Incertidumbre política y angustias económicas
Gobierno enfrenta primer paro
21/04/2004
- Opinión
Carlos Meza cumplió 6 meses en el gobierno, la Central Obrera
Boliviana medio siglo y la población boliviana es partícipe
de un escenario político enrarecido. Prácticamente todos los
medios de comunicación calificaron como de creciente
incertidumbre la gobernabilidad del país.
El presidente viajó al encuentro de su homólogo argentino y
juntos firmaron acuerdos para la venta del gas por espacio de
6 meses, incluyendo la salvaguarda de que "ni una molécula"
debe ser revendida a Chile, y otro de carácter migratorio que
busca paliar la situación de varias centenas de miles de
bolivianos y bolivianas que constituyen las nuevas "cabecitas
negras" –mano de obra barata- en el país gaucho.
En otras circunstancias el gobierno hubiera obtenido un
rédito formidable por los millones de dólares que obtendrá
Bolivia por la venta del Gas. En la situación actual ello no
es posible, salvo en algunos sectores del país, como Tarija y
Santa Cruz, cuyas élites políticas abanderan radicalmente la
propuesta de la venta de gas, habiendo llegado a amenazar
inclusive con aprestos separatistas.
Los intereses de las transnacionales petroleras que firmaron
84 contratos lesivos al interés boliviano, aprovechando la
política neoliberal del gobierno de Sánchez de Lozada,
esperan y presionan por mantener su privilegiada condición y
se han anotado un triunfo parcial pues, el anteproyecto de
nueva Ley de Hidrocarburos elaborado por el Poder Ejecutivo
mantiene el statu quo de los contratos del gobierno anterior.
En este contexto, el debate sobre el gas –en la práctica- ha
gasificado la situación política y hoy 22 de abril el
gobierno de Meza deberá enfrentar la prueba más difícil de su
condición "seismesina". Las universidades del país,
agobiadas por el escaso presupuesto están paralizadas, en
todas las ciudades con recintos universitarios ha habido
intensas movilizaciones en estos días y el escenario se ha
tensado al extremos que se espera una jornada mucho más
intensiva, bajo la consigna de "paro movilizado y con
bloqueos". El otro actor clave de la paralización está
constituido por los trabajadores del transporte que demandan
seguridad con relación al tema del precio de los
combustibles. La gasificación de la situación política
radica en que universitarios, transportistas, y las
principales fuerzas políticas no tradicionales junto a los
movimientos sociales relacionan y vinculan directamente sus
demandas con la exigencia de cambios profundos en la política
sobre hidrocarburos.
El contexto se enrarece mucho más con los rumores acerca de
proyectos golpistas a los que no estarían ajenos (por lo
menos a nivel de deseo) los partidos tradicionales que
todavía controlan las directivas de las cámaras de diputados
y senadores y la presidencia del Congreso que – en Bolivia-
también desempeña la función de Vicepresidencia de la
República.
América Latina debe prestar atención especial al curso de los
acontecimientos del día jueves 22. Ya el miércoles 21 la
policía que había permitido las marchas y bloqueos de los
universitarios, los enfrentó tratando de disolverlos.
La población paceña y de otros departamentos evocó con
preocupación los sucesos de mayo y octubre del 2003. Algunos
se frotan las manos. Otros esperan una respuesta ecuánime el
gobierno y un giro que le permita ampliar espacios de
negociación. Las cartas están echadas y las fuerzas
democráticas permanecen en vigilia.
https://www.alainet.org/es/active/6008?language=es
Del mismo autor
- Gobierno enfrenta primer paro 21/04/2004
