El Ministerio de Hacienda publicó recientemente tres listas de deudores con el fisco. Dicha divulgación está amparada en el Artículo 277 del Código Tributario, según el cual “la Administración Tributaria difundirá por los distintos medios de comunicación los nombres de los sujetos pasivos que poseen deudas firmes, líquidas y exigibles”.

Son más de 560 millones de dólares en impuestos que el Estado no ha podido cobrar hasta el 30 de septiembre. De éstos 236 millones están en revisión en el Tribunal de Apelaciones de Impuestos Internos y Aduanas, 116 millones en demandas admitidas por la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Corte Suprema de Justicia y 210 millones son deudas ya remitidas a la Fiscalía para el respectivo cobro judicial.

Esta deplorable situación confirma la irresponsabilidad tributaria, sobre todo de grandes contribuyentes. Confirma, por tanto, la necesidad de combatir más eficiente y efectivamente la evasión, elusión y contrabando, mediante reformas legales e institucionales urgentes.

Una de éstas es la aprobación de la Ley de Cobro Coactivo, que otorgaría al Ministerio de Hacienda las facultades de cobro que actualmente posee la Fiscalía. Esta iniciativa, que duerme el sueño de los justos en la Comisión de Hacienda y Especial del Presupuesto de la Asamblea Legislativa, debería ser impulsada decididamente por el gobierno y todos los sectores decentes.

Otra sería una completa y exhaustiva revisión del Código Tributario para cerrar cualquier “portillo” a la evasión, revertir exenciones tributarias injustificadas y derogar o reformar las leyes que permiten elusión (evasión legal): leyes de Turismo, Zonas Francas, Servicios Internacionales, de Inversiones, entre otras.

Al mismo tiempo debe plantearse una política fiscal progresiva basada en el principio de que “paguen más quienes tienen más”. Como hemos dicho en muchos editoriales, esta propuesta incluye impuestos directos a los grandes patrimonios, ganancias empresariales y transferencias financieras; así como también a los bienes y servicios de lujo.

Así que, tras la publicación de las listas de deudores de la hacienda pública, todos los sectores honrados y decentes del país deben lanzar una fuerte campaña política y legal contra la evasión (elusión y contrabando) y en favor de la política fiscal progresiva. Recuperar los dineros de la corrupción y renegociar la deuda externa, deben ser también banderas de esta lucha patriótica.

Asociación de Radios y Programas Participativos de El Salvador (ARPAS)