El racismo y sus formas
19/03/2011
- Opinión
Aunque existan declaraciones, convenciones y leyes mundiales contra la discriminación racial, la metamorfosis es una realidad, y por ello, aún existen personas que son denigradas por sus rasgos o color de piel
El próximo 21 de marzo se conmemora, una vez más, el día contra la discriminación racial, decretado (por la casi inexistente) ONU, tras la masacre que perpetró el régimen del Apartheid contra una manifestación, la ciudad de Shaperville, Sudáfrica, dejando un saldo de más de setenta personas asesinadas por exigir el derecho a la igualdad entre los seres humanos. Para ese momento una minoría blanca tenía el dominio sobre una gran mayoría africana. A partir de ese hecho se desencadenaron una serie de medidas, tanto en lo interno en Sudáfrica como en el exterior. Se pasa a la lucha armada contra el régimen del Apartheid, liderizada por el Congreso Nacional Africano (ANC) -al cual pertenecía Nelson Mandela- y por otro lado, la lucha toma el escenario internacional y la Organización de Naciones Unidas (ONU).
De esta forma, la ONU aprobó en 1963 la declaración sobre la eliminación de todas las formas de Discriminación Racial y en 1965 la Convención Internacional en la misma área, expresando en su preámbulo “que toda doctrina de diferenciación o superioridad racial es científicamente falsa, moralmente condenable, socialmente injusta y peligrosa, y que nada permite justificar la discriminación racial, ni en la teoría ni en la práctica”. La década de los sesenta y setenta estuvieron marcados por las luchas anticoloniales y antimperialistas en África, Asia y América Latina, en las cuales el racismo y la discriminación eran símbolos del trágico dominio a que eran sometidos los pueblos.
Por presión de los movimientos sociales e intelectuales, así como de los gobiernos progresistas, la ONU aprueba en 1965 la convención antes mencionada, la cual se hace obligatoria para que los países la firmen y la pongan en práctica, participando en ella Venezuela desde 1967. Después en la década de los años setenta entre 1973-1982, se apertura el primer decenio de la lucha contra el racismo y la discriminación racial que azotaba el planeta. Pero ello no bastó pues el racismo fue adquiriendo nuevas formas de supervivencia. Ante esto la ONU desarrolló otro decenio contra esta aberración que iría desde 1983-1992 y el último que implementó la ONU fue del año 1994 al 2003, pasando precedida también de tres conferencias mundiales contra el racismo, realizadas las dos primeras en Ginebra (1978 y 1983) y la ultima en Durban, Sudáfrica en el año 2001, de donde se desprendió el plan de acción y el surgimiento del concepto de afrodescendientes, propuesto por los movimientos sociales y aprobados por los representantes de los gobiernos participantes en dicho magno evento.
El genocidio genético
Hoy la metamorfosis del racismo es una realidad. No bastaron las declaraciones, ni las convenciones, ni las tres conferencias mundiales y los tres decenios, sumándole a ellos las leyes aprobadas e instituciones creadas en diferentes países para acabar el racismo a nivel mundial en 51 años de lucha social e institucional (1960-2011). Con el avance tecnológico, de La genética, el cambio climático y el desplazamiento por los conflictos internos (caso Colombia), el racismo a tomado nuevas formas, aunándole la xenofobia y el problema migratorio que sacude a Europa, África y Estados Unidos. Pero lo mas novedoso del asunto está vinculado a la genética. Silenciosamente se esta produciendo un genocidio en el mundo contemporáneo, que marcha en contra de la corriente del gran descubrimiento a finales del siglo XX que fue el Genoma Humano que demostró que todos los seres somos iguales, expuesto por el inglés Chris Sitringer y Craig Venter quien afirmó que en su iniciativa del mapa del genoma humano “la raza es un concepto social y no científico”. Pero estas teorías mal intencionadamente han sido apartadas, momificadas y ahora mas bien las aplican perversamente de forma negativa en el EMPLEO, pues a través de la prueba del ADN prefiguran los tipos de enfermedades de las personas como hipertensión arterial o anemia falciforme, rechazándolas de antemano en algunas empresas y coincidencialmente estas enfermedades son genéticamente frecuentes en los africanos y sus descendientes. Nuevas formas de racismo, como el genocidio genético, el racismo vergonzoso por Internet, ameritan el esfuerzos de nuevas formas de luchas.
Apartheid
Esta palabra significa "separación" en afrikáans, fue un sistema social impuesto por los gobiernos de minoría blanca en Sudáfrica durante el siglo XX. Bajo este sistema los grupos étnicos estaban separados, y a la mayoría no blanca se le negaban numerosos derechos, como el de votar y el de libre circulación por el territorio nacional.
