Panamá, ante el nuevo orden económico internacional, no difiere de los acontecimientos dispares del desarrollo. El modelo económico que se ha implementado en el país se encuentra al servicio del tráfico internacional de mercancías y capitales: economía de servicios orientada especialmente hacia los servicios internacionales a través del Canal de Panamá, la Zona Libre de Colón y el Centro Financiero. El Canal de Panamá, cuyo funcionamiento es a través de un sistema de esclusas, de aproximadamente 80 km de largo, que une los océanos Atlántico y Pacífico es uno de los puntos más angostos del Istmo de Panamá y del continente americano. El mismo no ha hecho grandes aportes al desarrollo integral de la Nación. Tampoco ha contribuido al desarrollo sostenido de los diferentes sectores de la economía nacional. Una prueba de ellos son los niveles de desigualdad, explotación y empobrecimiento que existe en el país. Las autoridades gubernamentales actualmente, pretenden sofocar los bajos niveles de producción introduciendo por medio de la autoridad del Canal de Panamá (ACP), el Plan Maestro de Ampliación del Canal, el cual pone en riesgo directa e indirectamente el futuro de Panamá. Ampliación del Canal ¿Por qué? Debido a la acelerada economía globalizante y su apertura de mercado o comercio liberal, el intercambio mercantil a través de las exportaciones e importaciones se hacen exigentes, y para lograrlo se requiere del ágil y eficiente servicio de transporte marítimo, en donde el Canal de Panamá juega su papel importante. Para esto se constituyó el Programa de modernización, que garantizaría que la vía interoceánica se mantenga en capacidad de atender la demanda de tráfico, así como la calidad de los servicios de tránsito. El programa contempla veinte proyectos que se clasifican en tres categorías de acuerdo a sus objetivos, a saber: a. Capacidad del Canal b. Modernización y expansión y c. Principales mantenimientos y reposiciones. Dicho programa tiene un costo aproximado de un billón de dólares. Enmarcado en el mismo se desarrollo escalonadamente el Plan Maestro de Ampliación del Canal con miras a fortalecer el comercio marítimo mundial. En esa dirección, se aprobó la ley Nº 44 de 31 de agosto de 1999, mediante la cual se crean nuevos límites de la Cuenca Hidrográfica del Canal, cuyo objetivo era la creación de embalses o lagos necesarios para abastecer el Canal o un tercer juego de esclusas, cuya extensión era de 552, 761 hectáreas compuestas de la siguiente manera: 339,649 hectáreas de la cuenca tradicional, y 213,112 hectáreas de la cuenca occidental, la cual engañosamente la llamaron Cuenca Occidental del Canal. Dicha ley fue derogada en junio pasado. Impactos de la Ampliación del Canal Luego de la reversión del Canal a las autoridades nacionales en el año de 1999, se ha profundizado la distribución desigual de las riquezas; evidente hecho que Panamá tiene alrededor del 40 por ciento de la población en situación de pobreza, y de ellas el 16.6%, es decir 508,700 personas, subsisten en situación de pobreza extrema. Algunos costos o consecuencias más relevantes de la ampliación del canal: En lo social: - La falsa campaña acerca de los miles de empleos que producirá la ampliación fomentará la migración de hombres y mujeres desempleados en el interior del país, para quienes el Canal es una quimera de promesas que no ha mejorado su condición de vida. No obstante, las ciudades de Panamá y Colón no podrán ofrecer otra cosa que no sea la marginalidad y pobreza actual. - El incremento de la inflación que hemos experimentado en estos años será mayor, pues la especulación en los precios de los productos que se utilizarán para la construcción del tercer juego de esclusas aumentará todos los precios. En consecuencia, el costo de la canasta básica de alimentos y el costo de la vida en general aumentará. - Los recursos por peajes futuros en lugar de satisfacer las necesidades postergadas del pueblo se destinarán a sufragar los costos millonarios de la ampliación, resultando un proyecto no autofinanciable como falazmente nos han planteado. Por otra parte, existen criterios técnicos de especialistas que señalan