África y FSM: oportunidades y desafíos

02/07/2006
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Entrevista con Oduor Ongwen, miembro del Comité Organizador Africano del Foro Social Mundial (FSM). Amigo de Cuba, graduado de Economía y Matemática, Oduor Ongwen, miembro del Comité Organizador Africano del Foro Social Mundial (FSM) --que tendrá lugar en enero de 2007 en Nairobi, Kenya--, visitó La Habana por estos días para compartir con los integrantes del Capítulo Cubano del FSM diversos puntos de vista sobre los preparativos de esta séptima edición que reunirá a movimientos sociales, articulaciones, redes y campañas de todo el mundo. En exclusiva para Caminos, Ongwen comentó algunas ideas de la agenda y la organización del evento de Nairobi. - ¿A qué oportunidades y retos se enfrenta África con la celebración del FSM 2007? Voy a comenzar por las oportunidades y luego comentaré sobre los retos. Como conoces el FSM fue creado con una visión específica; pero con el transcurso del tiempo la idea, la visión originaria se ha ido diluyendo. De manera que para nosotros celebrar el FSM en Kenya en enero de 2007 es una oportunidad para revitalizar ese concepto que dio origen al movimiento del Foro, pues muchos de los temas y problemáticas que se debaten dentro de sus espacios afectan de modo real y concreto a África tal vez más intensamente que a ninguna otra región del mundo. Si vemos el Foro como una oportunidad única para la movilización política y el desarrollo de nuevas estrategias encaminadas a desarrollar acciones políticas a favor de los diferentes segmentos de nuestras sociedades, sin dudas África puede salir muy beneficiada, sobre todo si tenemos en cuenta las difíciles condiciones de pobreza, desnutrición, insalubridad, analfabetismo, violencia y desamparo en que vive la inmensa mayoría de su población. Desde luego, también hay retos. Uno de ellos incide sobre los movimientos sociales africanos que se encuentran muy aislados en sus respectivas luchas y como consecuencia, también, de las dificultades en la infraestructura física y social de nuestros países, que hace muy difícil organizar y movilizar a las personas en torno a una idea esencial: la lucha contra la globalización neoliberal. De manera que estamos hablando en términos de un desafío que representa, al menos, la posibilidad de encuentro y articulación para la unidad contra de la globalización neoliberal y el capitalismo. Ese sería el primer reto; el segundo está vinculado con la situación económica que vive este continente. Como sabes, África está tan empobrecida que reunir los recursos financieros para realizar un evento de esta magnitud en esta región del mundo, es un reto superextraordinario. Y el tercero, tal vez el más importante, se relaciona con la propia vida política de los diferentes países que conforman este continente. Tienes que considerar que los gobiernos africanos no gozan de autonomía en el proceso de toma de decisiones, es decir, las decisiones más importantes que se implementan aquí son adoptadas en Washington y estos son factores que marcan la vida de este continente y su desarrollo. Estamos sometidos a presiones de toda índole, no sólo los movimientos sociales, sino también los propios gobiernos locales, incluyendo al de mi país. Sin embargo, a pesar de todos estos obstáculos, estamos convencidos de que como actuamos del lado correcto, vamos a vencer cualquier desafío por difícil que sea. - ¿Qué elementos de aglutinación y articulación podría dejar la realización del FSM para África y para la relación de este continente con los movimientos sociales, redes y campañas del resto del mundo? Para los diferentes movimientos sociales que actúan desde ejes muy locales y específicos, el Foro puede convertirse en un punto de encuentro, en una oportunidad para desarrollar diversas aglutinaciones, convocatorias y movilizaciones, pero, sobre todo, para demostrar que las luchas locales sí están relacionadas, sí están vinculadas; ya sea el tema del medio ambiente, los conflictos, la pobreza, y entender que, como consecuencia de la estructura económica mundial, África está sufriendo todos estos males. En realidad los problemas sólo son síntomas. Lo verdaderamente esencial sería que los movimientos africanos que luchan contra el neoliberalismo identifiquen la necesidad de unirse y aprovechen las experiencias del movimiento social mundial. Ahora bien, a más largo plazo, el Foro puede ser una plataforma que potencie nuevos