Día Internacional de los Pueblos Indígenas

19/08/1997
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Al celebrar este 9 de agosto el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, quisiera hacerlo mencionando un reconocimiento público al Estado Guatemalteco, a las instituciones, organizaciones, grupos y personalidades indígenas por los avances que se han dado en función del reconocimiento y respeto de los derechos de nuestros pueblos. Sin embargo, hechos y acontecimientos recientes no sólo en el país, sino en toda América, ponen de manifiesto que el camino que tenemos por delante está lleno de obstáculos. Transcurridos siete meses de la suscripción de la Paz firme y duradera entre el Gobierno de la República de Guatemala y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, no se ven suficientes esfuerzos ni voluntad política de las partes, sobre todo del Gobierno, para incorporar la participación plena y activa de los pueblos indígenas en los procesos de toma de decisiones para el cumplimiento de los compromisos asumidos en los acuerdos de Paz y en particular en el Acuerdo sobre Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas. Si bien las acciones que se vienen desarrollando desde las dos partes tienden a cumplir con los mecanismos formales que se desprenden de dicho Acuerdo, éstas no tienen todavía la sustancia y el contenido indispensables para ir construyendo la nación multiétnica, pluricultural y multilingüe, que al mismo tiempo permitan a los pueblos indígenas, en el contexto de la unidad nacional, construir y promover su desarrollo integral. Debo expresar que son preocupantes las disputas y divisiones que se dan entre organizaciones indígenas, lo que demerita y dificulta los esfuerzos que desde éstas se hacen en función del cumplimiento del Acuerdo de Identidad y las debilita frente al reto que supone la construcción de su futuro. Ante esta situación, en ocasión del Día internacional de los pueblos indígenas hago el siguiente llamamiento: 1. Al Gobierno de la República de Guatemala y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, a tomar con plena responsabilidad los compromisos asumidos en el Acuerdo sobre Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas, despojando sus iniciativas y acciones de cualquier intento de manipulación de los indígenas en torno a dicho acuerdo. 2. Que el mencionado Acuerdo no se convierta en distractor para seguir postergando la solución a la problemática histórica que afecta a los pueblos indígenas del país. 3. Terminar con la lamentable e indignante práctica del racismo, que se manifiesta, entre otras, en la actitud del Ministerio de Cultura, de otras instituciones gubernamentales y entidades nacionales de "disfrazar" a ladinos para representar a los indígenas, pues con ello se niega lo que éstos en realidad representan como portadores de culturas milenarias. Al mismo tiempo, hago un llamado a los hermanos y hermanas no indígenas a no prestarse para suplir la identidad del pueblo indígena. 4. Que el Organismo Legislativo acelere e impulse las reformas necesarias a la Carta Magna del país, buscando enriquecerla con un contenido multiétnico, pluricultural y multilingüe. 5. Reitero mi reconocimiento al mismo tiempo que valoro los esfuerzos que hacen los hermanos y hermanas de las organizaciones indígenas los cuales son encomiables y merecen el saludo y respeto de todos, por su trabajo en la búsqueda de una verdadera justicia pero al mismo tiempo es indispensable terminar con las disputas y las divisiones y buscar y fortalecer la unidad en la diversidad, en la lucha por el logro de nuestros objetivos comunes. 6. A nivel internacional, hago un llamado a todos los gobiernos del mundo a terminar con cualquier tipo de agresión, opresión y discriminación hacia los indígenas, promoviendo el reconocimiento y respeto de sus derechos. 7. A la ONU, a acelerar la aprobación de la Declaración Universal de los Derechos de los Pueblos Indígenas y a tomar las medidas pertinentes para impulsar la celebración del Decenio Internacional de los Pueblos Indígenas, el cual debe convertirse en un espacio que genere condiciones apropiadas que contribuyan al logro de la igualdad y la justicia entre las culturas. Libertad para los pueblos indígenas donde quiera que estén, en América y el mundo.
https://www.alainet.org/es/articulo/104409

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