que los costos son irreales y la obra resultará en costos muy superiores a los señalados en la propuesta. - Sobre la creación de empleos, no existen en dicha propuesta cálculos que muestren más de 6,750 vacantes, en cambio, las cifras minimizadas por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) sobre el desempleo para el 2005 registraron 136 mil personas. En lo ambiental y ecológico: - Afectaría gravemente el Corredor Biológico Mesoamericano. - Afectaría especies de animales silvestres. - Destruiría grandes extensiones de bosques. - Alteraría las condiciones climáticas. - Se agravará la escasez de agua, al utilizar más agua dulce. La falta del vital líquido hoy afecta a más de 250 mil habitantes del área metropolitana. - Los riesgos ecológicos que implica la construcción del tercer juego de esclusas no se han estudiado a profundidad responsable. En lo económico: - Debido al costo de expansión, su financiamiento mediante préstamos internacionales aumentará la deuda externa. - De sufragar el costo por medio de lo que genera el Canal, la economía nacional dejaría de percibir esos ingresos por los años que tarde en pagarse la deuda. - Se reducirá el presupuesto nacional, disminuyendo la inversión para los renglones de educación y salud. - La propuesta del gobierno y la ACP carece de sentido y perspectiva para el país, al no enmarcarse en un proyecto de desarrollo nacional que mejore las condiciones y calidad de vida de la mayoría empobrecida de la población panameña. - El financiamiento de la obra incrementará la deuda pública, la cual en la actualidad alcanza los 10 mil millones de dólares. Los recursos que anualmente Panamá destina al pago de los intereses de la deuda supera los mil millones de dólares. Con la ampliación se incrementará la deuda y anula toda posibilidad de desarrollo nacional. En lo jurídico: - Se ha impulsado un proceso de decisión en el campo del orden público, que pone en peligro la paz social por no seguir el orden de consulta popular violándose el debido proceso de participación democrática. - El secretismo y la falta de transparencia en las actuaciones de la ACP, favorece la adopción de decisiones a espaldas del pueblo panameño, por ejemplo el desvió de fondos para un proyecto de ampliación que no ha sido aprobado por la ciudadanía. - El Canal y las inversiones que se hagan en él, como la propuesta de 5,250 millones de dólares de los ingresos que debemos recibir de dicha actividad, están enmarcados en el Tratado de Neutralidad. O sea, es posible la intervención militar como lo manifiesta el articulo IV para mantener neutral el Canal bajo todo contexto mal intencionado. - Se ha manipulado jurídicamente la Constitución de Panamá, cuando se modificó el artículo 319, que establecía la obligación de someter a aprobación a Referendo Nacional, cualquier contrato que celebrará el Órgano Ejecutivo con alguna empresa o empresas particulares o pertenecientes a otro Estado o Estados, la cual pasa hacer potestad de la ACP. En lo científico y técnico: - Se trata de un proyecto que en el mejor de los estilos del servilismo, pretende entregarle los recursos naturales a las transnacionales marítimas representadas en la Junta de Asesores. Dicha junta, sólo representa los intereses de los principales bancos del país, como de la partidocracia neoliberal que ha lucrado del erario público de forma alternada cada cinco años. - Los estudios sobre los megapuertos financiados con fondos públicos de la ACP realizados todos en el extranjero. - La ampliación del Canal fundamentada en la construcción de barcos postpanamax no es correcto, existen 300 barcos de este tipo que utilizan rutas específicas. Nada asegura el paso de los postpanamax. Además, el desarrollo del sistema intermodal al interior de los Estados Unidos que impedirá la rentabilidad optimista que plantea la ACP. No hay contratos ni compromisos de las navieras que aseguren que ellas pagarán el aumento de peajes de 3.5% por año, que en 20 años será de 70 %. - De los estudios y análisis de factibilidad e impactos tecnológicos, aún no representan una justificación responsable y seria sobre los riesgos probables en futuro. De