA. Todas las vías monitoreadas por la OEA y avaladas por expertos de la CEPAL. Mientras, las negociaciones en OMC avanzan sirviéndoles para tejer el tinglado económico de los Acuerdos de la Cumbre de las Américas/1994, pretendiendo culminar con las negociaciones del ALCA para el 2005.

 

La fluidez de la estrategia evidencia que: el proceso de integración industrial desarrollista diseñado en los años 50´s se encontró con obstáculos no previstos:

Que los capitalistas nativos optarían por maximizar la ganancia en fusión con el capital extranjero.

Que la tecnología como mercancía en propiedad transnacional fijaría los parámetros de la relación coste/beneficio, determinando con quién, donde y que producir, sustituyendo trabajo creador y fijando domicilio en las naciones con legislaciones laborales coercitivas, permisivas con los inversionistas y contra el ambiente.

 

Estos obstáculos no previstos dieron a conocer sus intenciones cuando de hecho limitaron las expectativas de bienestar social programadas en los planes gubernamentales de desarrollo.

 

Transcurrido medio siglo de experiencia desarrollista y en tiempos en que internacionalmente tramitan la estrategia capitalista unipolar, proponiendo sujetar la inversión productiva al mapa trazado en función de las ventajas competitivas, sujeción que expresamente prohíbe a los gobiernos de Estados negociantes fijar requisitos de desempeño a la inversión y previendo fijar fecha final para declarar mercancía a los hoy servicios públicos…….

 

 

 

La revisión de los hechos políticos y económicos, nos impulsa a decir, que las propuestas oficiales de integración económica se han vaciado de posibilidades libertarias, quedando como recurso oratorio institucional que alimenta ilusiones y defrauda a las fuerzas sociales creyentes.

 

La estrategia hemisférica, desde los tiempos de la Alianza para el Progreso, sujeto a los gobiernos como planificadores y empresarios del desarrollo comprometiéndolos con el capital financiero mundial. Acto seguido, con la Deuda vaciaron de autonomía de decisión política a los gobiernos de los Estados. Fue cuando llegó el momento de generalizar las políticas de ajuste.

 

Una vez allí, las prioridades del desarrollo pasaron a depender de las oportunidades de financiamiento condicionados.

Los gobiernos quedaron en manos del capital financiero mundial acoplados por la política monetaria del $. Las reservas internacionales devinieron insuficientes. Los gobiernos, sujetados en la formulación de los presupuestos nacionales, pasan a ser ejecutores de las políticas económicas transnacionales. El ingreso nacional disponible es insuficiente para satisfacer las necesidades de la población.

 

Derivando de esta lógica deduzco que la Deuda fue inventada como dispositivo estratégico intentando interrumpir y al tiempo disolver, un proceso político rebelde arraigado en el imaginario de multitudes latinoamericanas que desde siempre impedía articular las riquezas productivas apetecibles al capitalismo mundial/transnacional.

 

El proceso económico de la Deuda, al atrapar a los gobiernos de los Estados líderes latinoamericanos, deja el juego de las negociaciones libre de contrincantes. Hasta los 70´s los gobiernos jugaban a representar las peticiones de diversas fuerzas sociales nacionales, una vez que avalan las deudas contraídas por sectores económicos privados o al emprender inversiones públicas con préstamos comerciales; los gobiernos quedan presos de las normas monetarias internacionales. Conocemos del comportamiento de capitales privados nacionales fugados, a la vez que intervienen con préstamos avalados por los Estados. Conocemos que ante las dificultades de lograr apertura total a la inversión extranjera, las inversiones directas de capital extranjero desaparecieron y fueron sustituidas por préstamos comerciales que endeudan. Conocemos de la generalización de los planes de ajuste como efecto del endeudamiento y buscan garantizar que el país deudor logre la solvencia necesaria para pagar sus deudas.

 

La deuda ha de convertirse en Inversión en actividades económicas intercambiables/comercializables. Latinoamérica retorna a sus orígenes de especialización económica. Cada región debe especializarse en la producción derivada de sus riquezas naturales, producidas y comercializadas por los capitales internacionales transnacionalizados. Integran lo rentable al proceso de acumulación mundial.

