San Salvador.- Cristina Henríquez es alta, delgada, usa lentes y no pierde de vista ningún detalle. Ronda las cuatro décadas y conoce a "medio mundo" de la clase política en El Salvador. Durante el proceso de negociación que libraron el gobierno salvadoreña y la ex-guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), ahora convertido en partido político, Cristina jugó un papel clave: en sus manos se fabricaron infinidad de documentos "ultra secretos" en aquellos años turbulentos. Ella era de las principales asistentes del grupo negociador del FMLN. Hoy, después de la guerra, Cristina sigue siendo una pieza clave en la política de los grupos de izquierda. Con toda su experiencia y la confianza que en ella han depositado los dirigentes del FMLN, esta señora que vivió más de una década en el exilio se ha convertido en la mano derecha del actual jefe municipal de San Salvador, la capital de este país centroamericano que por primera vez en su historia cuenta con un alcalde de izquierda. A poco más de un año que Héctor Silva llegó a la silla edilicia, muchas cosas están cambiando en San Salvador, una ciudad que cuenta con más de un millón de habitantes si se considera la cantidad de ciudadanos que aquí viven, estudian o trabajan. Héctor Silva, un médico convertido en político, llegó a la municipalidad apoyado por una coalición de izquierda cuyo principal caudal de votos provenían del FMLN, partido que en la última elección quedó como segunda fuerza electoral apenas varias décimas por debajo del derechista Partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), actualmente en el poder. La llegada de la izquierda a la Alcaldía capitalina hace presagiar fuertes posibilidades de un eventual triunfo electoral de la oposición en la contienda por la presidencia en marzo de 1999, por lo que la administración de Héctor Silva se ha convertido en "la vitrina" preelectoral del país. Algunos ciudadanos hablan bien de su administración, otros lo critican agriamente. La polarización política luego de más de una década de conflicto armado no ha desaparecido y muchos capitalinos traducen su simpatía política en calificativos para la gestión municipal. Pero también hay evaluaciones más frías, y en general, Héctor Silva ha pasado con buena nota el primer año de gobierno de acuerdo con los resultados de las últimas encuestas. ALAI conversó con el alcalde, quien podría convertirse en el candidato presidencial del FMLN y, eventualmente, en el primer presidente de izquierda en este país de seis millones de habitantes. Silva dice que su peor experiencia como alcalde la tuvo al llegar a conocer su escritorio: "con mucha honestidad le voy a decir que los primeros días... era una angustia terrible que uno no sabía que hacer ni como se hacía esto, después de eso hemos aprendido y yo me siento muy bien, muy cómodo, sobre todo con todo el proceso que hemos impulsado" dijo el alcalde. Y Cristina Henríquez lo confirma, ya que asegura que su jefe llega a las siete de la mañana y se va hasta después de las 7 de la noche. "Todo el día desfila una gran cantidad de gente por esa oficina", y ella de verdad lo sabe, porque es quien lleva su agenda. Las ideas del Alcalde ALAI. En latinoamérica ha habido diferentes experiencias de partidos de izquierda que han arribado al poder municipal. Tenemos el caso de México y Brasil, entre otros. ?Qué de nuevo le trae la izquierda a la capital de El Salvador? SILVA. Ha habido una serie de alcaldes en ciudades capitales que no se califican precisamente de izquierda pero que significan transformación, cambio importante. Por ejemplo, el recién electo presidente del Ecuador, Jamil Mahuad, a quien considero mi amigo, que se considera un hombre de izquierda en lo social y conservador en lo económico. Igual que el alcalde de la ciudad de Guatemala, que es más bien un hombre de derecha pero transformador en la estructura municipal. Este es un fenómeno de transformación a nivel municipal que no es sólo propiedad exclusiva de los que se clasifican de izquierda. Son gente que cree en el municipalismo y que se pregunta: esta ciudad va mal, ?qué hay qué hacer para cambiarla? ALAI. Pero, ?cuál es la novedad que le trae un gobierno de izquierda a San Salvador? SILVA. El absoluto respeto a la democracia, a los derechos humanos, que