El candidato presidencial paraguayo, Fernando Lugo, por la Alianza Patriótica para el Cambio envío la siguiente carta a los presidentes de Paraguay y Brasil.


Asunción, 13 de noviembre de 2007.

Apreciados
Presidente de la República del Paraguay, Nicanor Duarte Frutos y
Presidente de la República Federativa del Brasil, Luis Inácio Lula Da Silva

PRESENTE

De mi mayor consideración:

En relación a la publicitada “VENTA ANTICIPADA” de la energía de Itaipú, me dirijo a Uds., a fin de manifestar mi preocupación –así como la de innumerables compatriotas— por la operación financiera propuesta en relación a nuestra principal riqueza natural.

El Paraguay sufre desde el año 1973 el cercenamiento de sus legítimos intereses en Itaipú, al no reconocérsele el derecho a disponer libremente de su energía ni a percibir un “justo precio”, como en cambio lo reconocía la “ACTA DE FOZ DE YGUAZÚ” de 1966, suscrita entre el Paraguay y el Brasil, precursora del mismo tratado de Itaipú. Vale decir, hace 41 años el Brasil reconocía que el Paraguay tenía derecho a un “justo precio” (cita textual) por la venta de su energía que no pudiera consumir. La dictadura militar brasileña en coordinación con la dictadura de Alfredo Stroessner, le despojaron al Paraguay de este derecho en Itaipú (el 26 de abril de 1973), obligándole a ceder AL COSTO la totalidad de la energía que no consumiera. Ahora, sin reverse aún esta injusta situación, se anuncia que se concretaría una venta anticipada de la energía de Itaipú, con lo cual el derecho del Paraguay a reclamar un “justo precio”, al decir del Acta de Foz de Yguazú, podría quedar afectado.

En términos equivalentes de energía el Paraguay exporta (como hidroelectricidad) unas 8 veces la energía que importa (como petróleo). Con buenos precios de la energía debería irnos estupendamente bien (vendemos 8 y compramos 1). Ocurre sin embargo todo lo contrario. A los actuales cotizaciones debemos pagar más de 1.000 millones US$ por importar petróleo, en tanto que por nuestra exportación hidroeléctrica percibimos menos de 400 millones US$. Vendemos 8 y compramos 1, y nos empobrecemos en 600 millones US$ por año, lo que es un absurdo. Ud., Presidente Lula, ha manifestado, dirigiéndose a Bolivia, que no pretendía basar el crecimiento del Brasil a costa de la miseria de países más pobres. Eso es, desgraciadamente, lo que ocurre con el Paraguay y el neocolonialista tratado de Itaipú. Debemos renegociar tal tratado de común acuerdo sobre la base el “ACTA DE FOZ DE YGUAZÚ”, del “justo precio”.

Por lo señalado, quiero manifestar mi más categórico rechazo al eventual proyecto de “VENTA ANTICIPADA” de la energía de Itaipú, 50% paraguaya, y que, si llegara a materializarse, el trato será desconocido por el gobierno que estaremos encabezando desde el 15 de agosto de 2008. Al Paraguay y al Brasil nos conviene llegar a un trato justo en Itaipú, el que se construirá según lo ya acordado entre ambas naciones en 1966, del “justo precio” para la energía paraguaya que no podamos consumir y que exportamos al Brasil.

Sin otro particular, les saludo con mi mayor consideración.


Fernando Lugo
Alianza Patriótica para el Cambio