Páginas, capítulos y tapas
Una fiesta de la lectura y la integración
12/02/2011
- Opinión
Comenzó la XX Feria Internacional del Libro Cuba 2011 en el recinto ferial de La Habana. Esta edición está dedicada a las culturas de los pueblos del ALBA y al Bicentenario de la primera independencia de América Latina y el Caribe.
Quedó inaugurada la vigésima Feria Internacional del Libro Cuba 2011. Entre el 10 y el 20 de febrero se desplegará en La Habana y hasta el 6 de marzo estará en todas las provincias del país. Libros, autores y público serán los protagonistas de la vida cultural del país. En esta ocasión la Feria está dedicada al escritor y periodista Jaime Sarusky y al filósofo y ensayista Fernando Martínez Heredia.
También se encuentran como invitados especiales alrededor de doscientas personalidades del mundo de las letras pertenecientes a 41países, como la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, el teólogo brasileño Frei Betto, el escritor mexicano Pablo Ignacio Taibo Dos, el ensayista y poeta jamaicano Keith Ellis, el narrador argentino Vicente Battista, el politólogo belga Eric Toussaint, y el profesor francés Herve Fischer. También los ministros de cultura de países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) como Argentina, Paraguay, Guatemala, Haití, Angola e Irán.
Cuatro millones y medio de ejemplares y 515 novedades literarias se pondrán en circulación durante los 25 días de la Feria Internacional del Libro Cuba 2011. Las presentaciones serán muchas, pero entre ellas se pueden destacar una colección de cuentos de autores angolanos, “Para nosotros la Patria es América”; una recopilación de documentos de Simón Bolívar; y una amplia variedad de literatura infantil y juegos para niños, entre otros.
En el acto de apertura de la Feria del libro, la ministra de cultura de Ecuador, Erika Silva, afirmó que “el ALBA promueve un espacio de integración cultural, de expresión de la rica diversidad cultural de nuestros pueblos, una de nuestras mayores potencialidades y orgullo, y con ello expresa la necesidad de compartirla, conocerla y vivirla”. Además, reconoció que eso es lo que refleja la actitud de Cuba “al designar las culturas del ALBA como invitadas de honor de esta prestigiosa Feria, ya que posibilita visibilizar nuestra rica realidad multicultural y multiétnica, evidenciar nuestros talentos, estimular el diálogo y debate de ideas entre nuestros escritores, cientistas sociales y filósofos”.
La funcionaria agregó que en este marco “logramos aproximar las problemáticas especificas de cada país y sus respuestas originales, ponernos de cara a la creatividad de innovación de nuestras industrias editoriales y, finalmente, compartir la cultura viva de nuestros pueblos expresada en la música, la danza, el teatro y otras manifestaciones culturales”.
Por su parte, la presidenta del Instituto Cubano del Libro, Zuleica Romay, destacó que, aún en medio de la crisis financiera internacional, la Feria del libro en la isla crece y se multiplica, e indicó que una muestra de ello son los 158 sellos impresores extranjeros y nacionales presentes este año y los más de seis millones de ejemplares y dos mil títulos puesto a disposición de los lectores durante 25 días ininterrumpidos.
Romay también recordó ante los asistentes en la inauguración que esta fiesta de los libros coincide con el aniversario cincuenta de la campaña de alfabetización, primera acción cultural de carácter masivo promovida a raíz del triunfo de la revolución cubana en 1959.
Los homenajeados, Jaime Sarusky y Fernando Martínez Heredia, fueron los encargados de cerrar el acto inaugural con dos breves pero cargadas intervenciones.
El escritor y periodista recordó que a finales de la década de 1940 y principios de la siguiente del siglo pasado, solo en tres o cuatro mesas mal iluminadas del Parque Central habanero se mostraban y vendían libros de editoriales de México, Argentina y España; y agregó que “tuvo que triunfar la Revolución para que autores como Alejo Carpentier vieran sus textos impresos en el país”.