 

La Integración por la vía de una secuencia de hechos cumplidos desintegra el cuerpo social. La desintegración del cuerpo social crea personajes inéditos que deambulan sin arraigo.

 

 

 

Situación de peligro para la sociedad contemporánea reviste extrema desigualdad, reconocida así en documento de Naciones Unidas.

 

El nuevo motivo (para la ayuda) debe ser la guerra contra la pobreza mundial…basada…en la seguridad de las naciones ricas. La amenaza real en los próximos años es que la pobreza mundial empiece a desplazarse sin pasaporte de muchas formas desagradables: drogas, enfermedades, terrorismo, migraciones. La pobreza en cualquier parte constituye una amenaza a la prosperidad en cualquier parte”.

Hasta la posguerra del 45, la expansión norteamericana sobre el resto de América, enfrento una resistencia apoyada en los postulaciones de: Libertad, Igualdad y Fraternidad. Postulados, que pierden sentido cuando Norteamérica encubre su expansión en la estrategia del “mundo libre”. Cierto es, que desde antes los postulados enunciados habían sido violados, pero, es a partir de las razones que permiten justificar Hiroshima y Nagasaki, cuando el acontecimiento-en-si, delata la pérdida de sentido de los postulados.

 

Lo novedoso -políticamente-, de la segunda posguerra consiste, en que las razones aceptadas para ‘el hecho nuclear’, legitiman la impunidad de matar. En el continente americano el conflicto político-social queda encubierto bajo la doctrina. Anticomunista.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Ante la ofensiva capitalista los sujetos sociales toman decisiones que al tiempo devendrán en políticas de Estado. El 27 de febrero de 1989 los iracundos en multitud expresaron su rebeldía: el Caracazo. El Gobierno dispuso que el ejército disparara. En 1992, dos intentos de sublevación militar. Transcurren el 93, 94, 95, 96, 97 en silencio. En diciembre de 1998 avalancha electoral. Como primer acto presidencial el Presidente Chávez decreta un referéndum para que los pueblos decidan sobre una convocatoria a elecciones constituyentes.

 

En la asamblea constituyente las fuerzas sociales en tensión elaboraran el cuerpo de la Constitución, refrendada en diciembre 1999. El proceso antes silente, rugió y se legalizo.

 

En el 2004, sin disolver el Estado, la Sociedad asume Misiones de Gobierno.

 

En el murmullo cotidiano se escucha que en Venezuela, hemos abierto [pueblos y gobernantes] las compuertas hacia otro mundo posible. La multitud esta tentada a recorrer experiencias de vida novedosas.

 

Vivimos la ocasión de constituirnos en nación, libre y soberana. A cada ocasión, le corresponde un imaginario contenido. El de hoy, contiene lo de antes, recoge siglos.

 

Cada ocasión en su contexto. Para 2005 el contexto mundial delimita el diseño lo posible [maneras, sentidos, cauces]. Con certeza, el capitalismo en su andar perverso, achicó el mundo de los pueblos. La multitud, habitantes de los territorios invadidos, son pobladores no-útiles/inútiles para los parámetros contemporáneos de la rentabilidad de los grandes capitales/de las empresas transnacionales. Tan simple, como que económicamente hablando, al capitalista no le es rentable asalariar, educar ni alimentar a pobladores innecesarios, inútiles, no rentables.

 

En este contexto [de fines del XX e inicios del XXI] delimitado por el dominio perverso del capitalismo, los pueblos rugen, contra el rugido, el imperio militariza el espacio social: prohíbe, reprime, encarcela, suelta a tanatos, empobrece cuerpos y espíritus. Envilece. El terror atómico de Hiroshima y Nagasaki [6 y 9 Agosto 1945] lo inyectan a través del tejido capilar del poder.

 

Muy a pesar de todo, los pueblos siguen rugiendo. En la Venezuela bolivariana, el rugido mundial/continental de la rebelión de los pueblos, deviene en voluntad/en deseo de hacer posible lo pensadamente imposible.

 

El contexto que traza el imperio, delimita. Haciendo uso [abuso] del arsenal bélico. El imaginario contenido en esta ocasión [Venezuela 1999 y hasta siempre] brota por los poros de la piel revolucionaria.

