La votación tiene como eje la situación de las tropas estadounidenses en Iraq. La balanza se inclina hacia los demócratas. En medio de este clima se emitió la sentencia que condena a muerte a Sadam Husein.

Como sucede cada dos años, el primer martes luego del primer lunes de noviembre los 100 miembros del Senado, actualmente compuesto por 55 republicanos, 44 demócratas, y un independiente podrían ratificar la opinión del 61 por ciento de estadounidenses que está en desacuerdo con las políticas de la administración republicana.

En medio de la campaña para las elecciones legislativas y como para influir en las votaciones de hoy, el presidente George W. Bush se refirió a la reciente sentencia, emitida el domingo contra el ex presidente Iraquí Sadam Husein, que lo condena a la horca. “La sentencia de muerte de Sadam representa un importante logro hacia la libertad de Irak (…) Un hito en los esfuerzos del pueblo Iraquí por cambiar el mandato de un tirano, por el mandato de la ley”, dijo el mandatario.

Huseim fue declarado culpable de crímenes contra la humanidad en el juicio por la muerte de 148 chiítas, en la localidad de Duyaila, en el año 1982. Queda claro que el juicio fue un plan diseñado por la Administración Bush para reforzar la imagen de su gobierno de cara a las elecciones que mañana ponen en juego el control republicano del Congreso, que será definido por un sufragio popular. El mismo pone en relieve los planes federales de seguridad, economía, inmigración y la guerra contra Iraq.

Además, 36 estados de la Unión organizarán votaciones para renovar sus respectivas gobernaciones departamentales, y se prevén fuertes disputas en Iowa, Arkansas, Florida, Ohio, Massachusetts y Nueva York.

Según los sondeos, hasta el momento, los demócratas llevan ventaja electoral en varios estados del país del norte y tienen oportunidad de ganar media docena de escaños en el Senado. No obstante los ciudadanos independientes han expresado que el vuelco hacia el Partido Demócrata (PD) se debe a un descontento por la gestión republicana.

Esta inclinación concuerda con la declaración del Jefe de la campaña legislativa del Partido Demócrata para el Senado, Charles Schumer quien expuso que “La insatisfacción de los estadounidenses con la gestión de Bush “nos dará la victoria”.

Los demócratas necesitan 15 escaños más en la Cámara de representantes y 6 nuevas bancas en el Senado. Estrategas de campañas han aconsejado a los políticos demócratas convertir las llamadas elecciones de Medio Término en un escrutinio acerca del desempeño del Ejecutivo republicano, quien aún estará en La Casa Blanca hasta el 2008.

De este modo los demócratas adquirieron como lema de campaña la expresión "Ya es suficiente, votemos bien" en una apuesta sutil a la critica que como oposición hacen a la actual conducción. En tanto, el presidente Bush afirmó que su partido conservará la mayoría en el Congreso y acusó a la oposición de darle la espalda a la seguridad de los ciudadanos.

Como en las consultas de Medio Término de 1974 con el escándalo Watergate y la renuncia de Richard Nixon de fondo, otra vez los demócratas hicieron prevalecer los asuntos federales sobre temas estatales, para obtener ventaja en las urnas. Incluso los hechos se semejan por los repetidos casos de corrupción.

Por otro lado, se han registrado 105 mil nuevos votantes latinoamericanos, en los estados de Florida, Nueva Jersey, Arizona y Pensilvania. Este número significa un aumento de más del 1 por ciento del total de votantes latinos registrados para las elecciones de 2004, según comentó el Director Ejecutivo Nacional de “Democracia USA”, Jorge Mursulí, en una rueda de Prensa en Washington. Así mismo aseguró que no se pretendió favorecer ninguna opción política, ya que lo importante es que los latinos voten para que su comunidad cobre visibilidad e importancia.

Como se sabe la guerra contra Irak y la predica contra el “terrorismo internacional” llevado a cabo por Estados Unidos es la matriz sobre la que se sientan republicanos y demócratas para desenfundar sus plataformas políticas, a lo que ahora se suma la condena de Husein; una determinación que acrecienta la polémica, saca a la luz una vez más la prepotencia estadounidense y el cinismo de su conductor.

Fuente: Agencia Periodística del MERCOSUR (APM), Mar del Plata / Argentina
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