Reforma agraria: camino para la soberanía alimentaria
- Opinión
Reforma agraria puede ser un asunto desconocido, o considerado inadecuado en algunos países, o puede parecer que se trata de nada más que una reforma – en contraposición a la revolución. Cuando hablamos de Reforma Agraria Popular estamos hablando de lucha de clases, de construcción de soberanías, de sueños de libertad.
El mundo tiene 4.400 millones de hectáreas de tierra apta para el cultivo, según datos de FAO, de las cuales cerca de 1.600 millones de hectáreasson cultivadas. El Grupo ETC informa que el campesinado produce el 70% de los alimentos consumidos en el mundo en aproximadamente un cuarto de esas tierras1. Esa superficie está disminuyendo, principalmente después de la crisis alimentaria de 2008, cuando intereses ligados a la diversidad del agronegocio – producción de alimento para ganado, biocombustibles, expansión de monocultivos para exportación, mercado especulativo, etc. – intensificaran el acaparamiento de tierras.
De acuerdo con Jean Ziegler, vicepresidente del Comité Asesor del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, el planeta tiene condiciones de alimentar 12 mil millones de personas2, y aunque la población mundial es de poco menos de 7,5 mil millones de personas,cerca de 750 millones de personas sufren hambre en el mundo. El hambre del siglo XXI no resulta de la falta de alimentos. Es un hambre fabricado por la especulación financiera, la concentración de riquezas, la conversión de cultivos alimentares en producción de commodities.
Según un estudio de Luiz A. Martinelli y otros autores3, “el área ocupada con alimentos consumidos directamente por la población está disminuyendo y existe un área significativa ocupada por pastajes ineficientes”. La expansión del agronegocio contribuye con el hambre porque su objetivo no es la producción agropecuaria en sí misma, sino la obtención de ganancias, aunque eso implique direccionar la producción agrícola para el alimento de ganado o agrocombustibles, atendiendo a mercados exteriores sin tener en cuenta las necesidades de la población local.
En otras épocas y lugares, cuando la organización fundiaria no fue capaz de garantizar la producción de alimentos y materias-primas necesarias, muchos gobiernos llevaran a cabo procesos de reforma agraria. Es probable que los que más impactos tienen en el mundo de hoy fueron los procesos de reforma agraria ejecutados por la burguesía industrial y la de servicios/comercio, la reforma agraria burguesa.
Ejemplos de reforma burguesa fueron los procesos de reordenamiento agrario que sirvieron de palanca para el desarrollo capitalista, principalmente en países del Norte Político, como Estados Unidos cuando en 1862 Abraham Lincoln promulgó la primera ley de reforma agraria, los Homestead Acts, que en su primer decreto permitía a cada ciudadano que trabajabaen el camporecibir hastaunos 160 acres de tierra.La reforma agraria fuefundamental para el desarrollo en los países que la ejecutaran, porque generapuestos de trabajo, alimentos y materias-primas locales y mercado consumidor para las industrias.
La reforma agraria burguesa4 básicamente distribuye la tierra y ofrece algunas condiciones de producción a las personas asentadas. Su objetivo no es cambiar el modo de producción capitalista, sino darle un empuje. Siervos y esclavas no son consumidoras, pero campesinas sí. Es una reforma que moderniza las relaciones en el campo.
Esos procesos de reforma agraria significaron una disputa intra burguesía: la burguesía agraria contra las burguesías industriales y financieras; por ello el desarrollo en el campo, con la constitución de un campesinado productor y consumidor ha tenido mejor éxito en los países del Norte Político, que desarrollaran su industria y servicios a la vez que expandían su dominación hacia el Sur Político.
Actualmente, la apropiación de tierras por el agronegocio y su modo de organizar la producción es un impedimento moderno a la reforma agraria, incluso a una reforma agraria burguesa.
El agronegocio
Actualmente, el agronegocio domina la escena rural. Con el avance de la tecnología biomecánica, es posible producir en largas extensiones con pocas personas trabajando. El saber fue transferido para la tecnología, y el trabajo humano en el campo se resume a operarlas máquinas; las decisiones se basan en un número limitado de protocolos desarrollados en centros tecnológicos a miles de kilómetros de la producción agrícola.
El modelo productivo del agronegocio5 genera ejércitos de desempleados/as, retira saberes del campesino/campesina, y artificializa los productos, sean materias-primas sean alimentos. Esa artificialización se deriva de la estandarización de la vida producida en ese modelo. Para ser parte del mercado de commodities, los productos deben de ser homogéneos y así poder recibir un valor monetario global; por ello la estandarización, a través de transgenia, clonación, etc. Es la agricultura industrial, que se va alejando de la naturaleza y de los procesos naturales.
Obviamente, ese proceso tiene relevantes impactos en las personas, sea por el desplazamiento forzoso y enfermedades en el campo, sea por hacinamiento y problemas de salud6 en las ciudades, entre otros problemas sociales.