 

Resultan premonitorios dos estudios. Así dicen:

 

“…aquello que mas ha movido a las grandes multitudes de nuestros países en los periodos revolucionarios no ha sido la ambición de crear un orden nuevo, sino la de recuperar un orden antiguo… la energía vital de cada revolución provenía del pasado” [F. Mires, 1988]

“La creación de nuevos espacios de libertad para superar la actual sumisión del individuo soberano a las leyes del mercado o al despotismo del Estado, dependen de la composición material de las subjetividades que el propio proceso social va creando… La comprensión cabal de la plasticidad histórica del sujeto y de los procesos materiales que la determinan, es la única alternativa…” [E. Del Bufalo, 1991]

 

El ALBA, como alternativa bolivariana y/o como amanecer es cauce de esa ocasión. Es un plan de siembra propuesto para cosechar/ocupar territorio [humano y geográfico], expulsando y/o impidiendo la invasión de la inversión del capitalista, quien como todo humano actúa con su intención.

 

Sin embargo, el ALBA echa a andar cuando en el imaginario colectivo los pueblos van reconociendo y hacen suya la intención expresada en el deseo enunciado.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En los acontecimientos, en Venezuela, entre abril y diciembre 2002, el ALBA amaneció socialmente. Fue cuando, los pueblos venezolanos asumieron hacer posible los proyectos de vida inconclusos, abortados, reprimidos. La energía vital del pasado se hizo presente en las calles.

 

Todos en el ALBA, cada cultura con su perfil. Cada cual tiene lo suyo no transferible.

 

Los ritmos de vida están impregnados de cultura, de condiciones del saber. Hay un ritmo del analfabeta, quien al aprender a leer incorpora su experiencia a la lectura. El ALBA reconoce los ritmos y los respeta en desacuerdo práctico con los criterios de la competencia que deshecha multitudes. El ALBA se funda en el respeto de los ritmos de otros.

Cada quien a su paso pero todos a una misma vez, defendiendo la soberanía de los territorios preñados de culturas.

 

Son variadas las versiones como es todo en tiempos de convulsión social. Todas las versiones comparten el ALBA como amanecer, alborada, esperanza consentida, sentida y con sentido.

 

Este planteamiento desconcierta. Todos los sujetos sociales, platean lo suyo sin sujetar a los otros, guiados por la premisa de que la felicidad es una construcción cultural.

 

Si algo inédito tiene lugar en tiempos del ALBA’s es que el cada día del hacer social se nutre de sentido con la práctica del proceso bolivariano.

 

En la Venezuela Bolivariana asumimos como política de Estado que la pobreza solo se supera dándole poder a los pobres.

 

Entre abril y diciembre 2002, el proceso bolivariano aprendió la importancia de la movilización. No era suficiente la movilización electoral. No bastaba emprender proyectos culturales. Hay momentos que requieren de la movilización de todos. En la calle los pueblos unidos derrotaron el golpe de estado y el sabotaje petrolero. Los pueblos en la calle – indígenas, campesinos, citadinos – y el gobierno en situación de crisis, juntos reconocieron sus carencias. De ese reconocimiento algunos hasta entonces “planes de gobierno” se convirtieron en Misiones, desbordando las instituciones del Estado. Sin disolver el Estado, la sociedad asumió misiones de gobierno.

Los criterios de eficiencia de la forma perdieron la razón ante el experimento social de organizarse partiendo de las necesidades: de saber, de salud, de alimentación.

 

De saber: desde leer, oficios, profesiones hasta vivir y producir.

 

De salud: de cuerpo y mente sana en su propia comunidad.

 

De alimentación: facilitando como distribuir un ingreso siempre escaso. Sin desasistir las necesidades de seguridad, y de información política, las misiones avanzan hacia la formación de un solo ejército [cívico/militar] en la Producción y la Defensa.

