En Guatemala hemos andado por anchas carreteras de la desolación, los tiempos de crisis se han sucedido uno a otro. Menos mal que, según el presidente, ésta ya va menguando y tal vez tenga razón, las anteriores tuvieron su auge y, como han venido, se han marchado. Pero no tenemos la exclusividad, algunos de nuestros vecinos inmediatos tienen lo propio y también bastante complicado.

En México, país que ha estado abrumado por numerosas fatalidades que le han acarreado consecuencias muy graves para la población y para su economía, en los últimos días fue escenario de un hecho fantástico: un comando de 80 zetas, sacó del penal de Cieneguillas, estado de Zacatecas, en tan sólo 35 minutos, a 53 presos por narcotráfico, homicidio, secuestro, extorsión, posesión de armas de fuego exclusivas del ejército y asociación delictuosa, o sea que se llevaron a verdaderas alhajas, que fueron transportadas en 17 camionetas, escoltadas por un helicóptero.

La peliculesca acción se complementó con la indumentaria utilizada por el comando que ingresó a la cárcel, que iba vestido con uniformes de los que usan los agentes federales y portaban granadas de fragmentación y de humo, gases lacrimógenos, ametralladoras, rifles de asalto AK 47 y AR 15. Todos los indicios de tamaña operación señalan a los custodios y a las autoridades como cómplices del operativo, por lo que permanecen detenidas.

Esta es una desgracia complementaria a las secuelas que está provocando la influenza A (H1N1) que ha afectado severamente al comercio, a los restaurantes, clubes y bares, pero, sobre todo, a la industria turística. Se ha gestado un movimiento nacional, encabezado por el Gobierno, para impulsar una campaña llamada Vive México, que busca promocionar el turismo internacional y nacional. Está apoyada por considerables recursos, con participación de personalidades reconocidas que apelan a la solidaridad. Una estrategia apropiada a la difícil coyuntura.

México, la segunda economía de América Latina, cayó un 8.22 por ciento en el primer trimestre y entró en recesión en forma oficial. El periódico La Jornada señaló que en las pasadas dos semanas algunos productos de la canasta básica subieron sus precios ¡entre 22 y 590 por ciento!, entre ellos, la cebolla, el frijol, la leche, los huevos, el pollo, las frutas, con lo que los y las mexicanas enfrentarán otros aprietos en sus presupuestos.

En Honduras, Roberto Micheletti, del ala derechista del Partido Liberal y presidente del Parlamento Unicameral, acusó al Ejecutivo de ser el responsable de algún atentado contra su vida. A diferencia del caso guatemalteco, el señalamiento al presidente Manuel Zelaya fue indirecto, sin embargo, hizo un símil al dirigirse a los diputados “lo denuncio estando vivo, no quiero que después aparezca un video, las hago hoy, aquí frente al pueblo”. Esta tragedia guatemalteca al parecer quiere ser emulada por nuestro vecino.

El Salvador tiene graves problemas pero hay elementos positivos que son relevantes y aportan optimismo. Lo primero, es la próxima asunción de Mauricio Funes como el presidente que inaugura la alternabilidad democrática. Y, segundo, el anuncio que, de los 11 Objetivos del Desarrollo del Milenio, han sido superados dos: la disminución a la mitad del porcentaje de personas en extrema pobreza y la eliminación de las desigualdades educativas entre los sexos.

- Ileana Alamilla, periodista guatemalteca, es Directora de la Agencia CERIGUA.

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