Martínez Heredia, por su parte, enfatizó la importancia de “que la cultura cubana utilice su maravilloso desarrollo para alimentar bien a todas las personas de Cuba y fortalecer así los espíritus y las subjetividades que serán decisivas para vencer los desafíos y crear las nuevas realidades tangibles; y que la política que nos guíe, sea una cultura para la liberación"
Ahora los protagonistas los libros y un multitudinario, colorido y masivo público que se volcará hacia el complejo Morro-cabaña –sede de la feria- para disfrutar de la fiesta de las letras.
También se encuentran como invitados especiales alrededor de doscientas personalidades del mundo de las letras pertenecientes a 41países, como la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, el teólogo brasileño Frei Betto, el escritor mexicano Pablo Ignacio Taibo Dos, el ensayista y poeta jamaicano Keith Ellis, el narrador argentino Vicente Battista, el politólogo belga Eric Toussaint, y el profesor francés Herve Fischer. También los ministros de cultura de países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) como Argentina, Paraguay, Guatemala, Haití, Angola e Irán.
Cuatro millones y medio de ejemplares y 515 novedades literarias se pondrán en circulación durante los 25 días de la Feria Internacional del Libro Cuba 2011. Las presentaciones serán muchas, pero entre ellas se pueden destacar una colección de cuentos de autores angolanos, “Para nosotros la Patria es América”; una recopilación de documentos de Simón Bolívar; y una amplia variedad de literatura infantil y juegos para niños, entre otros.
En el acto de apertura de la Feria del libro, la ministra de cultura de Ecuador, Erika Silva, afirmó que “el ALBA promueve un espacio de integración cultural, de expresión de la rica diversidad cultural de nuestros pueblos, una de nuestras mayores potencialidades y orgullo, y con ello expresa la necesidad de compartirla, conocerla y vivirla”. Además, reconoció que eso es lo que refleja la actitud de Cuba “al designar las culturas del ALBA como invitadas de honor de esta prestigiosa Feria, ya que posibilita visibilizar nuestra rica realidad multicultural y multiétnica, evidenciar nuestros talentos, estimular el diálogo y debate de ideas entre nuestros escritores, cientistas sociales y filósofos”.
La funcionaria agregó que en este marco “logramos aproximar las problemáticas especificas de cada país y sus respuestas originales, ponernos de cara a la creatividad de innovación de nuestras industrias editoriales y, finalmente, compartir la cultura viva de nuestros pueblos expresada en la música, la danza, el teatro y otras manifestaciones culturales”.
Por su parte, la presidenta del Instituto Cubano del Libro, Zuleica Romay, destacó que, aún en medio de la crisis financiera internacional, la Feria del libro en la isla crece y se multiplica, e indicó que una muestra de ello son los 158 sellos impresores extranjeros y nacionales presentes este año y los más de seis millones de ejemplares y dos mil títulos puesto a disposición de los lectores durante 25 días ininterrumpidos.
Romay también recordó ante los asistentes en la inauguración que esta fiesta de los libros coincide con el aniversario cincuenta de la campaña de alfabetización, primera acción cultural de carácter masivo promovida a raíz del triunfo de la revolución cubana en 1959.
Los homenajeados, Jaime Sarusky y Fernando Martínez Heredia, fueron los encargados de cerrar el acto inaugural con dos breves pero cargadas intervenciones.
El escritor y periodista recordó que a finales de la década de 1940 y principios de la siguiente del siglo pasado, solo en tres o cuatro mesas mal iluminadas del Parque Central habanero se mostraban y vendían libros de editoriales de México, Argentina y España; y agregó que “tuvo que triunfar la Revolución para que autores como Alejo Carpentier vieran sus textos impresos en el país”.
Martínez Heredia, por su parte, enfatizó la importancia de “que la cultura cubana utilice su maravilloso desarrollo para alimentar bien a todas las personas de Cuba y fortalecer así los espíritus y las subjetividades que serán decisivas para vencer los desafíos y crear las nuevas realidades tangibles; y que la política que nos guíe, sea una cultura para la liberación"
Ahora los protagonistas los libros y un multitudinario, colorido y masivo público que se volcará hacia el complejo Morro-cabaña –sede de la feria- para disfrutar de la fiesta de las letras.
APM | Agencia Periodística del Mercosur | www.prensamercosur.com.ar
Facultad de Periodismo y Comunicación Social. Universidad Nacional de La Plata.
https://www.alainet.org/es/active/44369
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