son las cosas por las cuales se luchó y que es el gran logro de los Acuerdos de Paz. Una estructura de gobierno de la ciudad en que se fomenta y abre la participación. La participación se ha convertido en un elemento fundamental de nuestra administración municipal. ALAI. ?Cuál es la diferencia de la gestión de Héctor Silva con la anterior de Mario Valiente? SILVA. Participación ciudadana, modernización y limpieza de la administración municipal, honestidad y un no a la corrupción. La izquierda ha retomado un concepto que pareciera ser de la derecha, como es la modernización administrativa. Esta municipalidad estaba siglos atrás, sin mecanizarse. Finalmente, la inversión en la ciudad, para lo cual hay que reformar los impuestos, hay que establecer las prioridades para mejorar una ciudad en la que por décadas no se había invertido. Nadando contra corriente ALAI. Siendo su gobierno municipal producto de una coalición de izquierda, ?Cómo le ha ido en su gestión con el actual gobierno del derechista Partido ARENA? SILVA. ?Mal! Yo honestamente tenía una visión distinta, talvez más optimista de lo que ha sucedido. Hemos hablado muchas veces con el presidente, con sus ministros y siempre hemos terminado con declaraciones de buenas intenciones, pero en la práctica no hemos tenido buenos resultados. Ha habido dos tipos de actitudes: una es una actitud obcecada casi enfermiza de obstaculización que proviene de ciertos ministros que ya están claramente identificados. Otra es una actitud un poquito más tolerante, temerosa, tímida que no nos permite tomar iniciativas que vayan en beneficio de la ciudad, pero que por lo menos podemos llegar a consensuar algunos proyectos menores que son importantes y que no hacen ni bien ni mal. Ciertamente, aquella visión que yo esperaba encontrar de hacer cosas que son de bienestar común, de hacerlo independientemente de nuestras diferencias políticas, y que el mérito público sea compartido entre ambos, no ha existido. ALAI. Con la empresa privada, ?cómo ha sido la relación? SILVA. Mejor que con el gobierno. Parece que con los adversarios políticos es más difícil entenderse, pero con la empresa privada ha sido mejor. En las cosas que son de interés común hemos logrado por lo menos establecer los foros de discusión e ir llegando a acuerdos de mutuo interés. La empresa privada nos ha acompañado colaborándonos en las pequeñas gestiones, como los festejos de la ciudad, la inversión en ciertas acciones esporádicas de protección medio ambiental y hemos tenido diferencias en las que no hemos logrado reconciliarnos pero que el proceso de diálogo y de construcción de alternativas comunes ha sido muy rico, y si no productivo de acuerdos, por lo menos productivo de intercambio de experiencias, como son los nuevos impuestos de la ciudad. ALAI. ?La municipalidad está trabajando con una empresa privada ideologizada, o con una que tiene una visión más pragmática? SILVA. Yo no le llamaría ideologizada porque creo que ya no es ese el fenómeno que vivíamos antes. Yo la dividiría en dos categorías: una empresa privada que entiende el sentido de bien común, que quiere lucro como toda empresa privada y que lo busca y que trabaja para él, pero que entiende que para poder lucrar necesita cierta estabilidad, ciertas condiciones ambientales que provienen de hacer concesiones para lo que es el bien común, pagar impuestos, aceptar cierta regulación ambiental, etc. Y Hay otra menos inteligente que no entiende eso y que ve por encima su oportunidad de lucro y su deseo de lucro desmesurado sin tener mayores reparos en la importancia que puede tener el invertir en la ciudad. La justicia tributaria ALAI. Durante los últimos meses su gobierno municipal ha estado enfrascado en un amplio debate sobre la necesidad de actualizar los impuestos en la ciudad. ?Cuál es el punto clave de esta ley de impuestos que usted considera que es revolucionario fiscalmente hablando? SILVA. ?Justicia! La actual ley de impuestos hace que un pequeño comercio pague 1.75% de impuestos sobre sus activos, pero un gran banco, una gran financiera sólo paga el 0.02%, y nosotros estamos pidiendo simplemente que todos paguemos igual. ALAI. ?Qué papel han jugado las organizaciones no gubernamentales en el desarrollo de su gestión municipal? SILVA. Las ONGs han