 

Un colectivo en tensión diaria – La Constitución refrendada el 15 de diciembre de 1999, junto a las leyes habilitantes del 13 de noviembre de 2001, en especial: la Ley de Tierras y Desarrollo Agrario, y la Ley Orgánica e Hidrocarburos, brindaran la posibilidad ante la necesidad imperiosa de convertir “planes de gobierno” en tareas del pueblo protagónico. La reconquista de la tierra / del territorio y del recurso natural no renovable / de PDVSA – del ingreso petrolero, le dieron condiciones y le dan futuro posible a la voluntad política de darle poder a los pobres a través de las misiones. Esto es algo de lo inédito en tiempo de ALBA’S. Las Misiones: Robinsón, Ribas, Sucre, Barrio Adentro, Vuelvan Cara, Mercal con todas las tareas y actividades complementarias que de ellas se derivan dan sentido a la vida. Visto así el desarrollo endógeno es hacia adentro de lo humano y de la geografía, es un territorio con sus pobladores que laboran su propio destino soberano.

 

Las ideas que se conjugan en cada ALBA toman perfil en el camino.

 

Cada ALBA con su perfil. A las misiones asistimos hombre y mujeres de diversas cultural esto quiere decir que todos leemos pero no en el mismo libro. Todos leemos y traducimos lo leído, según nuestra cultura. Los pueblos citadinos tienen costumbres de la ciudad, pero según su región originaria y/o su raza, son citadinos culturalmente diversos. Según será su hogar, sus gustos, sus hábitos, ritmos de comprensión y acción. En síntesis: sus valores y futuros.

Los pueblos indígenas según su geografía, su cosmovisión, labores, ritos y mitos: Sabrán, tendrán salud, consumirán según la fuerza de su tradición. Igual con los campesinos, indígenas o afrodescendientes, andinos o isleños. Cultivadores de la tierra y/o del mar o del rió. Cada cual tiene lo suyo no transferible. Los ritmos de vida están impregnados de cultura, de condiciones del saber. Hay un ritmo del analfabeta, que al leer ajusta el paso dimensionando la vida. Es un ritmo diferente de quienes por labor leímos desde siempre. Al reconocer los ritmos y respetarlos, lejos estamos de diseñar la integración dejando sujetos afuera. Todos allí en desacuerdo práctico con los criterios de la competencia que deshecha a las grandes mayorías.

 

ALBA indígena y/o campesino ocupando una dimensión de territorios que significa su habitar/morar, extenso pero imprescindible para satisfacer sus necesidades culturales. Las tribus no pueden aceptar reubicación ni limitación de espacio. Los campesinos no pueden aceptar reducción de mecanismos de apoyo y de mejoras en las condiciones generales de vida. Las misiones crecen y se difunden por la extensión del territorio nacional.

 

Las culturas tienen ritmos socialmente diferentes. Las ciudades tienen ritmos descompensadores de los biorritmos y de la naturaleza. Hay culturas que caminan al ritmo de la naturaleza y merecen respeto. No pretender exigirles a unos que alcancen los ritmos de otros. Cada quien a su paso pero todos juntos defendiendo la soberanía nacional. Igualdad de condiciones con iguales derechos y deberes constitucionales. Estas situaciones en proceso real avanzan como integración entre los pueblos. El proceso bolivariano mucho tiene que ver en esto, por voluntad política y por contagio social/ cultural.

 

En el imaginario cultural están depositadas otras visiones, construidas en los cruces mestizos de los haceres mercantiles. Por ello es que en el ALBA`s también se incluyen políticas publicas comerciales, que pretenden cambios significativos en las maneras de producir bienes y servicios, concertadas entre privados y entre empresas publicas intergubernamentales.

 

En la segunda mitad del siglo XX, la naturaleza artificial creada en torno a la tecnología capitalista, subsumió costumbres y tradiciones. Formuló maneras de producir y patrones de consumo. El citadino, el profesional libre, las pautas del comercio interinstitucional e internacional estarán presentes en muchos años por-venir.

 

Esta verdad tiene sitio en el ALBA`s por ello, inscribimos en la filosofía del ALBA`s, los Convenios Comerciales Compensados y las Alianzas Estratégicas circunstanciales. Como variantes del combate de restarle apoyo real personal/político, a la ofensiva contrarrevolucionaria.