esta manera podemos decir que la ampliación del Canal no es rentable, pero si representa alta rentabilidad para los intereses privados nacionales e internacionales. Alternativas Existen diversos estudios de científicos expertos que plantean otras opciones para aumentar el recurso hídrico del Canal. Así, por ejemplo, existen: - Estudios del cuerpo de ingeniería de los Estados Unidos realizados en la década del 40. - Informe de la Junta Directiva de junio de 1961. - Los informes de la firma Tudor Engineering de 1962-1963. - El estudio de abastecimiento de las nuevas fuentes de agua en la primera mitad de los años 70, y el estudio de construir una canal a nivel del mar. - Informe de la Comisión Tripartita 1993. Hoy en día existe un estudio que permitiría elevar los barcos por las esclusas sin perder agua, que es el Sistema de Reciclaje de Agua a través de tinas o piletas, el cual es viable técnicamente. Sin embargo, el desarrollo o progreso es bienvenido, pero la falta de transparencia y la mala distribución de la riqueza por parte del gobierno ha sido objeto de rechazo, que a su vez las alternativas han pasado hacer estudios archivados. Referendo y el movimiento social El 24 de abril el gobierno del presidente Martín Torrijos, en un acto con grandes personalidades públicas del ámbito privado y vende patrias al servicio de los Estados Unidos, presentó la Propuesta de Proyecto de Ampliación del Canal: Proyecto del Tercer Juego de Esclusas, la cual fue difundida por los medios de comunicación a nivel nacional. Acto que evidenciaba los grandes intereses oligarcas y la continuidad de saqueo a la nación, y que la misma tuvo como carisma el patriotismo disfrazado. Dicha propuesta se fundamenta en 120 estudios con más de 55 mil páginas que la ACP ha venido trabajando desde hace varios años. Lamentablemente, al momento de presentar el resumen ejecutivo, más del 65 por ciento de los estudios permanecían en el idioma inglés. A partir de la presentación de la propuesta de ampliación, la ACP y el gobierno han realizado cambios significativos. La ACP, variando su política de secretismo, se ha volcado a determinados espacios en la sociedad que considera favorable a su propuesta, sin admitir el necesario debate público. El gobierno del presidente Martín hizo cambios en el gabinete y nombró un equipo para la divulgación del proyecto. En ambos casos, más que divulgación del proyecto y dentro de la absurda lógica del pensamiento único, están realizando una costosa labor de propaganda y publicidad enteramente favorable a la propuesta única de ampliación de la ACP. Sin embargo, el movimiento popular y distintos sectores de Panamá, organizados en FRENADESO, Unión por el NO y distintas articulaciones, víctimas de las políticas de corrupción e injusticia social, han salido a las calles a promover una política de conciencia para exigir al gobierno que no es rentable la ampliación del Canal y que su inversión costosa debiera dirigirse a los servicios de salud, educación, vivienda y seguridad social para garantizar una mejor vida. El próximo 22 de octubre se realizará una consulta para decidir si la ampliación del Canal es necesaria o no, donde el gobierno y la ACP ha contado con todos los recursos económicos a favor del SI, dejando al movimiento popular huérfano de los mismos. Pero es preciso enfatizar que no ha existido un debate crítico por parte del gobierno, ya que sus argumentos no son justificables y abundan las irresponsabilidades. Obviar las promesas y engaños como: la ampliación traerá más empleo y desarrollo económico al país, y pasaremos de tercer mundistas a primer mundista sin pasar por la segunda base. Entonces, la ampliación del Canal de Panamá, ¿para quienes? Fuentes consultadas: - Pastoral Social- Caritas Panamá. - Autoridad del Canal de Panamá ACP. - Programa Plurinacional Democracia y Derechos Humanos. El Canal de Panamá: Otras voces ante la ampliación. Panamá, octubre 2005. - Primer informe al país: Grupo Illueca. Panamá, marzo de 2006. - Segundo informe al país: Grupo Illueca. Panamá, octubre de 2006. - Olmedo Carrasquilla II es activista popular y miembro del Servicio Paz y Justicia SERPAJ-PANAMÁ