Para presentar un perfil presidencial es necesario sentar las bases de las condiciones sociales y políticas que se le impuso al pueblo de Bolivia desde el inicio de la república. La exclusión económica, social y política de más del 60% de la población boliviana (pueblos indígenas originarios), la exclusión política y social y la marginación económica de la clase obrera; y la marginación política de la clase profesional mestiza no se resuelve eligiendo un presidente “de buena familia” que haya sido “educado” en los Estados Unidos, o un industrial rico de la clase “alta”. Tampoco se resuelven los problemas sociales, políticos y económicos que vive el país, eligiendo un “indio” que quiera llevar a Bolivia a la época del Incario. Establecidas estas premisas creemos que el próximo presidente de Bolivia debe tener el siguiente perfil: Perfil Político: Tiene que tener un conocimiento profundo de los actores políticos internos: Indígenas, obreros, profesionales, industriales, empresarios, banqueros y principalmente políticos profesionales al servicio de intereses extranjeros y con ambiciones personales (oportunistas y prebendalistas). Tiene que conocer a los actores políticos externos: Estados Unidos, Empresas Transnacionales (petróleo y otros), y la mano económica de estos que son: Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional, Corporación Andina de Fomento, Banco Interamericano de Desarrollo, Organizaciones No Gubernamentales patrocinadas por grandes corporaciones. También, tiene que conocer quienes pueden ser aliados de Bolivia en la liberación de la hegemonía política, y económica de los EE.UU. y otros países industrializados en busca de recursos naturales y mano de obra barata. Perfil Económico: Tiene que saber que los problemas económicos de Bolivia no se resuelven globalizando (privatizando) la economía. La globalización de la economía es el instrumento que utilizan los países industrializados para apoderarse de los recursos naturales de países como Bolivia y generar mano de obra barata por la vía “legal y democrática” definida desde su perspectiva de explotación y abuso. No tiene que tener un Master para saber que no se puede vivir dignamente con 8 bolivianos al día. Tiene que saber que Bolivia necesita trabajos, que la gente con trabajo genera el sustento económico para construir escuelas y hospitales y no lo opuesto. Que la obligación de pagar impuestos es responsabilidad de todos los bolivianos y extranjeros que residen en Bolivia, incluyendo las transnacionales. Que Bolivia puede y debe industrializar sus recursos hidrocarburíferos, administrar sustentablemente sus bosques, desarrollar la ciencia e industria para el uso de la energía solar y eólica cuando se acabe el gas. Proteger el medio ambiente porque la absorción del dióxido de carbono por nuestra amazonía valdrá más que el gas en un futuro no muy lejano. Perfil Legal y Jurídico: Tiene que hacer respetar los derechos de todos, no sólo los ricos. Tiene que promover y favorecer leyes que protejan los intereses de los bolivianos y no de las transnacionales extranjeras. Tiene que saber que la salvación de Bolivia como república es una Bolivia unida con un gobierno económicamente robusto que vele por el bienestar de TODOS. Que el “sálvense quien pueda” es una propuesta mezquina de los ricos que tienen comprado el salvavidas económico. Que las corporaciones no son personas, por lo tanto no pueden tener los mismos derechos que las personas. Que las leyes deben ser administradas por jueces probos y no agentes internos de intereses extranjeros. Es inadmisible que se condone la corrupción con la excusa de “respetar” los procesos legales y jurídicos establecidos para proteger a los ladrones “decentes” de cuello blanco. Perfil Social: Tiene que saber que la sociedad no es su círculo de amigos, sino la diversa población que hace de Bolivia UNICA en el mundo. Que los niños, mujeres y ancianos son parte de la sociedad con derechos y necesidades que el ESTADO tiene la obligación de proteger y proveer, y que estas obligaciones no se deben dejar a las fuerzas de la “economía de libre mercado”. Que los pueblos originarios, excluidos y discriminados racialmente, no entienden el proceso de globalización porque no estudiaron en EE.UU. Tiene que ser un presidente con sensibilidad social que entienda que las diferencias étnicas, raciales y de idiomas son una ventaja para el país y no una carga social. Que la arrogancia social y racial son lacras que tienen que ser eliminadas. Perfil Educativo: Tiene que saber que la educación es una combinación de instrucción y cultura. Que la educación no es exclusiva de los ricos, que también entre los pobres hay gente educada. Que los analfabetos no son retardados mentales porque no saben leer. Que la instrucción no hace al individuo, sino lo opuesto. Que la instrucción es un derecho y no un privilegio. Que la cultura étnica está por sobre la instrucción pseudo-occidentalizada y alienante. Perfil Humano: El próximo presidente, por sobre todo tiene que ser un boliviano que quiera a su patria y a su gente. Un individuo que pueda darse cuanta que a pesar de su investidura no es más que otro habitante de Bolivia. Que tiene los mismos derechos y obligaciones como el más humilde de los bolivianos. Tiene que saber, que si estudió en Harvard o Yale es porque el resto de los bolivianos pagó por su educación primaria, secundaria y universitaria con sudor y sangre. Que la mayoría de los bolivianos no pudieron mandar a sus hijos a la escuela, muchos menos a tan prestigiosas universidades porque estaban TODOS TRABAJANDO para poder comer y sustentar la educación de otros. Tiene que saber que el robar o permitir que otros roben es un crimen de lesa humanidad, que es quitarles el pan de la boca a los sin voz. Que el entregar los recursos naturales del país a extranjeros, o nacionales, para beneficio propio es traición a la patria. Tiene que saber que si lucha por los bolivianos, los bolivianos darán su vida por él. Que no se debe tener miedo a los poderosos del mundo. No tener complejo de inferioridad, tan común en nuestra clase profesional “alta, de buena familia y educada en los EE.UU.”, atribuyendo a los extranjeros la capacidad de resolver nuestros problemas. Como reflexión, es importante notar que los extranjeros que ven en CNN lo que pasa en Bolivia, se sorprenden cuando ven un presidente y su gabinete que representa a una minoría racial blanca y no a la mayoría de “indios” protestando en las calles.