7ma Cumbre de la Organización Mundial del Comercio

Contra la OMC, porque un mundo mejor es urgente

27/11/2009
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A diez años de Seattle, Ginebra convoca al movimiento altermundialista
 
Ginebra, Suiza.- Con el trasfondo de la crisis mundial irresuelta y en la antesala de la Cumbre de la ONU sobre el Clima de Copenhague, el movimiento altermundialista se da cita este próximo fin de semana en Ginebra, Suiza.
 
 Ciudad en la que a partir del lunes 30 de noviembre se reunirán los representantes de 153 naciones en la 7ma Conferencia Ministerial de la “resucitada” Organización Mundial del Comercio (OMC). Con la hipótesis, tal como lo anticipa su director general Pascal Lamy, que “la conclusión del Ciclo de Doha podría ser el punto de partida de un relanzamiento de la economía a nivel global”.
 
Nuevamente la dinámica “Cumbre-Anti cumbre” aparece en la escena, en este caso europea. Exactamente diez años después que en Seattle naciera un nuevo tipo de movilizaciones ciudadanas a escala planetaria.
 
La contestación casi espontánea que explotó en esa ciudad estadounidense en torno a la 3ra conferencia ministerial de la OMC un 30 de noviembre de 1999, se reproduciría luego en numerosas “anti-cumbres” diseminadas en los más alejados rincones del globo.
 
Pariendo, también, en enero del 2001 en Porto Alegre, Brasil, al primer Foro Social Mundial, punto de arranque de un proceso de siete ediciones auto convocadas por movimientos sociales y activas redes de la sociedad civil mundial.
 
La cita ginebrina
 
Una cuarentena de movimientos asociativos, ecologistas, sindicatos y plataformas de ONG convocan para este sábado 28 en Ginebra a una manifestación europea, bajo la consigna: “Contra la OMC porque un mundo mejor es urgente”.
 
Los organizadores, que convocan a una movilización “determinada, colorida y pacífica”, especulan con la presencia de no menos de 7 mil participantes. Los mismos, recorrerán las principales calles del centro de la capital europea de la ONU, pasando incluso por el frente de la sede central de la OMC, en la costa misma del Lago Lemán.
 
Dando inicio así a una contra-Cumbre de cuatro días, con debates, foros, conferencias (“Comercio y clima”; “Libre intercambio agrícola y ecología” etc.) y actividades diversas. Incluyendo “acciones simbólicas” y visitas guiadas de Ginebra “políticamente incorrectas” que se prolongarán hasta el jueves 3 de diciembre.
 
Día en que, simbólicamente, una caravana de campesinos del Sur partirá desde la ciudad helvética hacia Copenhague, para participar, a partir del 7 de diciembre, en la Cumbre climática alternativa convocada en la capital danesa.
 
 El ciclo de Doha de la OMC
 
 Vio la luz del día en 2001 en Qatar, durante la 4ta conferencia ministerial de la OMC y anticipaba finiquitarse en 3 años. La 5ta ministerial de Cancún le dio una estocada vital y los tiempos políticos y plazos empezaron a dilatarse. La última conferencia ministerial de la OMC se organizó en Hong Kong en 2005, y no permitió que las negociaciones avanzaran. Reanimada parcialmente en el 2008, el Ciclo de Doha vive un parate efectivo desde el 2006. El desafío de sus dirigentes actuales es intentar concluir las negociaciones a finales del 2010. Sin embargo, el proceso de Doha está en un punto muerto desde hace años, debido a enfrentamientos entre el Norte y el Sur. Sobre la mesa, una veintena de sectores de actividades que deberían ser negociados con la óptica de libre comercio total, sin ningún tipo de restricción o intervención estatal. Las negociaciones sobre temas agrícolas siguen constituyendo el freno central, especialmente dadas las sensibilidades e intereses contrapuestos de los bloques de países del Sur y del Norte. En un comunicado reciente Pascal Lamy, Director General de la OMC enfatizó haber constatado "un aumento del compromiso político (...) y un apoyo a una conclusión rápida del Ciclo de Doha". "Mi impresión es que mientras que la crisis económica empeoró desde principios del año, la atmósfera política en las negociaciones mejoró", añadió. Sin embargo, reconoció que la crisis económica mundial, que acarrea supresiones de empleos, tendría una influencia en las negociaciones comerciales internacionales.
 
El movimiento altermundialista no escatima sus críticas frontales a la OMC desde la perspectiva no sólo comercial sino también ecológica. Cada vez son más las voces que señalan que las actuales crisis climáticas y alimentarias están estrechamente ligadas al modelo agrícola dominante, en el cual la OMC tiene una responsabilidad esencial.
 
- Sergio Ferrari es Corresponsal en la ONU/Ginebra
https://www.alainet.org/es/articulo/138005?language=es
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