Denuncian centros de detención de inmigrantes

25/03/2009
  • Español
  • English
  • Français
  • Deutsch
  • Português
  • Opinión
-A +A

Decenas de miles de detenidos entre ellos, victimas de tortura, de traficantes de humanos, y solicitantes de asilo político, sufren en centros de detención estadounidenses sin poder pagar fianza, o recibir una audiencia que demuestre su culpabilidad o permita su libertad.

 Entre los detenidos se encuentran ciudadanos estadounidenses y residentes legales, afirma la organización humanitaria Amnistía Internacional.

En su reporte: “Encarcelados sin justicia; detención migratoria en EEUU,” la organización muestra como desde 1996 el numero de prisioneros por violaciones a las leyes de migración era de 10,000, en 2008  rebasó los 30,000, y se espera que aumente en este año.

Sarnata Reynolds es Directora de Política sobre Derechos de Refugiados e Inmigrantes de Amnistía Internacional USA.

Reynolds participo en la redacción del nuevo reporte de AI y admite que no se sabe con certeza cuantos centros de detención hay en la Unión Americana. 

Señala que se tiene información de 350 contratos entre el gobierno federal y cárceles locales, la existencia de seis centros a cargo de ICE, [Immigration and Customs Enforcement], la policía de migración,  y otros seis grandes centros privados, en total, como 370 por todo el país.

¿Entonces la red de centros de detención de ICE es como la de la CIA, donde se sabe de las prisiones de Abu Ghraib y Guantánamo pero se ignora el verdadero numero de cárceles secretas alrededor del mundo?

“El hecho de que muchos son encarcelados y la llave de la celda es tirada a la basura, en eso se parece,” dice Reynolds.

Y aunque se supone que esas entidades deben cumplir con reglamentos internacionales sobre el trato de prisioneros, la falta de supervisión permite que detenidos por violaciones a leyes de migración, [una falta administrativa, no un crimen] sean esposados, encadenados de la cintura, y restringidos de las piernas, junto a reos que cometieron ofensas criminales.

Reynolds rechaza que  la situación que atraviesan los prisioneros en centros de detención de migración sea idéntica a la de los secuestrados y desaparecidos en el programa “Rendición Extraordinaria: de la Central de Inteligencia estadounidense.  

Pero admite que la constante trasferencia de detenidos de un centro a otro del país es un problema.

“primero que nada ellos no son notificados de la transferencia hasta momentos antes de partir, no pueden avisar a sus familiares o abogados si es que tienen, y terminan a cientos o miles de kilómetros de distancia, lejos de familia o abogado que les puedan ayudar,” acota Reynolds.

Eso hace difícil la impartición de justicia y es bastante desmoralizador pues el detenido se encuentra lejos de su familia.  

El reporte de Amnistía Internacional indica que para poder encerrar todos sus detenidos, la  policía de migración y aduanas, ICE, [Immigration and Customs Enforcement], ha tenido que llevarlos a cárceles del estado y el condado.

Algunos prisioneros permanecen detenidos por largo tiempo debido a que no tienen suficiente dinero para pagar los altos costos de fianzas impuestos por los jueces. 

Y aunque la ley permite que el detenido pague la cuota minima por la fianza, hay un creciente numero de jueces dispuestos a cobrar grandes sumas de dinero por ella, lo cual garantiza que los prisioneros pasaran un largo tiempo tras las rejas.

Algunos residentes permanentes detenidos en los centros penitenciarios están allí por violaciones tan pequeñas como la posesión de un pase de trasporte publico robado. 

Otros ciudadanos estadounidenses o residentes permanentes han estado meses o años encerrados antes de que pudieran probar que sus violaciones a la ley no los hacían deportables.

En el reporte de la organización defensora de los derechos humanos se menciona el caso del Senior W. un ciudadano de Minnesota, que tuvo que quedarse en la prisión trabajando un mes por un dólar al día para poder reunir los $30.00 dólares necesarios para adquirir una copia de su certificado de nacimiento.

En los últimos cinco años, 72 personas han perdido la vida dentro de los centros de detención y eso es preocupante, señala Sarnata Reynolds

Las drásticas leyes usadas hoy día contra la población inmigrante indocumentada fueron aprobadas en gran medida, durante la presidencia de William [Bill] Clinton en 1996, poco después del atentado contra el Edificio Federal de Oklahoma City.

A pesar de que  la explosión fue supuestamente causada  por un ciudadano estadounidense que simpatizaba con milicias armadas y supremacistas blancos, los que están recibiendo la ira del gobierno son los inmigrantes.

El encarcelamiento de indocumentados cuesta al gobierno  un promedio de $95.00 dólares diarios por persona, el cual se traduce en cientos de millones de dólares anuales, que son pagados con los impuestos de los estadounidenses.

Eso sugiere un lucrativo negocio para el complejo industrial carcelario.  ¿Acaso contribuye al fortalecimiento de la quebrantada economía estadounidense?

“No cabe duda que es un gran negocio, la población carcelaria de inmigrantes es la de mas rápido crecimiento en el país,” dice Reynolds.

- Fernando Velazquez es el Director del Proyecto “Informativo Pacifica,” programa de radio que se transmite en emisoras de cuatro países del continente americano.

https://www.alainet.org/es/articulo/132970?language=en
Suscribirse a America Latina en Movimiento - RSS