La OEA se va, la crisis se queda
19/06/2005
- Opinión
La Misión de la OEA llegó el miércoles pasado y se fue el domingo 19, como
estaba anunciado previamente. Durante estos días, el hermetismo fue total
por parte del secretario general José Miguel Insulza sobre los resultados,
o no, de sus gestiones.
Pero por fin hoy, antes de partir, dio una rueda de prensa donde comenzó
reconociendo que no había logrado que las partes en disputa (Partido
Liberal Constitucionalista, PLC, Frente Sandinista de Liberación Nacional,
FSLN, y Gobierno) se sentasen a dialogar, aunque explicaba que estaba
satisfecho de lo que habían adelantado (lo que no explicó). Además
manifestó que él no consideraba su actuación un fracaso pues las partes
están tan polarizadas que es difícil conseguir resultados en tan pocos días,
pero que el trabajo de la OEA no terminaba aquí, sino que esta misma semana
regresaría, ya sea el mismo en persona o un representante del mas alto
nivel.
Insulza, al referirse a las partes, declaró que "no es suficiente solo
manifestar la disposición a dialogar sino que era necesario tener la
actitud para ello". E hizo un llamado público para que en los próximos días
no haya retrocesos y no aumenten las hostilidades y mientras sigan buscando
como sentarse todos en la misma mesa.
Respecto a las propuestas que han estado en la agenda estos días a través
de la misión de la OEA, se sabe básicamente que:
El PLC dice que están por el dialogo, que no ponen condiciones previas,
pero que lo que ya se hizo ahí esta (refiriéndose a las reformas
constitucionales que no acepta Bolaños) y que ahora tocaba mirar hacia
adelante. Estarían dispuestos a aceptar que las nuevas autoridades
pendientes de elegir (fruto también de las reformas constitucionales) como
son el director del Instituto de la Propiedad y del Seguro Social, fueran
propuestas por el presidente Bolaños. Y seguir el diálogo en torno a temas
sociales y económicos.
Por su parte, el Gobierno propone que las reformas constitucionales no sean
decisión del presidente ni de los diputados (PLC-FSLN), sino que se plantee
un referéndum para que sea el pueblo quien decida "y salir así del
empantanamiento".
El FSLN, en boca de Daniel Ortega, plantea también que lo ya hecho, hecho
está (refiriéndose también a las reformas), y que están flexibles y
abiertos a negociar todo de ahí en adelante. También propuso adelantar las
elecciones presidenciales y de diputados (que corresponderían en nov. del
2006) a noviembre de este año y que ahí se incluya un referéndum sobre el
TLC.
Por otro lado, tanto el Gobierno como diferentes organizaciones de la
sociedad civil le solicitaron a la OEA el monitoreo desde ahora mismo del
proceso electoral de cara al año próximo, ante sus serias dudas de un
posible fraude, al estar controlado el Consejo Supremo Electoral por
magistrados "pactistas" (danielistas y arnoldistas). La preocupación la
hacían extensiva a todas las fases previas, incluida la garantía para que
todos los partidos y candidatos/as que así lo deseen puedan participar en
las elecciones y no haya problemas de inhibiciones "obligadas" como ocurrió
en las últimas elecciones presidenciales y de diputados.
https://www.alainet.org/es/articulo/112257