El Presupuesto Participativo
- Opinión
El Presupuesto Participativo o PP, no sólo tiene la virtud en que confluyan
Y de carambola, esta forma de Cogobierno, asesta un golpe mortal en la espina dorsal a viejas prácticas amigas de lo ajeno, los especialistas en la corrupción por lo alto y por lo bajo. Incluso muchos politiqueros inescrupulosos hoy, no resisten o toleran, en su orfandad de poder, que vayan dos gobiernos sin que les dejen partir la torta jugosa de billones, entonces, arman pataletas y hasta amenazan con revocatorias de mandato a la actual alcaldía. Pero es difícil que estos amigos del resentimiento prosperen en sus fechorías, dado que es mayor
En suma, este despliegue de PP, desarrolla una buena gobernanza y una gestión urbana basada en principios de integridad, inclusión, justicia social, cierre paulatino de la brecha de pobreza en la redistribución del ingreso, accesibilidad, transparencia, participación responsable en perspectiva de un Desarrollo Urbano Sostenible, fomenta los cambios políticos y fortalece las organizaciones. Ello, indudablemente, se revierte en la ciudad en crecimiento económico, desarrollo social y reducción de la pobreza. Y estos resultados serían inimaginables sin la interacción comunitaria en la gestión pública, léase haciendo efectiva las veedurías ciudadanas o por lo menos enterada de las obras en ejecución, con un conocimiento pormenorizado del valor de las mismas. Es de amplio conocimiento que uno de los mayores cánceres que carcomen nuestra sociedad es la corrupción y nada mejor para acabarla que involucrando a la ciudadanía en los gobiernos. Son considerables las ventajas en donde se profundiza el ejercicio democrático, se responsabiliza al Estado frente a la ciudadanía, se favorece la modernización de la gestión pública; los ciudadanos pasan de ser simples observadores a ser protagonistas de lo público, es decir, ciudadanos plenos, activos, críticos, exigentes.
Compartimos, en cierta medida, el sentimiento de velocidad de quienes consideran que el ideal de un PP es contar de entrada con un 50% del presupuesto de la localidad. Pero la verdad es que una planeación de esta naturaleza no se da de golpe y porrazo. Ello tiene sus propios desarrollos y sus propias dinámicas. Ya es una condición básica contar con una clara voluntad del mandatario, y nuestro alcalde la tiene. No menos importante está la presencia y el interés de la sociedad civil y sus organizaciones. En cuanto a la definición de reglas del juego claras, esta ciudad las ha ido perfeccionando: tiempos, etapas, montos presupuestales y criterios tanto de repartición entre territorios como criterios técnicos para decidir una obra, pues el sólo deseo no basta para orientar, saber trenzar, ojalá ayudados en salidas de campo, el saber técnico con el saber popular. Además es una experiencia que abre la mente de los líderes a la ciudad en su conjunto y ya no sólo de sus necesidades comunales.
Las administraciones que han incorporado estos procesos de PP, deberán tener muy presente el entrenamiento que deben dar tanto a la sociedad participante como a su funcionarios, pues el modelo es novedoso.
Este PP es toda una oxigenación a
- Mauricio Castaño H. es Historiador
Fuente: Semanario Virtual Caja de Herramientas
Corporación Viva
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