 

Los Convenios guiados por el sentido del ALBA`s, entienden que en el comercio no esta el problema, admiten la posibilidad de practicar el comercio compensado, en la medida que este resulte mutuamente conveniente, para ampliar y profundizar el intercambio comercial. Es así como surgen convenios comerciales compensados.

 

De Convenios Comerciales Compensados el mejor ejemplo avanza desde diciembre de 2004. Los gobiernos de Cuba y Venezuela decidieron dar pasos concretos hacia el proceso de integración “admiten la posibilidad de practicar el comercio compensado en la medida que esto resulta mutuamente conveniente para ampliar y profundizar el intercambio comercial”.

 

Las Alianzas Estratégicas circunstanciales tienen al petróleo como centro. EL gobierno venezolano utiliza su recurso abundante, escaso en territorios de gobiernos aliados, negociando intercambios complementarios sin exigir compensaciones que vulneren la soberanía de los Estados y dando condiciones de comercialización solidarias que sustituyan las exigencias de las transnacionales privadas.

 

 

Las Alianzas estratégicas que tienen como centro el petróleo y el gas son políticas comerciales fundadas en la conservación de los recursos naturales no renovables, la solidaridad compartida y la corresponsabilidad social entre los pueblos para asegurar el acceso democrático a la energía a un precio razonable. Se concibe como un acuerdo entre gobiernos, no prevé la fusión con capital energético privado, ni la transferencia de recursos del sector público al privado. Concreta esfuerzos para la complementariedad de las capacidades de nuestras empresas estatales de energía.

 

En los últimos 2 años las Macroruedas Binacionales de Negocios, sin tener novedades, en tanto son negocios entre empresarios privados con los gobiernos como facilitadores, ayudan a diversificar orígenes y destinos de las exportaciones e importaciones y con ello reavivan actividades productivas interrumpidas por las políticas de ajustes estructurales y por las acciones de la competencia transnacional estimulan la producción de empresarios privados quienes se habían limitado con asociarse a las oportunidades brindadas por las transnacionales y satisfacen el consumo productivo y de sujetos sociales demandantes. Despertarles las actitudes empresariales no está mal. Si con ello le restamos apoyo real personal/político a la ofensiva contrarrevolucionaria de la intención hemisférica envolvente y expansiva del inversionista imperial.

 

Novedad reciente las organizaciones de trabajadores de Empresas recuperadas que se proponen reactivar el aparato productivo arrebatado por el capitalismo salvaje en el I Encuentro de Latinoamericano de Empresas Recuperadas por los Trabajadores. Encuentro que se inscribe en el esfuerzo de la clase obrera para asumir la gestión de la producción y superar la explotación capitalista.

 

Caracas, octubre 2005. Trabajadores de Brasil, Bolivia, Colombia Costa Rica, Ecuador, Haití, Panamá, Paraguay, Perú, Argentina, Uruguay, y Venezuela.

En el marco del ALBA, firmaron acuerdos de cooperación mutua. Se proponen una economía productiva social, que sea en beneficio colectivo. Celebraron que se conjugan gobiernos de países en los cuales soplan aires de cambios para discutir por primera vez e intercambiar con las empresas recuperadas, posibilidades de acuerdos comerciales.

 

Avanzan las experiencias campesinas y se unen y/o vinculan misiones. Los fundos Zamoranos se convierten en Núcleos de Desarrollo Endógeno buscando transformarse en Empresas de Producción Social. Conforman mesas técnicas regionales que van a brindar las condiciones mínimas de consolidación de experiencias. Persiguen integrar toda la actividad socioproductiva que realiza el fundo en un trabajo de corresponsabilidad y correspondencia, vinculado con lo que es la actividad socioproductiva y social del fundo como de la comunidad donde están ubicados. Profundizando el desarrollo rural integral en la lucha contra el latifundio. Así la Misión Vuelvan Caras tiene como objetivo consolidar el trabajo del año pasado e impulsar el nuevo modelo socialista, cooperativista y revolucionario permitiendo que los Núcleos de Desarrollo Endógeno, se transformen en Empresas de Producción Social.

Así las cosas…..

 

 

Brasilia y Mar Del Plata abren una brecha entre el antes y el después.

