A la memoria de Andrés de la Garza en el primer aniversario de su fallecimiento.

 

¿Es posible un mundo sin guerra, dirimiendo los conflictos sin violencia? ¿Es posible el desarme ahora, la prohibición de arsenales nucleares, la eliminación de otros instrumentos bélicos convencionales y sofisticados?

 

Sin eufemismos, afirmamos que sí debemos y podemos trabajar por una auténtica geopolítica de la paz y la economía de la vida, contra: el crimen financiero comercial de lesa humanidad, el narcopoder, el desperdicio de recursos y el deterioro del ser humano y los ecosistemas.

 

 La crisis que actualmente vive el mundo y los Estados nacionales, en buena parte es atribuible a la industria y el comercio de armamentos que exigen inconmensurables gastos y generan un enorme desperdicio de recursos. Además de la amenaza a la humanidad que lo anterior representa, se cancelan oportunidades para resolver a fondo necesidades básicas de miles de millones de congéneres, especialmente jóvenes y niños.

 

 Por consiguiente, saludamos la comparecencia del primer mandatario del pueblo norteamericano Barack Obama en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para la no proliferación nuclear y el desarme.

 

Votamos porque sus palabras se traduzcan en hechos diplomáticos exitosos con las demás potencias, avalados con el ejemplo; así mismo que tenga el acierto y el valor de ampliar y profundizar el control sobre las otras formas de matar al hombre y a la naturaleza como son las armas químicas de síntesis en laboratorio, las microbiológicas, las electromagnéticas y genéticas. También sugerimos ponga la debida atención en el trafico de personas y órganos humanos.

 

 Como latinoamericanos hemos conseguido una región libre de armas nucleares y la deseamos sin bases militares estadounidenses; además hacemos a nivel global el correspondiente exhorto por la gradual desaparición de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

 

 Invocamos al espíritu superior que vincula el interior de cada individuo con el Cosmos para que abra el entendimiento y mueva el sentimiento de los estadistas responsables de la vida y la calidad existencial en la Tierra. Gandhi logró la Independencia de la India bajo la consigna moral de la resistencia pacífica y la no violencia triunfante entre las grandes mayorías no obstante el derramamiento de sangre que se dio en su proceso histórico.

 

 Desde la sociedad civil organizada en organismos no gubernamentales (ONG) como es el caso de Constitución y República AC, reafirmamos nuestro propósito de coadyuvar en la construcción de un mundo sin guerra a través de instituciones y mecanismos funcionales de justicia y derecho nacional e internacional. Nuestra participación ya se reconoce necesaria junto a los Estados y los organismos internacionales a efecto de que tengamos injerencia como interlocutores válidos en las discusiones multilaterales en un ejercicio de autenticidad democrática a nivel global.

 

 En nuestra convicción es posible lograr un triunfo genuinamente humanista por encima del globalitarismo constituido por el imperio transnacional militar-industrial-financiero el cual manipula por la vía de muchos medios masivos de comunicación a las conciencias débiles y a las voluntades endebles a efecto de crear el consenso de la derrota orquestado por los señores de la violencia.

 

 Consideramos que es tiempo ya del real desplazamiento del paradigma de la seguridad nacional y el enorme gasto que representa hacia la efectiva cooperación internacional. Muere más gente de hambre y enfermedad a causa del estúpido modelo económico que lo apuntala.

 

 Al paso que se construye en cada país en vías de desarrollo una organización ciudadana sólida, políticamente participativa, popular, que garantice y preserve mandos preparados y confiables para dirigir, gobiernos transparentes y honestos, que realmente aspiren a la democracia y se consideren mandatarios, en tanto obedecen la voluntad del pueblo, debemos luchar por lo siguiente:

 

    * Erradicar la pobreza más allá de la mediocre línea de 1.25 dólares por día brindando oportunidades reales de empleo digno y remuneración equitativa a la aportación del factor de la producción denominado trabajo, estableciendo un salario mínimo universal.

 

    * La construcción de un sistema económico mundial para hacer viable y posible el crecimiento económico y la producción de bienes socialmente necesarios, así como la distribución equitativa de la riqueza y el ingreso, organizando con visión geopolítica por grandes regiones, en el marco de un modelo alternativo que parta de un nuevo orden monetario.

 

    * Realizar reformas hacendarias integrales que además de ser progresivas graven la riqueza extrema, la especulación y eliminen los paraísos fiscales.

 

    * Aprovechar integral y sustentablemente los recursos planetarios con obras de infraestructura física, educación, ciencia y tecnología de amplio acceso y cobertura con criterios de equidad social.

 

    * Formar empresas sociales a escala global integradas por pequeñas entidades campesinas, agrícolas y manufactureras, autónomas en su operación, las cuales compartan servicios comunes de abasto de insumos, apoyos financieros, gestión comercial y de tecnología, para abaratar costos y lograr escalas competitivas en los mercados regionales, nacional y mundial. La empresa social global en gran escala podría equilibrar el poder de los pequeños frente a las grandes corporaciones.

 

    * Denunciar, juzgar y condenar el crimen económico de lesa humanidad y tipificar el genocidio perpetrado por causas económicas perversas, tal cual ocurre con la mega especulación y la industria y comercio de armas letales.

 

 Ahí aguardan nuestra iniciativa el Tribunal Internacional de la Haya y la Corte Penal Internacional.