Frente Amplio superó a blancos y colorados juntos

Ricardo Daher

28/10/2009

Opinión

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La Corte Electoral de Uruguay dio a conocer el lunes 26 de octubre los resultados oficiales del 100 por ciento de los votos escrutados, faltando solo los votos observados, logrando la coalición de gobierno Frente Amplio, 1.093.869 votos, seguido del Partido Nacional con 657.317, Partido Colorado 383.912, Partido Independiente 56.200, y Partido Asamblea Popular con 15.300 votos. Ninguno de los dos plebiscitos recibió la mayoría necesaria. El que buscaba anular la Ley de Caducidad obtuvo el 47,36% de los sufragios. El que buscaba aprobar el voto epistolar el 36,93%.

Con estos resultados, el Frente Amplio que conquistó el gobierno nacional en 2004, mantiene la mayoría parlamentaria con 16 senadores de un total de 30, y 50 diputados de una Cámara de 99 curules. Por primera vez la coalición de centro izquierda logra ganar en 11 departamentos, aunque mostró aumento de votación en 13, registrando una baja en Montevideo, pero igual quedando por encima del 50 por ciento.

Los departamentos en que ganó en FA fueron: Montevideo, Canelones, Salto, Paysandú, Río Negro, Soriano, Colonia, San José, Maldonado, Rocha y Florida. En las pasadas elecciones municipales el FA había obtenido 8 intendencias. El departamento de Treinta y Tres, con gobierno municipal del FA fue el único donde perdió en estas elecciones, aunque estos resultados no son trasladables a las próximas elecciones municipales de mayo. Por ejemplo, en las pasadas elecciones, el FA perdió a nivel nacional en Paysandú y luego ganó la intendencia. En esa ocasión ganó a nivel nacional en ese departamento.

Con respecto a las elecciones de 2004, el Frente Amplio cayó del 50,04 por ciento a un 48,2 por ciento. En aquel entonces el país estaba inmerso en la mayor crisis económica y social de las últimas décadas, y hasta las capas medias afectadas por la brutal devaluación y endeudada en dólares, optó por darle una oportunidad a la izquierda.

En estas elecciones, la coalición de gobierno recibió más votos de los sectores obreros y capas pobres, beneficiados con las políticas de asistencia social, y retrocedió un poco en las capas medias que se resisten a la reforma tributaria. Con esta reforma, el 80 por ciento de los trabajadores pagan menos impuestos, pero los sectores de mayores ingresos deben pagar más.

Los analistas fueron sorprendidos con la baja votación del Partido Nacional, pero recordaron rápidamente que entre los dos partidos tradicionales se da con facilidad el trasiego de votos, aunque eso no significa que en una segunda vuelta todos los votantes colorados se inclinen por el candidato del Partido Nacional. El candidato del Partido Nacional, ex presidente entre 1990-95, Luis Alberto Lacalle, planificó toda su campaña electoral pasada en captar simpatías del Partido Colorado para una segunda vuelta. La prensa local divulgó entonces un manual de campaña donde se instaba a los dirigentes a no ofender ni atacar a sus rivales colorados. En su discurso en la noche del domingo, Lacalle reivindicó figuras del Partido Colorado para convocarlos a apoyarlo en la segunda vuelta.

El ya ex candidato presidencial colorado, Pedro Bordaberry -hijo del dictador- sostuvo en esa misma noche que "personalmente" votará por Lacalle el último domingo de noviembre.

El Partido Nacional que disputará el balotaje, bajó su votación con respecto a 2004 en los 19 departamentos del país y perdió bancas tanto en el Senado como en Diputados. El Partido Colorado recuperó votos en prácticamente todos los departamentos, pero fundamentalmente en Montevideo, Canelones y Maldonado. Aún así, salió tercero en todos los departamentos del país y el porcentaje obtenido, 16%, es el segundo peor de su historia y más bajo que el que logró el FA en su primera elección en 1971. El Partido Independiente creció en su votación, obtuvo un diputado más, pero no logró llegar al Senado. Asamblea Popular no logró ingresar al Parlamento.

