Poco tiempo antes de que esté lista la reglamentación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que permita implementar la norma, empresarios del arco kirchnerista obtuvieron una licencia para Canal 13 de Mendoza pisando al actual canal comunitario, y Radio Cooperativa usurpó el dial de la AM 770, que dos días antes sufrió un atentado contra su torre de transmisión.

 

 “Se cayó la torre”, anunció un trabajador del equipo técnico de AM 770 al director Sergio Marino, el viernes pasado. Diez minutos antes lo habían llamado para decirle que había un problema con los equipos. Bajaron el transmisor, solucionaron el tema y la radio siguió transmitiendo. Pero lo que no iban a imaginar es que la estructura de acero que sostiene la antena podía ser partida en dos y derribada. Por eso Marino insistió preguntando qué sucedía, “sí, se cayó” le contestaron.

 

Pero cuando fueron hasta el lugar donde se encuentra la antena, encontraron que no se había caído, sino que había sido derribada. La torre de AM 770 está en Ciudad Evita, en Ruta 21 y Camino de Cintura. Cuando llegaron al lugar vieron que habían cortado las riendas que sostenían la torre y que dan a una medianera, en forma intencional. Por esto mismo se realizó una denuncia policial y se abrió una causa penal.

 

Casi al mismo tiempo, Radio Cooperativa anunciaba su cambio de frecuencia. Las promociones de la radio el domingo posterior al atentado anunciaban la mudanza al 770 del dial de AM. El lunes los oyentes de Cooperativa, sorprendidos por no escucharla en el 740, empezaron a postear en Facebook preguntas, pronto encontraron la primera respuesta: “la mudanza”, pero al poco tiempo llegaron las palabras de integrantes de AM 770 contando lo sucedido y los mismos oyentes pidieron explicaciones.

Los integrantes de La Retaguardia que se emite por AM 770, entrevistaron a Luis D´Elía quien tiene el programa matutino Siete punto Cero en Radio Cooperativa y que al aire había dicho que suponía que en dial 770 antes había una “radio zonal”. El ex piquetero y varias veces vocero de las acciones del Gobierno, intentó despegarse diciendo que el “paga el espacio” y que la autoridad de aplicación deberían darle una nueva frecuencia a AM 770.

 

La Amplitud Modulada 770 funciona en Lomas del Mirador, partido de La Matanza, desde hace ocho años. Cuentan con un recurso de amparo que les permite transmitir y presentaron toda la documentación en el censo que lanzó la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA) antes de que la ley se judicializara. Su director, Sergio Marino, contó en el programa Los Locos de Buenos Aires de FM La Tribu que tienen al personal en blanco (locutores, operadores, periodistas) y “un plantel de gente que viene a hacer sus producciones independientes y de la noche a la mañana nos enteramos que no tenemos lugar donde trabajar, que no tenemos aire, nos encontramos con una torre derribada”. A esto se suma que el equipo transmisor debe estar quemado, porque al derrumbarse la torre estaba encendido, lo que provoca que se arruine.

 

Marino se reunió con el director de la AFSCA, Gabriel Mariotto, e Ignacio Martín Cingolani, director de Planeamiento y Desarrollo del organismo, quienes le dijeron: “Si tienen un permiso, prendan el equipo y empiecen a transmitir en la misma frecuencia”. El desafío de enfrentar una guerra a ver quién tiene la potencia más grande no convenció al director de la 770. Estaría compitiendo con una radio que está por alcanzar los 50 kilos de potencia, mientras la suya tiene 1,5 kilos. Además, tiene los equipos y la torre destruidos y seguiría quedando expuesto a las prácticas violentas como derribar la torre.

 

 

Radio Cooperativa tiene problemas con su frecuencia (740 Mhz) desde que el Comfer entregó, el año pasado, la licencia para transmitir en la 750 a un grupo impulsado por Víctor Santa María, conductor del Sindicato Único de Trabajadores de Edificios (SUTERH). El espacio en el que están las radios es además muy codiciado por encontrarse entre Radio 10 (710 Mhz) de Daniel Hadad y Radio Mitre (790 Mhz) del Grupo Clarín.

 

Sin embargo, no les alcanzó con planificar un aumento de potencia que los equipare con estas dos grandes radios. Definieron cambiarse de dial.

 

 

Esta mañana el colectivo Canal Giramundo se enteró por medio de la prensa de su provincia que la señal de canal 13 en la que funciona la televisión popular, comunitaria y horizontal, fue entregado por el Gobierno nacional a una sociedad conformada por el empresario mendocino Omar Álvarez y la empresa Electroingeniería, surgida en Córdoba pero con negocios en todo el país.

 

Según informa el diario Los Andes, propiedad de una sociedad entre el Grupo Clarín, el diario La Nación y otros inversores, Álvarez ya tiene negocios vinculados a la comunicación en San Rafael, Valle de Uco y Malargüe y General Alvear. Electroingeniería, a cargo de Gerardo Ferreyra, es dueña del canal 13 de Mendoza, por lo que esta jugada lo dejaría con dos canales de TV abierta compitiendo con canal 7 del grupo UNO de Vila y Manzano.

 

Llamativamente, más allá del Censo que el AFSCA propuso para relevar los medios que están emitiendo antes de la aplicación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, lxs compañerxs de Giramundo ven usurpada la señal en la que transmiten por grupos económicos con negocios en obras públicas, privadas y medios. Pero el cuco no resulta esta vez ni el grupo UNO, ni Clarín. Electroingeniería tiene en su haber el estudio Central Park donde funcionará la productora de 6, 7, 8 y se los relaciona con Julio De Vido y Carlos Zanini.

 

 

Ambas situaciones tienen en común el avasallamiento de un espacio comunicacional por grupos relacionados con el kirchnerismo. Pareciera que democratizar la comunicación fuera sólo tener más medios políticamente amigos, pisando la comunicación popular, comunitaria e incluso de pequeñas empresas.

 

Celeste Neyra - Red Eco- Argentina