 

El ALCA, la negociación de un Área Libre de Comercio de las Américas, esta congelada en su versión original / Miami / Diciembre 94. Desde mediados de 2003 están en revisión las versiones sustitutas. Sin embargo, las intenciones de los capitales transnacionales, Washington y los gobiernos latinoamericanos aliados: Centro América, República Dominicana, Panamá, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia están avanzando en Tratados de Libre Comercio. Son estas razones suficientes para someter a precisiones la construcción de un Espacio Sudamericano de Integración.

 

Venezuela, ante los gobiernos suramericanos, debe proponer reabrir el debate sobre el contenido conceptual implícito en la normativa forjada en el contexto político de los 90s. Debemos denunciar toda intención de proponer una integración suramericana que expresamente conserve y relegitime la normativa jurídica e institucional de los acuerdos subregionales adecuados a la estrategia continental contrarrevolucionaria / neoliberal en los últimos quince años.

 

Para Venezuela, se trata de dos frentes en una misma lucha.

Un frente el entre los gobernantes negociando a los territorios con pobladores y todo. Allí, Venezuela debelando los dispositivos, las disidencias y sus contenidos para que los pueblos reconozcan las decisiones de sus gobernantes. Y pueden trazar políticas bien informados.

 

El otro frente, actuando como sujetos, responsables y comprometidos construyendo culturalmente la felicidad. Desde facilitar puntos de encuentro entre campesinos y/o indígenas, hasta promover ruedas de negocio donde participen ciudadanos empresarios.

Intencionalmente conjugando “la creación de nuevos espacios de libertad para superar la actual sumisión del individuo soberano… [Permitiendo] que las grandes multitudes le den sentido a la energía vital cultural que los anima”

 

 

La Unión Suramericana de Naciones buscando que sus raíces cultiven una integración entre los pueblos que trascienda el MERCOSUR y la CAN, al priorizar lo social: la vida, el vivir.

“No podemos dejar de lado a los pueblos, sin los pueblos no hay vida, sin los pueblos no hay alma… son los pueblos el combustible”. Hace falta audacia.

 

Brasilia / 30 de septiembre y Mar del Plata / 5 de noviembre. Dos situaciones que marcan un hito [en la política de Cumbres], han dejado evidencia de las disidencias, rompiendo con el tradicional consenso, siempre falso en esencia, pero utilizado para amarrar compromisos consensuados, encubridores de los disidentes. Debemos celebrar las evidencias de las disidencias como la novedad de los hechos recientes.

 

La brecha que abre, después de Brasilia y Mar del Plata, permite una lectura política evidente y brinda la ocasión de la información que anhelan las organizaciones sociales emancipadoras para fortalecerse con la certeza de que vivimos una ocasión que permite resistir e insurgir. Resistir la ofensiva contrarrevolucionaria del imperio bélico transnacional e insurgir con iniciativas forjadoras del socialismo, que conlleva priorizar lo social, pensamiento de partida de la vitalidad de los movimientos políticos insurgentes a la Revolución Francesa, y por que no: revolucionarios contrarios a las revoluciones burguesas.

 

Es motivo de reflexión la insistencia de retornar al siglo XVIII. Desde el imperio rememoran el Destino Manifiesto con aquello de proteger y desde los pueblos rebuscan en sus raíces para recoger la cosecha milenaria.

 

Hermoso dilema nos acosa.

 

 

 

 

RESUMEN

 

Hablar del ALBA exige trazar el contexto que motiva su insurgencia. Latinoamérica cumplió medio siglo de debate sobre integración. Diversas tendencias del pensamiento participaron en el debate. Sin embargo, son dos las estrategias enfrentadas. Diversos fueron los esfuerzos por hacerlas coincidir en una política consensuada. La situación presente denuncia la congruencia de cada una de las estrategias en – si – misma. La política hemisférica de la década de los 90´s del siglo XX, mas que hacer converger posiciones abre brechas que alertan sobre las diferencias. La intención de negociar una Constitución Continental, con Iniciativas y Cumbres aviva el fuego de las disidencias y los pueblos se proponen abrir cauces buscando integrar el cuerpo social desintegrado, haciendo presente la energía vital del pasado.

https://www.alainet.org/es/active/12968?language=en
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