Al amanecer del 28 de junio de 2006, el Congreso de la República del Perú ratificó el Acuerdo de Promoción Comercial Perú-EE.UU=TLC Perú-EE.UU (Tratado de Libre Comercio Perú-Estados Unidos). Esta consumación ha sido contra la voluntad de los campesinos, productores agrarios y pueblos del Perú; porque estos postularon la dignidad, soberanía nacional, seguridad y soberanía alimentaria del Perú, otra integración es posible y no el TLC, a estas banderas adjuntaron la solicitud de la realización de un referéndum nacional para conocer de que cuantos peruanos están a favor del TLC y cuantos peruanos están en contra del TLC, lo cuál fue rechazado por el Congreso bajo la fundamentación de inconstitucionalidad. El ratificado Acuerdo establece el principio de trato nacional (TN) y nación más favorecida (NMF). El TN, conlleva a que en nuestra patria, el Perú; ya no existirá la priorización para los peruanos, por el contrario podrán ser tratados por igual, tanto los estadounidenses y peruanos e incluso algunos trasnochados neoliberales vaticinan diciendo que con este Acuerdo los peruanos ya somos ciudadanos del mundo. ¿puede un peruano en los EE.UU. ejercer el voto secreto universal para elegir el Presidente de la República Federal de los EE.UU.? Estamos seguros que no. Acaso no estamos informados que el gobierno yanqui en los EE.UU., persigue a los inmigrantes latinoamericanos y construye muros de contención en la frontera Estados Unidos-México, a fin de evitar a que los mexicanos ingresen al territorio yanqui. La NMF, consiste en barrer con las dizque trabas existentes para el libre ingreso y salida de mercancías, productos, patentizaciones, inversión, etc. Esta “norma” se extiende desde la Organización Mundial del Comercio (OMC), sin embargo en América Latina no se venía aplicándose, por lo que los EE.UU. a los que conforman el TLC los hace poner en ejecución a través del Acuerdo. Amparados en estas falsillas, las empresas transnacionales de los yanquis de los EE.UU., en nuestra patria constituirán empresas de radiodifusión (como accionistas con nacionales), puertos marítimos, aviación, industrias, seguros y bancos, comercio transfronterizo (comercio electrónico), medio ambiental, laboral o será parte de las normas políticas de los trabajadores, comercio de telecomunicaciones, medicamentos de salud y contrataciones públicas, como también podrán llenar los mercados de alimentos del Perú con productos agrarios en desmedro de nuestros compatriotas de las comunidades campesinas y productores agrarios, todo gracias a las “obras” de los congresistas ratificadores del Acuerdo, y estos parlamentarios corresponden a los años: julio 2002-julio2006. El Acuerdo gobierno de Toledo-Estados Unidos, es un macro proyecto integral y sistémico. Es una derrota política Casi desde las fechas que se lanza el ALCA (Área de Libre Comercio de las Américas) y los TLC, se ha venido levantando las banderas de la dignidad y soberanías nacionales (soberanía de nuestra patria y alimentaria) del Perú y otra integración es posible: (i). La dignidad patriótica que significa que nuestro país no podrá comprometerse en los actos guerreristas, terroristas, intervencionista y ocupación militar y política de los Estados Unidos de Norteamérica en los asuntos internos de los países subdesarrollados, (ii). La responsabilidad de producir para la alimentación de los pueblos y trabajadores por los ciudadanos comuneros productores agrarios, campesinos y productores agrarios, (iii). El derecho de decidir de manera soberana la producción alimenticia para nuestros compatriotas y el derecho de autodeterminación política de nuestra patria, y; (iv). El impulso y el forjamiento de la integración andina, sudamericana, latinoamericana y americana desde la iniciativa de los pueblos, trabajadores y campesinos como alternativa frente a TLC, Plan Colombia, Plan Patriota y el ALCA., han sido derrotados. Estos valores patrióticos, soberanos e imprescindibles han entregado a las empresas transnacionales de los Estados Unidos los congresistas al ratificar el TLC Perú-EE.UU. Por eso, los 79 congresistas que ratificaron el Acuerdo de Promoción Comercial Perú-EE.UU. son traidores a nuestra patria, el Perú; como también es traidor a nuestra patria, el Perú; Alejandro Toledo Manrique. No contento con esta traición, el Presidente Toledo durante los días 9-11 de julio de 2006 se encuentra en los EE.UU. pidiendo favores a los parlamentarios yanquis a que ratifiquen el TLC Perú-EE.UU. De esta manera, Alejandro Toledo, es traidor y sirviente fiel del imperialismo de los Estados Unidos de Norteamérica. Hay que admitir, que esta es una derrota política de dimensiones estratégicas. Aunque, el Paro Nacional Agrario del 4 de julio de 2006 que ha recibido el apoyo de segmentos importantes de los trabajadores y pueblos, deja constancia que a la derrota podrán revertir en cualquier día o tiempo. A este mamotreto abiertamente pro-yanqui dieron fuerza la embajada de los EE.UU. en Lima, los exportadores e importadores y los partidos políticos de la derecha como Unidad Nacional, Partido Popular Cristiano, APRA, Partido Democrático Somos Perú, Solidaridad Nacional y sectores de Acción Popular. Por la ratificación del Acuerdo anti-nacional, se jugaron del todo la prensa escrita, canales televisoras y estaciones de radiodifusión de la ciudad de Lima. A partir de la ratificación del Acuerdo pro-yanqui por el Congreso estadounidense, nuestra patria, el Perú; se habrá cercenado su soberanía nacional. Superar sectorialismo y localismo La mayoría de los peruanos han estado en contra del TLC=Acuerdo, sin embargo; no se ha logrado canalizarse en un solo torrente el cuestionamiento del TLC, cada organización popular, sindical y política a caminado por su lado, incluso poniendo en segundos o terceros lugares la lucha contra el TLC, sabiendo de que dimensión era este proyecto, sólo los campesinos y productores agrarios hablaron y cuestionaron con fuerza; el resto preferenció sus reivindicaciones sectoriales y locales. Si prosigue las luchas, así como están, cada sector por su lado y cada localidad por su cuenta, no se podrá lograr mayores cosas en provecho de los pueblos, trabajadores, campesinos y productores agrarios. Pues se trata de sacudirse y desempolvarse, luego dejar de lado posturas sectoriales y localistas, que permita acumular fuerzas, centralizar organizaciones y fuerzas por desarrollar luchas de carácter nacional que tienen que ser de grandes dimensiones y de contenido patriótico, democrático e integracionista americano, principalmente patriótico y latinoamericanista. Estos trabajos, organización y luchas; tendrán que propinar derrotas estratégicas a los neoliberales y conservadores y a los partidos políticos de la derecha que es la representación política y económica del imperialismo yanqui de los EE.UU. de Norteamérica. Necesariamente, para estas tareas se requiere de edificar unas nuevas vanguardias políticas (los existentes es necesario refundarlas) de concepción y orientación patriótico, democrático y antiimperialista. Sobre todas las cosas está nuestra patria; el Perú y no el TLC. Las banderas de lucha post ratificación del TLC, que deberán caber en el seno de los pueblos, campesinos, productores agrarios y trabajadores son: (1) Abajo el TLC, (2) Peruanizar=nacionalizar las empresas de los estadounidenses asentadas que están operando en el Perú, (3) Mientras tanto, que las inversiones de los estadounidenses registradas que están operando en el Perú, paguen las regalías universales e impuestos a la renta, y; (4) Asamblea Constituyente para debatir y redactar nueva Constitución, no a la reforma constitucional del Congreso julio-2006-julio-2011-gobierno del APRA-Alan García Pérez