conocimientos para que esos movimientos adquieran conciencia de la estrategia de su lucha al enfrentar problemáticas globales; es decir, se necesita pensar de una manera global, y es importante establecer estrategias de lucha globales y asegurarnos de que se puede cambiar el mundo a partir de una percepción global. Esto no significa el desconocimiento de aquellas victorias que se pueden ganar acá o allá. Por ejemplo, no se puede perder de vista cómo la revolución cubana ha ayudado a los pueblos de África en sus luchas. De no haber sido por esa contribución, Angola no hubiera triunfado y Namibia no hubiera obtenido su independencia, incluso, muchos de los cambios producidos en Sudáfrica no se hubieran hecho realidad. De manera que si bien es importante el enfoque global, también reconocemos y estimulamos las victorias locales. El movimiento de mujeres en África impulsa desde hace años, luchas y reivindicaciones que tienen como centro la defensa de sus derechos, la lucha contra la violencia y las discriminaciones, en este sentido, ¿habrá ocasión en el Foro de Kenya de poner en diálogo esas experiencias con las que realizan el resto de las mujeres del mundo? Este es un tema que está muy claramente definido porque existen cortes a las que asistirán mujeres de todo el planeta para ofrecer sus testimonios sobre sus retos, luchas, y las victorias que han obtenido en diferentes lugares y esferas de la vida. Dentro del Foro Social Africano, hemos realizado este tipo de contactos a partir del año 2000. En Kenya estará sesionando la Corte Mundial de Mujeres y también se organizan otros espacios que identifican las luchas y resistencias esta red global no sólo desde la perspectiva de África sino de todo el mundo. La cultura como expresión de lucha y resistencia estará igualmente presente en Kenya 2006. ¿Quisiera saber cómo se ha pensado integrar este eje al evento, teniendo en cuenta no sólo la capacidad movilizativa de las diversas manifestaciones culturales de la región africana, sino en la articulación de actores que trabajan por la defensa de la cultura que no es otra cosa que la defensa de la humanidad? Nosotros creemos que la cultura es un eje transversal del Foro. No la vemos sólo como una expresión artística, que también lo es, sino más bien como un instrumento valioso para la unidad y la lucha. En Kenya, mi país, la resistencia cultural fue una de formas fundamentales de resistencia frente al colonialismo. Muchas personas repudiaron y rechazaron las religiones europeas, y buscaron en sus religiones autóctonas el sustento para sus luchas. Se trataba de afianzar una parte esencial de la cultura de nuestra nación al mostrarles a las personas que Dios no estaba de acuerdo con las agresiones, ni las opresiones. Pero también el movimiento de resistencia cultural se nutrió de numerosas expresiones como la música, la poesía, el arte, el teatro, incluso, muchas de ellas fueron organizadas por pastores e intelectuales kenyanos. Luego de la independencia, hemos utilizado múltiples formas culturales como elementos aglutinadores y de resistencia frente a la dominación foránea y local. Entonces, queremos que todo esto tenga expresiones concretas en los diferentes espacios del FSM, de modo que el gran mosaico de la cultura africana --desde El Cairo, hasta Ciudad El Cabo, de Mali a Somalia---, no sólo esté presente sino que sirva como puente de articulación con las culturas del todo el mundo. - Se ha dicho, con inteligencia, que realizar el FSM en Kenya no quiere decir que se mire a esta región del mundo desde la óptica de la "caridad", sino desde la auténtica solidaridad. Frente a un sistema mundial que potencia cada vez más, el individualismo y el egoísmo, ¿qué significa esto? Los foros sociales mundiales han sido una importante vía para expresar solidaridad internacional con numerosos pueblos, luchas y movimientos de todas partes del mundo, sin embargo, creo que solidaridad sin acciones concretas puede convertirse en un concepto vacío, hueco. Es nuestro deseo que en el FSM de Kenya la palabra solidaridad sea una expresión afirmativa y consecuente que permita implementar acciones prácticas y conjuntas entre movimientos, redes, campañas y articulaciones a nivel regional y global. - Idania Trujillo, periodista cubana, trabaja en la revista Caminos que publica el Centro Memorial Dr. Martín Luther King de la Habana.
https://www.alainet.org/es/articulo/115828

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