El agronegocio produce con un elevado coste para la sociedad, y disminuye la capacidad de consumo de las poblaciones desplazadas hacia las ciudades. Eso constituye un problema para la industria y el comercio, ya que la falta de consumoparaliza mercancías ya producidas y ralentiza la economía. Hasta ese momento, la solución ha sido una expansión del consumo en zonas como China e India, y guerras no declaradas, sean en contra de grupos terroristas, sean guerras internas como en Congo,sea la violencia social con índices de guerra civil, como es el caso de Brasil7; la guerra suele ser un buen negocio para quemar productos y calentar la producción industrial.
Al estar la reforma agraria clásica ultrapasada históricamente, y al ser el agronegocio un modelo dañino a la sociedad, los movimientos sociales campesinos articulados en la Vía Campesina proponen una reforma agraria popular.
Esa nueva función de la reforma agraria ya aparecía en los escritos del actual director general de la FAO, Jose Graziano da Silva, cuando en 1981 él afirmaba que
En ese sentido [de que el “nuevo campesino” no es solamente un personaje travestido, pero, construye también un nuevo papel político], también la antigua bandera de lucha – la reforma agraria – gana una nueva dimensión. Deja de ser una simple reivindicación de acceso a la tierra, para ser fundamentalmente una lucha por nuevo sistema de organización social y económica de la producción agrícola. El enemigo ya no es solo el latifundio, pero también el gran capital monopolista y sus aliados, de modo general. La reforma agraria pasa a ser vista no como una reforma para el fortalecimiento del sistema capitalista, pero como el primer paso que puede llevar a su propia superación.8
Esa nueva proposición de reforma agraria no nace de la noche al día, pero, conllevó su tiempo de estudio y maturación.
La reforma agraria popular
Al campesinado del siglo XXI no basta con estar integrados al mercado capitalista como consumidores y suministradores de productos agropecuarios. La reforma agraria debe ser parte de la lucha contra el capital, contra el patriarcado, debe ser parte de un proyecto de oposición a un modelo de sociedad opresor y explotador.
Aunque la transformación social o el socialismo sea objetivo de movimientos campesinos como el Movimiento Sin Tierra de Brasil (MST), aunados en la Vía Campesina, una reforma agraria popular por sí sola no lleva a ese cambio social. Pero, es parte del proceso de cambio, y entre otras formas, se conecta con otras categorías de la clase trabajadora por medio de la construcción de la soberanía alimentaria.
La construcción de una reforma agraria en eses moldes exige la participación de toda la sociedad, puesto que implica en distintas formas de relación campo-ciudad, con el rompimiento de la dicotomía rural-urbano, y construyendo nuevas formas de relación entre seres humanos y naturaleza.
Algunas de las bases de un proceso de reforma agraria popular indicadas por el MST9 son:
La tierra y todos los bienes de la naturaleza deben estar bajo control social y destinados al beneficio de todo el pueblo.
El agua y los bosques autóctonos son bienes de la naturaleza que deben ser tratados como un derecho de todos los trabajadores. No pueden tratarse como mercancías ni ser objeto de apropiación privada.
Las semillas son un patrimonio de los pueblos al servicio de la humanidad, y no puede existir sobre ellas la propiedad privada ni ningún tipo de control económico.
Toda producción será desarrollada con el control de los trabajadores sobre el resultado de su trabajo. Las relaciones sociales de producción deben abolir la explotación, la opresión y la alienación.
Debemos construir la manera en que se desarrolle la soberanía popular sobre la energía en cada comunidad y en todos los municipios. Desarrollar de manera cooperativa la producción de energía a nivel local, con diferentes fuentes de recursos renovables para atender las necesidades del pueblo.
El conocimiento debe ser un proceso de concienciación, liberación y de permanente elevación cultural de todos y todas las que viven en el campo.
Todas las personas trabajadoras deben tener derechos sociales garantizados, incluso el derecho a una vida sin violencia para todas y todos, independiente de edad, orientación sexual, género, etnia, cultura, etc.
El campo debe constituirse en un lugar de buen vivir. Donde las personas tengan derechos, oportunidades y condiciones de vida dignas.
Una reforma agraria con esas bases no es compatible con el modo de producción capitalista. No es posible hacer tal reforma agraria aislada de otros procesos sociales, y en coexistencia con la explotación y apropiación llevadas a cabo por las empresas transnacionales y el latifundio del agronegocio.
Una reforma agraria popular tendría impactos en toda la sociedad, por generación de puestos de trabajo, por aumento en la producción de alimentos saludable, por incremento en la apropiación y producción de conocimientos, por un dinamismo en la economía de modo general, entre otros elementos.
En 1985 Graziano da Silva escribió que la reforma agraria brasileña se justifica en los años 80 como una política social, independiente de los reflejos productivos que pueda tener. Eso significa que, antes de solucionarel problema del frijoly del arroz, precisamos decidir si los millones de trabajadores rurales de este país tienenderecho o no de serciudadanos brasileños.10
Además de esa estrecha conexión entre reforma agraria y democracia, Graziano da Silva asegura que la desigualdad en el acceso a la tierra es uno de los principales responsables de la pobreza estructural en el campo.
