Indígenas chiquitanos consideran como delito la agresión sufrida por sacerdote Adalid Vega

La Organización Indígena Chiquitana, en representación del pueblo Indígena Chiquitano, a través de un pronunciamiento público condena la agresión contra el sacerdote católico Adalid Vega, que fue golpeado, en la municipio de San Ignacio, por disentir con el referéndum sobre estatutos autonómico realizado el pasado 4 mayo en el departamento de Santa Cruz.
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Los responsables de este acto son personas ligadas al Comité Cívico de San Ignacio, además aparecen implicados los supuestos dirigentes indígenas Justo Mercado Ribera y Javier Candia Peña, como indican varios medios de comunicación, por lo que la organización se ha visto obligada a aclarar lo siguiente.


La Organización Indígena Chiquitana OICH, organización que representa al pueblo chiquitano que vive en las provincias Angel Sandoval, Velasco, Germán Busch, Chiquitos y Ñuflo de Chávez del departamento de Santa Cruz, República de Bolivia.

Ante la gravedad de la agresión sufrida por el Sacerdote Adalid Vega Veizaga de la que son responsables miembros de la Unión Juvenil Cruceñista y donde aparecen implicados los supuestos caciques Justo Mercado Ribera y Javier Candia Peña no vemos obligados a declarar lo siguiente:

1.- Justo Mercado Ribera no pertenece a la Organización Indígena Chiquitana OICH, ni al Cabildo Indígena de San Ignacio, ni a ningún Cabildo u organización que se afiliada a la OICH. Por lo tanto es falso que sea cacique del Cabildo Indígena y por consecuencia no tiene legitimidad ni representación alguna del pueblo indígena chiquitano.

2.- Que habiendo tomado nota de las declaraciones de prensa del autodenominado vicepresidente de la “Nación Chiquitana”, Javier Candia Peña, queremos dejar claramente establecido que este señor utiliza el término de “nación chiquitana” como parte de su discurso demagógico, por su propia cuenta y riesgo. Esto no significa que represente de manera alguna al pueblo chiquitano.

3) Como defensores de los Derechos Indígenas reconocidos en Leyes Nacionales y Convenios Internacionales, condenamos la agresión sufrida por el Sacerdote Adalid Vega Veizaga. Agresión está que calificamos como clara violación a los derechos humanos y las libertades civiles.

Recordamos al Gobierno Nacional, Departamental y a la justicia ordinaria que tienen la obligación de actuar conforme a Ley, de manera tal que los autores de estos actos sean detenidos, juzgados y condenados por la justicia boliviana.

4) Finalmente, condenamos a la Unión Juvenil Cruceñista UJC, que desde años atrás se caracteriza por su comportamiento intolerante, racista y xenófobo.

Comportamientos que exigimos sean depurados ante la justicia recordando la obligación del Fiscal General de la República de hacer cumplir las leyes además de la responsabilidad de iniciar acciones penales de oficio contra quienes actúan de manera racista y xenófoba, considerando a éstos como delitos graves contra las libertades civiles y contra los pueblos indígenas como única manera de desterrar y prevenir este tipo de comportamientos antidemocráticos.

Es dado en Concepción a los 20 días del mes de mayo de 2008.

Firma este comunicado Directorio de la Organización Indígena Chiquitana

Rodolfo López Cuchi, Primer Gran Cacique General
Angela Duran Charupa. Cacique de Economía y Desarrollo
Alejandro Alegre Amancio, Cacique de Educación
Eva Melgar, Cacique de Genero
Carmen Chúve, Cacique de Participación Ciudadana
Emigui Poiche, Cacique de Tierra y Territorio

Fuente: Agencia Intercultural de Noticias Indígenas (AINI), Santa Cruz, Bolivia

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