Un dato nuevo en esta elección fue que 15.131 personas sólo votaron por uno o los dos plebiscitos y no lo hicieron por ningún partido. Los votos en blanco y anulados se mantuvieron en sus registros históricos.

Un esfuerzo más

Aunque la fórmula presidencial del FA, Danilo Astori y José Mujica, se manifestaron optimistas para la segunda vuelta, era obvio que había una gran decepción en sus rostros. La primera encuesta a boca de urna -realizada por Cifras de Eduardo "sordo" Gonzalez- había pronosticado que el FA rozaba el 50 por ciento y que la papeleta rosada por anular la ley de caducidad superaba el 50 por ciento. Quizás basados en esos datos el comando de campaña anunció una conferencia de prensa para las 20.45, pero después fue suspendida. Las encuestas a boca de urna había subestimado el voto al FA y a la papeleta rosada.

Al comparecer ante la prensa, minutos antes de la 22 horas, José Mujica dijo que el Frente Amplio tuvo una “alta votación en todo el país” y que su Partido tiene “un punto de arranque francamente positivo”. El candidato a presidente afirmó que “la sociedad nos exige un esfuerzo más, participar en una segunda vuelta” y que en ese sentido el FA tiene “un punto de partida muy optimista”. “Tenemos un punto de arranque francamente positivo y saldremos con arrojo a la lucha y le vamos a pedir a nuestros compañeros un poco más de esfuerzo porque así nos ha propuesto el pueblo uruguayo”. “Estoy encantado porque soy un hombre de lucha, porque desde que estoy en política nadie me regaló nada”, agregó Mujica al ser consultado sobre el resultado de esta elección.

El candidato del FA destacó que su partido demostró una vez más que es la fuerza política más importante del país: “De ninguna manera descarto a esta altura que se pueda tener la mayoría parlamentaria. De ser así, se negociaría y se hablaría. Creo que es un país bastante abierto desde ese punto de vista”. "La sociedad nos exige un esfuerzo más para participar en una segunda vuelta. (...) Nuestro mensaje es de victoria política en el juego comparativo de los partidos de este país y en el compromiso de lucha”, agregó Muijca.

El presidenciable afirmó: “Tenemos un punto de arranque para mañana que es positivo y saldremos con luz roja a la lucha y le vamos a pedir a nuestros compañeros un poco más de esfuerzo”.

Danilo Astori afirmó que en el balotaje se deberán medir dos gestiones: "La del Frente y la de los partidos tradicionales. La verdad es que no encuentro con qué comparar este proyecto nacional, porque sólo la izquierda lo tiene", afirmó el candidato vicepresidencial. “Estamos contentísimos con la votación recibida. Cómo no estar contentos con la votación. Nos dirigimos a la victoria. (...) La distancia con el Partido Nacional es hoy superior a la que existía en 2004 y eso es un estímulo muy importante para encaminarnos a la victoria”.

Según Astori, en noviembre el país debe elegir entre dos modelos diferenciados: “Estamos seguros que en esta segunda vuelta vamos a plantear claramente el plebiscito. Acá va a haber un plebiscito clarísimo entre dos gestiones, la del Frente y la de los partidos tradicionales. La verdad es que no encuentro con qué comparar este proyecto nacional porque solo la izquierda lo tiene”. Astori destacó varias veces a lo largo de la conferencia que el Frente Amplio buscará, en caso de ser gobierno, lograr acuerdos con los demás partidos políticos. “Queremos reiterar nuestra actitud de acuerdo con los demás partidos. Reiteramos nuestra actitud de apertura para hacer acuerdos. (...) Más allá de, por supuesto, nuestra permanente actitud referente a la apertura por acuerdo, hay claramente dos visiones que han quedado expuestas y son diferentes y el pueblo va a tener que elegir entre ambas, sin perjuicio de que en temas fundamentales se puede seguir trabajando sobre acuerdos”, aseguró Astori.

