EEUU: Papeles y senderos bifurcados

12/04/2016
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°Los principales no están, y son gringos

 

° Capitalismo de atropellos, usura, crimen

 

Es como “el infierno” de los senderos que se cruzan: el de la conspiración para controlar lo necesario e imponer un NWO (Nuevo Orden Mundial) de los multimillonarios anglosajones. Parece de locos, pero es real (léase El Club Bilderberg de Daniel Estulin, en reciente visita a México).

 

En su poema “El jardín de los senderos que se bifurcan”, Borges habla del tiempo, de los tiempos relativos de todo lo existente. El intelectual Noam Chomsky, de que su país, los Estados Unidos, en tiempo presente tienen al mundo ante dos disyuntivas: la guerra nuclear o el desastre ambiental. Y con eso amenazan donde quieren.

 

Ni más ni menos que “el infierno de los senderos que se bifurcan”, que en tiempo real conducen a lo mismo. Por un lado: las guerras, el espionaje y desestabilización de los países para conseguir sus fines —al estilo del viejo imperio—. Por otro: imponer al mundo el “Gran Hermano”, con el control totalitario (tal y como lo describió Orwell en 1984, su novela de “ficción distópica” que describe dos mundos: el real y el utópico o el único posible y el distópico o irreal en el terreno político-social).

 

Como puede verse, la realidad parece compleja, pero no lo es. Einstein demostró que la verdad es simple, y con una pequeña fórmula (E=mc2) transformó la ciencia de su tiempo (también hizo relativo el tiempo, lo que confirmó la tesis borgeana, a diferencia de Newton y Schopenhauer). Y Hegel lo dijo antes que Marx.

 

Primero: EEUU actúa vs. el mundo. Y lo que preocupa e indigna es que no haya organismo, ni mundial ni multilateral, que le llame la atención y le ponga un freno a sus atropellos. Ni con el derecho internacional en mano, tampoco con las reglas de la economía mundial —que solo existen como imposición de guerra—, o desde la geopolítica global (Rusia y China lo hacen, pero a su modo, sin confrontaciones).

 

El caso es que Chomsky calificó recién a su propio país, en los siguientes términos: “los mayores ataques terroristas en la historia de la humanidad”, con drones y las guerras que han sido impulsados por Washington. Aparte, los mejores financistas del llamado “estado islámico” habitan en su propio territorio, o son grandes amigos de los gringos. Porque los principales enemigos del mundo actúan desde Washington.

 

Búsquese la doble disyuntiva. Primero amenaza con la guerra nuclear como espada de Damocles sobre la humanidad, los multimillonarios de EEUU acosan al mundo por todos los medios —más allá de teorías conspiracionistas—, para instrumentar el Nuevo Orden Mundial (NWO), cuyo precepto es el control poblacional y las mentes de los supervivientes (igualmente no quieren más allá de mil millones de seres humanos poblando el planeta).

 

Segundo que la violencia la carga en su seno: un capitalismo de atropellos. Desde el robo, la explotación del hombre, la usura, el crimen, el comercio ilícito, la inversión ventajosa, la ganancia rápida, el abuso a comunidades, enfermedades provocadas, destrucción de la naturaleza; así como el neoliberal deslinde del Estado de bienestar, la extracción de recursos, las plantaciones ilegales, etcétera.

 

En dónde quedan el “derecho”, la “justicia”, la “libertad”; carece de “moral”, de “ética”, de respeto por la vida; no le interesa la conservación de la naturaleza, la satisfacción de necesidades, el bienestar de los hombres, el respeto por las diferencias, a las comunidades, el apoyo al campo.

 

Ahí está EEUU, reconociendo que Usaid está detrás de los llamados “Papeles de Panamá”. Donde están todos, menos ellos.

 

Estados Unidos es un digno representante de la descomposición global. Desde el predominio oligárquico que ejercen unos cuantos (el mayor número de ricos son gringos), el control local de todas las ramas de la economía —yendo desde la agricultura monopólica hasta la electrónica y la robótica, con la industria armamentística a todo lo que da, como en los tiempos de la “guerra fría”—, donde el sistema financiero tiene el predominio global, la manipulación de los medios de comunicación, y los golpes de Estado en el exterior, llámese golpes suaves o de “estados fallidos”. Una burbuja a punto de explotar.

 

Entretanto, hacen hasta lo imposible para desestabilizar al mundo. ¿Conspiración será?

 

Correo: sgonzalez@reportemexico.com.mx

Twitter: @sal_briceo.

 

https://www.alainet.org/es/articulo/176676
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