Jesús Chucho García
El próximo 21 de marzo se conmemora, una vez más, el día contra la discriminación racial, decretado (por la casi inexistente) ONU, tras la masacre que perpetró el régimen del Apartheid contra una manifestación, la ciudad de Shaperville, Sudáfrica, dejando un saldo de más de setenta personas asesinadas por exigir el derecho a la igualdad entre los seres humanos. Para ese momento una minoría blanca tenía el dominio sobre una gran mayoría africana. A partir de ese hecho se desencadenaron una serie de medidas, tanto en lo interno en Sudáfrica como en el exterior. Se pasa a la lucha armada contra el régimen del Apartheid, liderizada por el Congreso Nacional Africano (ANC) -al cual pertenecía Nelson Mandela- y por otro lado, la lucha toma el escenario internacional y la Organización de Naciones Unidas (ONU).
De esta forma, la ONU aprobó en 1963 la declaración sobre la eliminación de todas las formas de Discriminación Racial y en 1965 la Convención Internacional en la misma área, expresando en su preámbulo “que toda doctrina de diferenciación o superioridad racial es científicamente falsa, moralmente condenable, socialmente injusta y peligrosa, y que nada permite justificar la discriminación racial, ni en la teoría ni en la práctica”. La década de los sesenta y setenta estuvieron marcados por las luchas anticoloniales y antimperialistas en África, Asia y América Latina, en las cuales el racismo y la discriminación eran símbolos del trágico dominio a que eran sometidos los pueblos.
Por presión de los movimientos sociales e intelectuales, así como de los gobiernos progresistas, la ONU aprueba en 1965 la convención antes mencionada, la cual se hace obligatoria para que los países la firmen y la pongan en práctica, participando en ella Venezuela desde 1967. Después en la década de los años setenta entre 1973-1982, se apertura el primer decenio de la lucha contra el racismo y la discriminación racial que azotaba el planeta. Pero ello no bastó pues el racismo fue adquiriendo nuevas formas de supervivencia. Ante esto la ONU desarrolló otro decenio contra esta aberración que iría desde 1983-1992 y el último que implementó la ONU fue del año 1994 al 2003, pasando precedida también de tres conferencias mundiales contra el racismo, realizadas las dos primeras en Ginebra (1978 y 1983) y la ultima en Durban, Sudáfrica en el año 2001, de donde se desprendió el plan de acción y el surgimiento del concepto de afrodescendientes, propuesto por los movimientos sociales y aprobados por los representantes de los gobiernos participantes en dicho magno evento.
El genocidio genético
Hoy la metamorfosis del racismo es una realidad. No bastaron las declaraciones, ni las convenciones, ni las tres conferencias mundiales y los tres decenios, sumándole a ellos las leyes aprobadas e instituciones creadas en diferentes países para acabar el racismo a nivel mundial en 51 años de lucha social e institucional (1960-2011). Con el avance tecnológico, de La genética, el cambio climático y el desplazamiento por los conflictos internos (caso Colombia), el racismo a tomado nuevas formas, aunándole la xenofobia y el problema migratorio que sacude a Europa, África y Estados Unidos. Pero lo mas novedoso del asunto está vinculado a la genética. Silenciosamente se esta produciendo un genocidio en el mundo contemporáneo, que marcha en contra de la corriente del gran descubrimiento a finales del siglo XX que fue el Genoma Humano que demostró que todos los seres somos iguales, expuesto por el inglés Chris Sitringer y Craig Venter quien afirmó que en su iniciativa del mapa del genoma humano “la raza es un concepto social y no científico”. Pero estas teorías mal intencionadamente han sido apartadas, momificadas y ahora mas bien las aplican perversamente de forma negativa en el EMPLEO, pues a través de la prueba del ADN prefiguran los tipos de enfermedades de las personas como hipertensión arterial o anemia falciforme, rechazándolas de antemano en algunas empresas y coincidencialmente estas enfermedades son genéticamente frecuentes en los africanos y sus descendientes. Nuevas formas de racismo, como el genocidio genético, el racismo vergonzoso por Internet, ameritan el esfuerzos de nuevas formas de luchas.
Apartheid
Esta palabra significa "separación" en afrikáans, fue un sistema social impuesto por los gobiernos de minoría blanca en Sudáfrica durante el siglo XX. Bajo este sistema los grupos étnicos estaban separados, y a la mayoría no blanca se le negaban numerosos derechos, como el de votar y el de libre circulación por el territorio nacional.
Jesús Chucho García
https://www.alainet.org/es/articulo/148433?language=es
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