Por otra parte, consultado sobre el resultado negativo en ambos plebiscitos, Mujica aseguró que el voto epistolar es un tema que no está agotado y que provocará futuras discusiones. Cuestionó, además, que estas consultas se hagan en forma conjunta con las elecciones. “Considero que los plebiscitos y su lucha quedaron un tanto opacada por la disputa de carácter político. No soy partidario de poner el plebiscito junto a las elecciones. Creo que esta ha sido la causa fundamental que ha determinado este resultado y también alguna conclusión en el marco de las ideas, sobre todo en lo que tiene que ver con el voto del exterior”.

Mujica se refirió específicamente al plebiscito por el voto epistolar: “Creo que debe haber en una parte del pueblo uruguayo, la idea de que, por un lado, como recurso (el voto epistolar) no ofrece las garantías necesarias. (...) No es un tema acabado para una pequeña nación que tiene una parte muy importante de su gente (afuera)”. Astori recalcó que el resultado refleja “la voluntad del pueblo uruguayo”.

“Tenemos que aceptar con serenidad la decisión que ha tomado la sociedad. Cuando se toma una decisión que no coincide con la voluntad que hubiéramos tenido al respecto, nos tiene que quedar la tranquilidad de que fue un pronunciamiento democrático”.

El presidenciable señaló que este balotaje definirá el "rumbo de la nación", porque se decidirá entre "un país que busca inversión, que busca que se reactive la economía y que haya redistribución, y otro que significa volver al pasado, a las crisis y demás". "Seguramente hay ciudadanos que nos quieran ayudar a lograr nuestro objetivo: (...) En estos 30 días nos mantendremos luchando sea cual sea el resultado", aseguró. Astori, por su parte, subrayó, frente a la interrogante de cómo se logrará captar votantes para el balotaje, que "desde el punto de vista electoral" se van a "dirigir a la ciudadanía en su conjunto y eso no debe ser confundido con la búsqueda de acuerdos fundamentales con otros partidos".

Lacalle teje alianzas con los colorados

Por su parte, el candidato del Partido Nacional agradeció el respaldo del candidato colorado para la segunda vuelta. En conferencia de prensa, Luis Alberto Lacalle agradeció el “noble gesto de Bordaberry, que ha anunciado el apoyo a nuestra candidatura, simplemente por coincidencia en nuestra manera de ver el país y de enfocar el futuro”.

El presidenciable nacionalista señaló que la ciudadanía este domingo “se tomó un mes más” para decidir quién será el próximo presidente y vicepresidente de la República, cargos que Lacalle se mostró confiado en ganarlos en noviembre: “Nosotros vamos a conducir el Ejecutivo. No a partir de la vanidad ni de la superioridad, sino porque somos la mejor opción para la seguridad, la paz y el diálogo”.

En cuanto a la campaña que encarará el Partido Nacional de cara al balotaje del 29 de noviembre, Lacalle dijo que no será una “campaña de partido. Son dos nombres en dos pequeños pedazos de papel. La vamos a encarar sin excluir a nadie, ni al Frente Amplio, ni al Partido Colorado, ni al Partido Independiente. Los ciudadanos nos expresamos en la segunda vuelta sin identificación partidaria”.

Mientras hablaba Lacalle, el público congregado en la plaza Matriz, donde está la sede del Partido Nacional, agitaba banderas de su partido y del tradicional rival, el Partido Colorado.

