El Ministro de la Presidencia, Danilo Chaverri, y el Presidente Ejecutivo del Instituto de Desarrollo Agrario (IDA) negociaron el viernes, 12 de Noviembre, con una delegación de ocho indígenas. La base de la negociación fue el documento que los indígenas le habían entregado al Presidente de la República, con motivo de la Segunda Caminata Indígena por la Tierra y Autonomía. En la reunión, que duró tres horas, el Gobierno se comprometió a algunas acciones concretas y prometió dar un informe sobre los avances a principios del año próximo. Los indígenas exigen estudios exactos sobre la situación de la tierra en sus territorios, con el objetivo de la recuperación de las tierras que les corresponden. Además, se deben solucionar algunos casos ejemplares como el de Luisa Bejarano, que desde hace diez años viene luchando contra la usurpación parcial de su finca. El Presidente del IDA se comprometió a hacerse cargo personalmente de estos casos. Al mismo tiempo, se elaborarán algunos estudios de la situación de tierra en territorio indígena. Además, se analizará la posibilidad de crear una Reserva Indígena en Altos de San Antonio, en la frontera con Panamá. Hasta ahora, los indígenas ngobes/guaymíes del lugar han carecido de esta protección. El Estado también ofreció fondos financieros adicionales para el desarrollo de los territorios indígenas. Sin embargo, no se profundizó este tema, ya que la estrategia de la Asociación Ngobegue fue concentrarse en sus reivindicaciones políticas. El Gobierno se comprometió a realizar una revisión de la legislación nacional, para detectar posibles contradicciones con los convenios internacionales, en primer lugar, el Convenio 169 de la OIT. Sin embargo, durante este proceso, no se aprobará la Ley de Desarrollo Autónomo de los Pueblos Indígenas, que está paralizada en los archivos de la Asamblea Nacional. El Ministro no quiso referirse al Proyecto Hidroeléctrico Boruca, el cual supuestamente es uno de los proyectos prioritarios del actual Gobierno, con el fin de exportar energía eléctrica hacia Honduras y México. El embalse de dicho proyecto inundaría todo el territorio indígena de Rey Curré. El Gobierno está interesado en el atraso del Proyecto de Ley de Desarrollo Autónomo, ya que dicha ley sería un arma adicional de los indígenas en su lucha contra la represa. Sin embargo, ellos pueden basarse en el Convenio 169 y otros convenios internacionales. En fin, la negociación puede verse como un éxito. El hecho de que el Ministro de la Presidencia haya negociado con la Asociación Ngobegue, significa que el Gobierno ya no ve en la -estatal- Comisión Nacional de Asuntos Indígenas CONAI el único representante de los pueblos indígenas. Evidentemente, los Ngobes que realizaron dos marchas del sur hasta la capital, han logrado que las organizaciones indígenas sean más respetadas.