Luchar por la reforma agraria popular es hacer lucha de clase
La reforma agraria popular no puede andar sola. Es decir, su realización sin que sea de mano con otras medidas de cambio en el modo capitalista de producción, no es posible.
La reforma agraria que trae al debate la Vía Campesina no solo debe asegurar acceso y control sobre la tierra para quién la trabaje, sino que debe asegurar la Soberanía Alimentaria mediante la producción de alimentos saludables, a través de sistemas agroecológicos. Además, debe garantizar condiciones y derechos básicos como la salud, educación, tecnología y cultura a toda la población del campo. Un proyecto que no solo se limite al campesinado, sino que debe ser visto como una alternativa a los problemas estructurales del campo y de toda la sociedad.11
Prefiero utilizar la palabra “oposición” en lugar de “alternativa”, en el sentido discutido por Raymond Williams. La oposición es lo que puede suplantar, mientras que la alternativa puede coexistir. No hay coexistencia entre agronegocio y un campesinado organizado, que aboga por reforma agraria popular y soberanía alimentaria.
El MST lo tiene claro, las raíces de la Reforma Agraria Popular brotan y crecen de un único lugar – el enfrentamiento de los sujetos trabajadores contra las fuerzas del capital. La reforma agraria tiene que ser parte de la lucha de clases, y asumida por la clase trabajadora.
Aunque lleve el nombre de “reforma”, cuando tiene apellido “popular”, cuando su forma y contenido son opositores al capital, se trata de una de las piezas de un puzle revolucionario, donde se debe sumar la reforma urbana, la reforma de la previdencia, la reforma educacional, mirando la construcción de la libertad y de las soberanías de nuestros pueblos.
- Janaina Strunzak, campesina, es profesora de la ENFF/MST. Doctoranda de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), becaria Capes-Brasil. Miembro del GT Clacso Investigación militante: teoría, práctica y método, y del Grupo de Pesquisas Modos de Producción y Antagonismos Sociales de la Universidad de Brasilia (UnB).
Quién nos alimentará: La cadena industrial de producción de alimentos o las redes campesinas de subsistencia, Revista Biodiversidad, número 78, 2013-14, GRAIN
2¿La agricultura campesina y ecológica puede alimentar al mundo?, Instituto Argentino para el Desarrollo Económico – IADE, disponible enhttp://www.iade.org.ar/noticias/agricultura-ecologica
3A falsa dicotomia entre a preservação da vegetação natural e a produção agropecuária, disponibleenRevista Biota Neotropica, 2010http://www.biotaneotropica.org.br/v10n4/en/abstract?point-of-view+bn00110042010
4En la historia del mundo, evidentemente hubieron otros procesos de reforma agraria, llevados a cabo tanto en países capitalistas en luchas independentistas, cuando en países con intentos de construcción de otros tipos de sociedad, como URSS, China, Cuba, etc. Incluso hay noticias de una reforma agraria propuesta por Tiberius Graco, en el Imperio Romano.
5Esteban Daza Cevallos,Más agronegocio, menos Soberanía Alimentaria, 2015,http://porlatierra.org/docs/9aeb3186f1a965cae3d134a600ede652.pdf
6Veánselostrabajos de Marcia Riva, Atenção à saúde de pequenos agricultores do município de Encruzilhada do Sul – RS, Departamento de Fonoaudiologia, Centro Universitário Metodista, Porto Alegre, Brasil, 2008. De AlejandraPaganelli e talli. Glyphosate-Based Herbicides Produce Teratogenic Effects on Vertebrates by Impairing Retinoic Acid Signaling, Laboratorio de Embriologia Molecular, CONICET-UBA, Facultad de Medicina, Universidad de Buenos Aires, Argentina, 2010. Y de Christiane Senhorinha Soares Campos ,A face feminina da pobreza em meio a riqueza do agronegócio: trabalho e pobreza das mulheres em territórios do agronegócio no Brasil: o caso de Cruz Alta/RS, CLACSO, Buenos Aires,2011
7A guerra diária do Brasil contra os jovens, 2015, en http://www.cartacapital.com.br/sociedade/a-guerra-diaria-do-brasil-contra-os-jovens.html. Com mais mortes que Iraque, Brasil está em guerra e não sabe, 2013, enhttp://exame.abril.com.br/brasil/nem-iraque-nem-sudao-brasil-esta-em-guerra-e-nao-sabe/
8A Modernização Dolorosa, Rio de Janeiro, Zahar Editores, 1981, p. 140
9Programa Agrario del MST, diciembre de 2013.
10Para entender o Plano Nacional de Reforma Agrária, São Paulo, Editora Brasiliense, 1985, p. 101