Yo no quiero ofender a nadie, ni ponerme a hacer proselitismo político partidario, pero cuando veo el reclame ese en el que José Mujica pone como sus paradigmas a Michelle Bachelet y a Luis Inacio da Silva, no puedo evitar sentir tristeza.  Ni Chavez, ni Evo Morales, ni Rafael Correa... ¡para Mujica los ejemplos a seguir son Bachelet y Lula!  Más aún: los ejemplos que va a seguir son los de Bachelet y Lula, porque son los que mas o menos ha venido siguiendo como senador y como ministro (en el caso de Lula, compartiendo su apoyo a la impunidad para los terroristas de Estado).  ¿Y para eso quiere ser presidente?  A mi me parece que ese trabajo lo podría hacer mucho mejor Danilo Astori.  De hecho, así lo venía haciendo.

 

Mujica dice que va a seguir haciendo lo mismo que se venía haciendo hasta ahora y que Astori es un crack que va a ser mucho más que un vicepresidente, y como que en realidad van a gobernar a dúo.  Entonces: ¿para qué tanto lío?  ¿Por qué no lo dejaron a él, que es tan bueno y tan capaz?  ¿Qué necesidad de andar armando tanto relajo por un sillón?  No, no sólo no lo dejaron ser el candidato sino que en el Congreso del FA le serrucharon el piso bien serruchado y hasta le inventaron la candidatura del fantasma de Carámbula para sacarle votos.  Un despliegue, un desgaste bárbaro, para ahora agachar las guampas y terminar planteando las mismas cosas que siempre planteó Astori.  Y la dejo por acá, que el día está precioso y no quiero amargármelo más. Disculpen.

 

- COMCOSUR AL DÍA, Montevideo/Uruguay/02.10.09/ -