jugado un papel importantísimo en esta gestión municipal, jugando un rol de facilitadores, sobre todo las organizaciones no gubernamentales que tienen como foco principal de su accionar el municipalismo. Ellas, por ejemplo, nos facilitaron el acceso a las experiencias de Porto Alegre, en Brasil y otros municipios en otras partes de América Latina. Una vez que la gente determinó las inversiones y estas se realizaron, la gente tomó también a su cargo el controlar si los gastos habían sido los adecuados. ?De alcalde a presidente? Entrar a la oficina de Héctor Silva es fácil: poca seguridad, poca burocracia. El problema es encontrarlo libre. Su lema de trabajo es "la alcaldía de puertas abiertas", y hasta el momento lo está cumpliendo, sin embargo, según Cristina, nunca falta "un pelo en la sopa". A Silva lo buscan porque se quemó una lámpara, porque quieren abrir una calle o porque hay que discutir las nuevas tasas de impuesto, es decir, "para todo". Sin embargo, también lo persiguen los buscaempleos, aquellos militantes que "sudaron la camiseta" y que ahora piden su recompensa. Por ello las audiencias del alcalde tienen un filtro, Cristina se encarga de recibir las solicitudes, de que el alcalde las revise y que decida a quien atiende él personalmente y a quien remite hacia otros funcionarios. Y esto, porque Héctor Silva tiene mucho que hacer, y sobre todo ahora que, de repente, se va como candidato a la presidencia por los partidos de izquierda. ALAI. ?Se ve Héctor Silva como candidato presidencial de la izquierda para las elecciones de 1999? SILVA. "No quiero. El proyecto municipal me entusiasma, es lo que veo como lo que debemos hacer en el futuro, pero es una puerta que no he cerrado totalmente porque entiendo que hay necesidades de nivel nacional que puedan obligarme a cruzar esa puerta. Sigo trabajando en otras alternativas (de candidatos) que me parecen buenas, igualmente buenas, o incluso mejores, y que así me permitirían seguir gobernando la ciudad". Faltan semanas para que esto se decida, pero lo que sí está claro es que, ya sea en la alcaldía, o en la casa de gobierno, junto a Héctor Silva siempre estará una de sus "mujeres de confianza" que le seguirá ayudando a sobrellevar las arduas, complicadas, delicadas y a veces tediosas tareas que implica un gobierno. Y esa mujer, casi seguro, será Cristina. Prioridades del gobierno municipal de Silva 1. Rescate del centro histórico de la ciudad 2. Modernización de la administración municipal 3. Transformar la forma de financiamiento de la municipalidad (nuevos impuestos, bonos municipales, transferencia del 6% del presupuesto de la nación, entre otros) 4. Adecuado manejo de los desechos sólidos 5. Regulamiento del uso del suelo en la capital 6. Convertir la participación ciudadana en el principal instrumento del Gobierno Municipal San Salvador se hermanará con La Habana San Salvador está en la búsqueda de un hermanamiento con la ciudad de la Habana, Cuba, pero ha encontrado la feroz oposición de algunos de los funcionarios más recalcitrantes de partido de gobierno, incluido el Presidente Armando Calderón Sol. Sin embargo, esto no amilana a Silva, quien asegura que el hermanamiento va, se oponga quien se oponga: HECTOR SILVA: En un mundo globalizado en que los EEUU abre sus cielos a Cuba, en que el Papa visita Cuba y la aeréolinea salvadoreña, que es propiedad del vicepresidente de la República, vuela todos los días a La Habana, y no sólo vuela sino que administra los vuelos internos de Cubana de Aviación, uno pensaría que lo lógico es irse moviendo en esa dirección. Y usando las palabras del Papa hay que "abrirse a Cuba y que Cuba se abra al mundo", independientemente del juicio que uno tenga sobre la calidad democrática o no del régimen que gobierna el país. Eso buscábamos hacer, y eso vamos a hacer, sin embargo, no es esa la mentalidad de nuestros gobernantes nacionales que tienen una visión más corta, un poco más atrasada. Yo estoy seguro que el próximo Presidente de la República, sea de derecha o de izquierda, va a abrir relaciones con Cuba. Nosotros encontramos obstáculos para el ingreso de los funcionarios cubanos, sin embargo, el hermanamiento se va a firmar pero se va a firmará en La Habana. Nos estamos adelantando un poco, siguiendo el camino de los tiempos.