El MPP sigue siendo la fuerza mayoritaria en el FA

Aunque no fue la avalancha de votos prevista, el MPP con su lista 609, fue el sector más votado del Frente Amplio, acaparando un 33, 69 por ciento de los votos a la coalición. En segundo lugar quedó la subalianza Frente Líber Seregni integrada por Asamblea Uruguay, la 738 de Rodolfo Nin Novoa, y la lista 99000 de Rafael Michelini con cerca del 27 por ciento. En tercer lugar el Partido Socialista con poco más del 15 por ciento. Así la alianza entre el MPP y la 1001 (comunistas) obtuvo 7 senadores, y el acuerdo Frente Líber Seregni y los socialistas, lograron la misma cantidad. Los otros dos senadores son para el acuerdo conformado por CAP-L (encabezado por el ex tupamaro y mepepista Eleuterio Fernández Huidobro), la lista 77 (Vertiente Artiguista) y la 5005.

Dos sectores nuevos debutaron con banca, a la recién nombrada banca del senado para Fernández Huidobro, se debe registrar la diputación por Salto de Felipe Carvallo, del sector liderado por el ministro de Industrias y Energía, Raúl Sendic. Dentro del Partido Nacional, la votación del pasado domingo confirmó la hegemonía del herrerismo, que logró acaparar el 56,36 por ciento de los votos, repitiendo casi exactamente la votación en la interna partidaria.

En el Partido Colorado, Pedro Bordaberry, que no usó su apellido en las elecciones (sólo aparecía como Pedro) prácticamente se adueñó del partido al lograr el 61,25 por ciento de los votos.

Un Si un poco solitario

La campaña por el Si a la nulidad a la ley de caducidad (papeleta rosada) estuvo sostenida casi exclusivamente por los jóvenes. La generación que nació después de la dictadura fue la más preocupada por reestablecer la justicia. La campaña realizada abarcó nuevas formas de comunicación, como el uso de redes sociales de Internet para convocar actos y marchas, envío de mensajes de textos por celulares, etc. Esta campaña electoral mostró una renovación de militantes, y de formas de participación y convocatoria.

Aunque los partidos políticos que integran el Frente Amplio decidieron entregar las dos papeletas (el Si a la anulación de la ley de caducidad y el voto epistolar) los votantes resolvieron no incluir esas papeletas en el sobre de votación. Los candidatos frentistas tampoco le dieron gran espacio a la campaña por el Si en los dos plebiscitos, y sus comandos de campaña tuvieron que desarrollar una campaña electoral paralela, con mucho menos recursos.

La marcha por el Si a la anulación de la ley de caducidad del martes pasado hizo pensar que era posible alcanzar la mayoría especial del 50 por ciento más un voto, del total de emitidos (lo que incluye anulados y en blanco), y las encuestas también le daban cierta posibilidad. La primera encuesta boca de urna dio que era seguro el triunfo del Si a la papeleta rosada. Sin embargo, cuando las cámaras de televisión comenzaron a mostrar las primeras aperturas de sobres de votación, donde se veía que votos frentistas no llevaban las dos papeletas de los plebiscitos, o sólo una, la confianza en un triunfo comenzó a bajar. No sólo los votos al Frente Amplio no iban acompañados de las dos papeletas, tampoco la coalición de izquierda radical, Asamblea Popular, respaldó los dos plebiscitos.

Recién en la última semana, un sector de Asamblea Popular, el 26 de Marzo, comenzó a entregar con su lista la papeleta rosada, sin incluir el voto epistolar. También fue significativo que muchos votantes colorados, en una proporción casi similar a los frentistas, en el departamento de Montevideo, votaron por el Si a la nulidad a la ley de caducidad. El Montevideo, el Si a la papeleta rosada superó el 50,8 por ciento. Ahora, tras este resultado, el nuevo gobierno deberá intentar derogar la ley por vía parlamentaria para dar cumplimiento a los requerimientos de organismos internacionales, y para coordinar la legislación de defensa de los derechos humanos con los tratados internacionales firmados.

Además, la decisión de la Suprema Corte de Justicia de declarar la inconstitucionalidad de la ley en un caso, abre la posibilidad de presentar nuevas denuncias y recurrir a esa sentencia, aunque según expertos, los casos ya juzgados no pueden volver a ser presentados.

-. Ricardo Daher, periodista uruguayo, es analista e investigador.

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