Miles de chilenos recordaron al Presidente constitucional Salvador Allende y los cientos de militantes de la Unidad Popular que fueron detenidos desaparecidos y ejecutados durante la dictadura militar que asoló a Chile durante 17 años. La marcha convocada por la Asamblea Nacional por los Derechos Humanos y apoyada por los partidos políticos que apoyaron al gobierno de Allende, tuvo ayer un ingrediente no menor: La participación masiva y oficial del Partido Socialista de Chile -colectividad a la que perteneció Allende-, y que no asistía a la tradicional caminata desde los tiempos en que gobernaba Augusto Pinochet (1973-90). Como todos los años, los manifestantes iniciaron la romería desde la plaza de Los Héroes, portando banderas, pancartas y retratos del ex mandatario, de detenidos desparecidos y ejecutados políticos, como de las extinta líder de la izquierda chilena, Gladys Marín. Tras pasar frente a la plaza de ciudadanía, los convocados se detuvieron en la entrada de Morandé 80 (acceso lateral de La Moneda que generalmente utilizaba Allende) y en la estatua de Allende a un costado del Palacio de Gobierno. En ambos emblemáticos lugares, depositaron ofrendas florales mientras dirigentes de partidos y organizaciones de izquierda, así como de agrupaciones de derechos humanos destacaron su legado en defensa de la justicia social y la democracia en Chile. La marcha continuó luego por la calle Morandé hacia San Pablo, para seguir por Bandera, General Mackenna hasta cruzar el Puente La Paz para tomar Avenida Recoleta hasta el Cementerio General, lugar donde se realizó el acto central con la participación de grupos musicales y discursos de dirigentes. Entre la multitud sonaban tambores y ondeaban banderas chilenas, de la Izquierda Cristiana, el Partido Socialista, Comunista, de Cuba, Palestina, Bolivia y lienzos representativos de organizaciones de Derechos Humanos. Llegada al cementerio Tras una hora de caminata por las calles de Santiago, y no de varias acciones de grupos anarquistas que opacaron la marcha (ver nota aparte), los manifestantes al llegar al Cementerio General se encontraron con un escenario, donde hizo uso de la palabra Pablo Orellana, dirigente de la Asamblea de Estudiantes Secundarios y la Presidenta de la Agrupación de Detenidos Desaparecidos (AFDD), Lorena Pizarro. En la oportunidad la líder humanitaria exigió a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, “realizar un Plebiscito, para romper con los candados de la antidemocracia“. Pizarro, saludo el aporte realizado por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) en trabajar por la unidad de todos los sectores sociales y políticos nacionales, en lo que es ahora el Parlamento Político y Social ”La CUT ha levantado una plataforma unitaria por más democracia y justicia social, que se expresa en exigir cambio en el sistema electoral binominal, reforma previsional, cambio de la LOCE, reforma al Código Laboral". La dirigente anunció que el mes de octubre próximo se realizarán diversas manifestaciones por más justicia social “todos tenemos que estar luchando y asistiendo a esas actividades”, apuntó. La vocera de las organizaciones de derechos humanos, saludó al pueblo cubano y en especial al presidente de esa nación caribeña, quien se está recuperando de una operación” Fidel ha dado un ejemplo de consecuencia y valentía para mantener inclaudicable su camino revolucionario frente al bloqueo imperialista y al terrorismo”, así mismo Pizarro, también mencionó el aporte de la revolución bolivariana y los avances democráticos en Bolivia y la solidaridad en el medio oriente. Justica y verdad La dirigenta reiteró el clamor de loas organizaciones de derechos humanos de verdad total y de justicia plena “Si bien hemos avanzado en verdad y justicia, aún no conocemos la verdad del destino de los detenidos desaparecidos y lo que ocurrió con cada uno de ellos y de los ejecutados políticos cuyos cuerpos no han sido encontrados”. Dijo que el principal responsable de estas violaciones a los derechos humanos es Augusto Pinochet, “el cual no ha sido condenado por sus crímenes, en este camino queremos destacar la decisión de la Corte Suprema de desaforarlo por los desaparecidos y torturados del Campo de exterminio de Villa Grimaldi”. Pizarro fue enfática en señalar que aún falta mucho para lograr la verdad y ejemplificó en el dolor de los familiares de las víctimas del Patio 29, “los cuales pensaban que habían encontrado a sus seres queridos y los vieron nuevamente desaparecer al saber que no eran ellos por errores un su identificación”. "Hay muchos crímenes por esclarecer, como la muerte del ex presidente Eduardo Frei Montalva, con cuya familia solidarizamos. La impunidad y el punto final siguen siendo un peligro real mientras siga vigente el espurio Decreto Ley de Amnistía. Es por eso que exigimos una vez más y con mucha fuerza su anulación", subrayó la presidenta de la AFDD. Pidió la anulación de la normativa que estableció el secreto por 50 años de los nombres de los torturadores y que fueron recogidos por el Informe Valech en 2004 y criticó la prisión de comuneros mapuches a quienes “se les aplicó arbitrariamente la Ley Antiterrorista", indicó. Pizarro lamentó que Chile aún no ratifique el Estatuto de Roma que establece el Tribunal Penal Internacional y la jurisdicción internacional ante los crímenes de lesa humanidad y denunció que el Parlamento tampoco ha ratificado importantes tratados internacional en materia de derechos humanos, como la Convención Interamericana sobre la Desaparición Forzada de Personas y la Convención sobre Imprescriptibilidad de los Crímenes de Guerra y el Delito de Genocidio. Por último, Lorena Pizarro señaló que el legado de Salvador Allende están plenamente vigentes, “no sólo los derechos humanos, sino los derechos civiles y políticos sino económicos, sociales y culturales que y su gobierno defendieron”, finalizó. Fuente: Crónica Digital (Santiago de Chile)
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